Super TC2000: en la ciudad hay 3 mil plazas hoteleras y habrá ocupación plena. Además, se derivarán visitantes a las cabañas de ruta 1 y a Paraná. La gastronomía espera trabajar a full jueves, viernes y sábado.
Tanto desde el sector público como desde el privado se viene trabajando desde hace meses en la puesta a punto de todos los detalles para recibir un evento como el Súper TC2000. El próximo fin de semana llegará por séptima vez consecutiva al circuito callejero la categoría de mayor desarrollo tecnológico dentro del automovilismo argentino.
El acontecimiento que mueve a decena de miles de personas supone un trabajo especial para el rubro hotelería y gastronomía, aunque ya hay “una gimnasia bastante elaborada”, asegura Mario Wagner, presidente de la Asociación Hotelera y Gastronómica de Santa Fe.
La experiencia de los últimos años admite aceitar detalles de organización que permiten un crecimiento en la calidad de los servicios que se prestan a los visitantes. Pero todo fue un aprendizaje. “Nosotros nunca recibíamos eventos de este tipo y mucho menos lo que fue la Copa América, por lo que no teníamos al personal capacitado para eventos tan importantes y que llegaron tan de golpe. Pero fuimos aprendiendo y capacitando a nuestro personal para trabajar con este tipo de situaciones”, aseguró el titular de uno de los hoteles más reconocidos de la ciudad.
Luego Wagner agregó: “Nosotros empezamos a trabajar en la llegada del TC2000 mucho tiempo antes, despejamos todas las plazas que podemos para tener la mayor capacidad posible. Les avisamos a nuestros clientes que no vienen todas las semanas que va a estar este evento y que si pueden adelantar o retrasar su visita a la ciudad es mejor. El día pico para la hotelería, en Santa Fe, es el jueves; para la gastronomía es el sábado. Mucha gente del TC2000 ya está instalada desde el jueves, por lo cual si uno no hace ese trabajo terminaríamos dándoles ese jueves 20 o 30 plazas, algo que no les serviría de nada. Además quedaría mal la ciudad”.
“Por eso la diferencia está en la atención que se les da”, remarcó el empresario y añadió: “Desde la primera edición en hotelería se cobra la misma tarifa que tenemos de mostrador. Eso no pasa en otros lugares que cuando tienen este tipo de eventos inflan los precios de manera muy importante. Acá les cobramos la tarifa de mostrador, porque eso hace a la buena atención y a que vuelvan”.
Al ser consultado sobre la cantidad de plazas que se lleva sólo el equipo de la organización, Wagner dijo: “No tenemos un número exacto. Nosotros les damos aproximadamente el 60 por ciento de las plazas. Ahí se incluyen a pilotos, mecánicos, periodistas, promotoras y demás personas que vienen para la carrera. Tal vez les podríamos dar más lugares pero queremos que todo se distribuya entre todos los hoteles y también reservar lugares para nuestros clientes a los que no podemos rechazar. Pero el TC2000 trae muchísima gente”.
El automovilismo tiene muchos seguidores en el interior y el deporte de los fierros tiene a sus más fanáticos seguidores en los pequeños pueblos. “Tenemos un público que sigue las competencias de este tipo que por lo menos está dos días en la ciudad. La mayoría viene sábado y domingo, aunque muchos se vienen antes. Nosotros tenemos muchas reservas desde el jueves. El que sigue este tipo de competencias quiere ver todo. Por eso la organización no vende entradas sólo para la carrera, sino para todo el fin de semana. Y nosotros no vendemos una noche, sino que lo mínimo es la noche del viernes y la del sábado”, explicó.
Más oferta y mejor atención
“La ocupación es plena. La verdad es que eso sucede desde que se hizo la primera competencia. Santa Fe es una ciudad que para eventos de este tipo no tiene tanta capacidad hotelera. En hoteles dentro de la ciudad estamos hablando de 3.000 plazas. Después se puede contar lo que son las cabañas de la ruta 1 y el hotel de Colón. De esas 3.000 plazas, por una cuestión de reservas previas para nuestros clientes habituales o personas que viven en el hotel, podemos disponer de un 70 por ciento. Ésa es la situación de todos los hoteles, por lo cual están quedando entre 2.200 y 2.300 plazas”, aclaró.
“La ocupación es plena. La verdad es que eso sucede desde que se hizo la primera competencia. Santa Fe es una ciudad que para eventos de este tipo no tiene tanta capacidad hotelera. En hoteles dentro de la ciudad estamos hablando de 3.000 plazas. Después se puede contar lo que son las cabañas de la ruta 1 y el hotel de Colón. De esas 3.000 plazas, por una cuestión de reservas previas para nuestros clientes habituales o personas que viven en el hotel, podemos disponer de un 70 por ciento. Ésa es la situación de todos los hoteles, por lo cual están quedando entre 2.200 y 2.300 plazas”, aclaró.
En ese sentido, el empresario dijo que además de “trabajar a full” la hotelería local, también se beneficia a los hospedajes de toda la zona. “La ciudad de Paraná se llena. Lo mismo nos pasa a nosotros cuando el TC2000 o el Turismo Carretera va a esa ciudad, terminamos trabajando muy bien. Incluso cuando hay carreras en Rafaela nosotros recibimos gente”, dijo.
“Hoy estamos mucho mejor –continuó– que en la primera edición. En lo que respecta a gastronomía, la ciudad creció mucho. Hay muchísimos restó bares nuevos, sobre todo en la zona de Candioti y bulevar Gálvez. Tenemos el patio de la Cervecería, que es un lugar muy importante e ilustrativo de la ciudad”.
“Mientras que en hotelería también tenemos complejos nuevos como el del club Colón y el hotel del Casino que en las primeras ediciones no estaban. Tenemos más opciones para brindar. En Santa Fe, en general, toda la hotelería y la gastronomía aprendió mucho a atender este tipo de eventos como el del TC2000, que fue el primero de los grandes. Después vinieron la Copa América, mundiales de rugby, congresos muy grandes, lo que nos capacitó para atender este tipo de eventos. Nunca tuvimos problemas, siempre se los atendió muy bien y por eso vuelven año tras año”, concluyó.
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