viernes, 19 de agosto de 2011

“Me apuntaron con un arma, aceleré a fondo y pude salvar así, mi vida”

Eso denunció en la comisaría 24ª, el preceptor de la escuela Thompson de Alto Verde, Ernesto Gangli. Regresaba de trabajar cuando un hombre lo apuntó con una escopeta en la manzana 5.
Ayer, Ernesto Gangli, preceptor de la escuela de enseñanza técnica Nº 645 Coronel Martín Jacobo Thompson, ubicada en la manzana Nº 9 del costero distrito de Alto Verde, radicó una denuncia en la comisaría Nº 24 porque durante la tarde del martes, a las 17, luego de cumplir con su trabajo cuando regresaba por el terraplén del cardinal este a la altura de la manzana Nº 5, altura de las torres de energía eléctrica, fue sorprendido por dos hombres que se pusieron en su camino y uno de ellos lo apuntó con una escopeta, él sólo atinó a apretar el acelerador y huir del lugar.


Diario UNO de Santa Fe dialogó con el preceptor que narró cómo fueron las circunstancias en las que fue amenazado por un hombre armado, y por qué decidió realizar la denuncia policial en la comisaría Nº 24 de Alto Verde.


—¿Cómo se produjo la amenaza que usted denunció en la policía?
—Bueno, como siempre yo salí de cumplir con mi trabajo de preceptor en la escuela de enseñanza técnica Nº 645 Coronel Martín Jacobo Thompson que está en la manzana Nº 9, regresaba como lo hago siempre por el terraplén del lado este del distrito porque me permite llegar más rápido y cómodo que haciéndolo por calle Demetrio Gómez que es la principal que recorre Alto Verde, pero desde un par de años está sumamente congestionada de tránsito, y la verdad es que viví una situación indeseable y peligrosa.


Cuando pasaba por la manzana Nº 5 que es donde está la torre eléctrica de alta tensión, había dos hombres parados, de lejos observé que uno tenía una escopeta en su mano derecha, y la verdad es que pensé que se trataba de algún cazador que volvía de la isla o algo parecido, porque eso es bastante habitual en esta zona.


Pero cuando pasé cerca de ellos, el que estaba armado se puso frente a mi auto, y me encañonó a la cabeza, y en ese momento, sentí la muerte cerca, aceleré y me salvé. Por eso denuncié en la comisaría Nº 24.

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