El intendente José Corral visitó el Hogar Casa Cuna “Atanasia de Durán”, donde se refaccionaron los baños de los niños y se reacondicionaron espacios para consultorio médico y sala de espera. Los trabajos fueron realizados con mano de obra del Gobierno de la Ciudad, la conducción técnica de la revista Obras, y el aporte material de las empresas Riomat, Fexa, Disser y Eduardo Macagno y Cía.
El intendente José Corral se acercó esta mañana a la histórica institución ubicada en San Juan 2388, para observar las refacciones realizadas por el Gobierno de la Ciudad, con la coordinación de la Revista Obras y el aporte de empresas vinculadas al sector de la construcción.
Durante la visita, el mandatario local estuvo acompañado del secretario de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad, Carlos Medrano; la directora del Hogar Casa Cuna, Norma Ferreira; el director de la Revista Obras, Rodolfo Di Terlizzi; el gerente de Riomat, Carlos Fernández, entre otros representantes de las empresas que donaron materiales.
También estuvieron presentes el presidente de la Comisión Directiva, Marcelo Lozano; el tesorero, Jorge Iguri; la secretaria Ana Croti; y la encargada de prensa, Sandra Istillarte, entre otros miembros de la institución.
Además, los chicos de la Casa Cuna disfrutaron también de las ocurrencias del payaso Gustavo Tuti Núñez.
Detalles de las obras
La intervención en los baños incluyó el reemplazo de todos los sanitarios, la colocación de nuevas mesadas, bachas, griferías, nuevas aberturas, mamparas, refacción del tendido eléctrico; y se colocaron nuevos revestimientos y pisos. Además, se retiraron los azulejos y zócalos, se realizó pintura integral, restauración de las aberturas y diversas aislaciones.
Además, se renovó un sector lindante a los baños, donde se habilitó una sala de espera para el consultorio pediátrico que funciona frente al área de odontología.
Para la refacción de los baños y reconversión del espacio donde ahora funciona un consultorio pediátrico, se conjugaron los aportes de mano de obra del Gobierno de la Ciudad, la conducción técnica de la Revista Obras; y el apoyo de las empresas Riomat, Fexa (aberturas), Eduardo Macagno y Cia (sanitarios), Disser (cielorrasos y aislación), que donaron los materiales de construcción.
Trabajo conjunto
En declaraciones a los medios de comunicación, el intendente José Corral valoró el trabajo conjunto entre el Gobierno de la Ciudad, las empresas y la conducción técnica de la Revista Obras: “Esto es el resultado de un trabajo conjunto”, afirmó. Y explicó que “el Municipio colaboró con la mano de obra, a través de cooperativas. Pero hay que destacar el aporte de las empresas de la ciudad, coordinadas por la revista Obras y por Rodolfo Di Terlizzi, que es un poco el alma máter de este proyecto”.
En relación con el aporte empresarial, el mandatario consideró que “ésa es la responsabilidad que queremos de parte de los empresarios, nada más y nada menos que para Casa Cuna, que es una institución que todos queremos, y que hace un gran trabajo”.
En esa línea, José Corral destacó la misión social del hogar, y el aporte voluntario de sus integrantes para contener a los niños en riesgo, y señaló: “Alcanza con ver en qué condiciones están aquí los chicos, cómo son atendidos con esta incorporación de la sala pediátrica, de la atención odontológica que les dan, a lo que se suman ahora los baños que fueron adecuados a la altura de los chicos y que están en las condiciones que ellos necesitan”.
Finalmente, destacó al personal que tiene a su cargo el Hogar Casa Cuna: “Ellos trabajan en su mayoría voluntariamente. Es un trabajo silencioso, pero muy valioso y que mejora la ciudad. Así que es nuestra obligación estar aquí para acompañarlos”, concluyó.
Una gran familia
La directora de la institución, Norma Ferreira, manifestó su conformidad con la calidad de los trabajos realizados y comentó que “hacía tiempo que estábamos esperando estas obras para los chicos, para que puedan estar más cómodos porque están adecuados a su edad. Se cumplió ese sueño después de tantos años, y por eso es un día muy especial para nosotros, donde inauguramos los baños y una salita donde podrá trabajar nuestra pediatra”.
En esa línea, la directora valoró el aporte del Gobierno de la Ciudad y las empresas que donaron los materiales:“Esto ha sido una ayuda grande para nosotros, de parte de la Municipalidad, donde colaboraron todos para que esto se haga realidad”.
Finalmente, la directora se refirió a los servicios que se brindan a los 26 niños y niñas -de dos a 14 años-, que residen actualmente en la institución. En ese sentido, comentó que “hace poco tiempo inauguramos un consultorio, donde el Círculo Odontológico brindará un servicio a los niños, primero con prevención y luego con atención, que es algo de suma necesidad para ellos”. Y explicó que “esto es como una gran familia, donde los chicos concurren a distintas escuelas -desde el jardín maternal hasta la secundaria-; y también reciben atención psicológica, aquí y en hospitales y centros de salud”.
Compromiso empresario
Por su parte, el gerente de Riomat, Carlos Fernández, comentó que “nuestro aporte fue poco para lo que significa la Casa Cuna. Nosotros proveímos materiales los juegos de baño, pegamentos y todo lo que se emplea para la parte de obra gruesa y fina de los sanitarios”. Además, destacó la coordinación del arquitecto Rodolfo Di Terlizzi: “Si no fuera por él, esto no se hubiera logrado porque él fue el nexo con nosotros, nos mostró la realidad de este establecimiento donde se da un apoyo bárbaro a los chicos”. Para finalizar, comentó que “la cultura de nuestra empresa es poder dar una mano siempre que se puede, porque la responsabilidad social empresaria se ve en esto. En Santa Fe somos muchas las empresas que podemos ayudar, y Casa Cuna es una entidad más”.
Obras previas
Cabe recordar que durante el año 2009 el Gobierno de la Ciudad reparó las veredas de la institución. En aquella oportunidad, las obras se financiaron con fondos donados por vecinos que habían resultado beneficiados tras el sorteo del Premio al Buen Contribuyente, que se otorgó a los que cumplen con el pago de todas las cuotas de la Tasa General de Inmuebles. El perímetro de dicha obra era de 270 metros cuadrados de hormigón y césped, y contemplaba el área denominada cinta verde, que permitió mantener una porción de césped para optimizar la calidad urbana del sector.
Además, a comienzos de este año se impermeabilizaron los techos del histórico edificio, construido entre 1933 y 1935. En aquella oportunidad, la ejecución de los trabajos estuvo a cargo de personal del Gobierno de la Ciudad, y los materiales habían sido cedidos por la Revista Obras, en una intervención que tuvo por objetivo preservar el interior del edificio del deterioro que ocasionaban filtraciones en la cubierta del inmueble.
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