La Justicia analiza la cadena de compraventa del Volkswagen Bora gris secuestrado por el fabuloso atraco. Dos gitanos quedaron en el medio antes de venderlo a quien lo puso al servicio de la banda.
El fin de semana del 8 y 9 de septiembre un grupo de asalto ingresó a la sucursal del Macro en la peatonal y se llevó un botín calculado en millones de pesos.-
Este jueves por la mañana recuperó la libertad Andrea Mónica N., la mujer involucrada en el robo al banco Macro de la peatonal santafesina el 8 de septiembre pasado. Luego de una semana de estar detenida, el juez de Instrucción Octava, Jorge Patrizi le concedió la libertad, aunque no la desvinculó por completo del caso.
La mujer regresaba de un viaje a Panamá cuando la policía de Córdoba junto con investigadores santafesinos, la convocaron el martes de la semana pasada para preguntarle por el auto Volkswagen Bora gris secuestrado en la autopista Santa Fe-Rosario el domingo del robo.
Según surgió en un primer momento, el coche figuraba como de su propiedad al momento del secuestro, sin embargo, en su declaración aparecen al menos dos compradores identificados. También existiría un tercer comprador sobre quien se investiga si fue el que puso el auto a disposición de la banda.
En Tribunales
Esta mañana, sus abogados Eduardo Medina Allende -cordobés- y Alejandro Otte -santafesino- acudieron a los tribunales locales para completar los trámites de rutina y recuperar efectos personales de la imputada.
“Mi clienta recuperó la libertad ayer 20 de septiembre al mediodía”, confirmó Medina Allende. “Vinimos a demostrar que no tiene nada que ver; y en realidad no pudo aportar demasiados datos sobre el robo porque no tiene idea de lo que pasó”.
Según explicó el abogado “trajimos desde Córdoba la documentación que prueba que el auto que habría estado implicado en el robo al banco Macro en algún momento estuvo en su poder, pero lo compró y lo vendió casi inmediatamente”.
La mujer de 37 años que reside en Tanti, en las sierras de Córdoba, se dedica entre otras ocupaciones, “a la compraventa de autos”, y a partir de una operación incompleta fue que quedó mezclada con el hecho delictivo.
Cadena de venta
“Es de uso en Córdoba entre quienes se dedican a la compraventa de autos no hacer en cada paso la transferencia, sino cuando el coche llega al destinatario final”, explicó el defensor particular.
También dijo que “cuando lo retiró tenía un formulario ‘Z’ de la Afip”, que “al auto lo compra en una concesionaria de Jujuy” y desde allí lo lleva a Córdoba donde “lo tiene muy poco tiempo y lo vende, y a su vez la persona que lo recibió también lo vende y ese tercero también lo vende”, refirió .
Consultado acerca de las identidades de los sucesivos compradores, Medina Allende se excusó diciendo que “yo no estoy autorizado a decir los nombres de las personas”.
Sin embargo aseguró que ya se encuentra a disposición del juzgado “una declaración jurada de la primera persona que recibió el auto”, en la que se denuncia a su vez “a quien se lo había vendido en Córdoba”. Pero la cadena no termina ahí sino que “esta persona que recibió el auto ha expresado su entera disposición a venir y explicar qué pasó con el auto” porque también lo vendió.
En ambos casos serían “ciudadanos comunes y corrientes y no tienen nada que ocultar”, manifestó el abogado.
Otras fuentes consultadas indicaron que se trataría de dos gitanos de Córdoba, también dedicados al comercio de autos y autopartes; aunque no trascendieron datos del último comprador, tal vez el nexo con la mano de obra que atacó la entidad bancaria.
En el exterior
El fin de semana del robo al banco Macro -8 y 9 de septiembre- “la señora estuvo de viaje” por lo que no existen dudas respecto de su inocencia en cuanto a la participación directa en el hecho.
Salió del país “una semana antes del robo y llegó dos días después y apenas llegó a Córdoba la familia le avisó que la policía estaba preguntando por ella”, ampliaron los abogados.
Entonces “fue hasta la central de Policía de Córdoba y se sentó con los investigadores de Córdoba y Santa Fe. Luego de eso creo que hubo un error, dio una dirección que no era correcta y ante la posibilidad de que estuviera mintiendo el juez Patrizi ordenó la detención, que se produjo el miércoles cuando ella salió en su auto a reunirse con gente de las TOE”.
A propósito de su recorrido, Medina Allende indicó que “estuvo detenida el miércoles y jueves en Carlos Paz, el viernes la trajeron a Santa Fe, el sábado le tomaron indagatoria y este jueves recuperó la libertad”.
Luego de la entrega de algunos de los efectos personales secuestrados la mujer regresaría a Córdoba junto a su familia y deberá volver a Santa Fe más adelante para recuperar el vehículo en el que se movilizaba al momento de su arresto -un Citröen C4.
“Tenemos la documentación que acredita que el auto es de ella pero no se lo van a devolver hasta tanto no esté realizada la transferencia”, indicó la defensa.
La mujer regresaba de un viaje a Panamá cuando la policía de Córdoba junto con investigadores santafesinos, la convocaron el martes de la semana pasada para preguntarle por el auto Volkswagen Bora gris secuestrado en la autopista Santa Fe-Rosario el domingo del robo.
Según surgió en un primer momento, el coche figuraba como de su propiedad al momento del secuestro, sin embargo, en su declaración aparecen al menos dos compradores identificados. También existiría un tercer comprador sobre quien se investiga si fue el que puso el auto a disposición de la banda.
En Tribunales
Esta mañana, sus abogados Eduardo Medina Allende -cordobés- y Alejandro Otte -santafesino- acudieron a los tribunales locales para completar los trámites de rutina y recuperar efectos personales de la imputada.
“Mi clienta recuperó la libertad ayer 20 de septiembre al mediodía”, confirmó Medina Allende. “Vinimos a demostrar que no tiene nada que ver; y en realidad no pudo aportar demasiados datos sobre el robo porque no tiene idea de lo que pasó”.
Según explicó el abogado “trajimos desde Córdoba la documentación que prueba que el auto que habría estado implicado en el robo al banco Macro en algún momento estuvo en su poder, pero lo compró y lo vendió casi inmediatamente”.
La mujer de 37 años que reside en Tanti, en las sierras de Córdoba, se dedica entre otras ocupaciones, “a la compraventa de autos”, y a partir de una operación incompleta fue que quedó mezclada con el hecho delictivo.
Cadena de venta
“Es de uso en Córdoba entre quienes se dedican a la compraventa de autos no hacer en cada paso la transferencia, sino cuando el coche llega al destinatario final”, explicó el defensor particular.
También dijo que “cuando lo retiró tenía un formulario ‘Z’ de la Afip”, que “al auto lo compra en una concesionaria de Jujuy” y desde allí lo lleva a Córdoba donde “lo tiene muy poco tiempo y lo vende, y a su vez la persona que lo recibió también lo vende y ese tercero también lo vende”, refirió .
Consultado acerca de las identidades de los sucesivos compradores, Medina Allende se excusó diciendo que “yo no estoy autorizado a decir los nombres de las personas”.
Sin embargo aseguró que ya se encuentra a disposición del juzgado “una declaración jurada de la primera persona que recibió el auto”, en la que se denuncia a su vez “a quien se lo había vendido en Córdoba”. Pero la cadena no termina ahí sino que “esta persona que recibió el auto ha expresado su entera disposición a venir y explicar qué pasó con el auto” porque también lo vendió.
En ambos casos serían “ciudadanos comunes y corrientes y no tienen nada que ocultar”, manifestó el abogado.
Otras fuentes consultadas indicaron que se trataría de dos gitanos de Córdoba, también dedicados al comercio de autos y autopartes; aunque no trascendieron datos del último comprador, tal vez el nexo con la mano de obra que atacó la entidad bancaria.
En el exterior
El fin de semana del robo al banco Macro -8 y 9 de septiembre- “la señora estuvo de viaje” por lo que no existen dudas respecto de su inocencia en cuanto a la participación directa en el hecho.
Salió del país “una semana antes del robo y llegó dos días después y apenas llegó a Córdoba la familia le avisó que la policía estaba preguntando por ella”, ampliaron los abogados.
Entonces “fue hasta la central de Policía de Córdoba y se sentó con los investigadores de Córdoba y Santa Fe. Luego de eso creo que hubo un error, dio una dirección que no era correcta y ante la posibilidad de que estuviera mintiendo el juez Patrizi ordenó la detención, que se produjo el miércoles cuando ella salió en su auto a reunirse con gente de las TOE”.
A propósito de su recorrido, Medina Allende indicó que “estuvo detenida el miércoles y jueves en Carlos Paz, el viernes la trajeron a Santa Fe, el sábado le tomaron indagatoria y este jueves recuperó la libertad”.
Luego de la entrega de algunos de los efectos personales secuestrados la mujer regresaría a Córdoba junto a su familia y deberá volver a Santa Fe más adelante para recuperar el vehículo en el que se movilizaba al momento de su arresto -un Citröen C4.
“Tenemos la documentación que acredita que el auto es de ella pero no se lo van a devolver hasta tanto no esté realizada la transferencia”, indicó la defensa.
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