Sabaleros y Leprosos juegan este domingo a las 17,10 con arbitraje de Patricio Loustau. Sensini podra contar con Sebastián Prediger en el medio y Facundo Curuchet en ofensiva. El “Tata” Martino esperará hasta último momento por Sperduti.
Colón a cuatro puntos de la punta y Newell’s a sólo a uno del líder Boca, los dos bien prendidos arriba en el ahora llamado Torneo Inicial. Para los “leprosos” es el partido que todos quieren jugar, por eso el “Tata” Martino esperará al “Gordo” Sperduti hasta último momento. En el caso de los sabaleros, será el puntapié de otra seguidilla imponente que arrancará este domingo a las 17.10 frente a los rosarinos, se prolongará el jueves a la noche frente a Cerro Porteño por la Copa Sudamericana, hará su tercera parada el lunes 1º de octubre contra el siempre respetable Vélez en Liniers y terminará —por llamarlo de alguna manera— frente a Racing de Avellaneda en Santa Fe, el sábado 6.
Por eso, como ocurrió la vez anterior, es importante que “Boquita” Sensini tenga a todos los jugadores a disposición para tomar la mejor decisión acerca de cómo afrontar las dos competencias. Después de la complicada doble excursión de visitante —sacó uno de seis al empatar con Tigre después de perder ante San Lorenzo—, Colón vuelve a casa con los decisivos retornos del “Perro” Prediger en la mitad de la cancha y del veloz Facundo Curuchet en la ofensiva.
Para las aspiraciones sabaleras de ser protagonista del campeonato será fundamental volver mañana a la victoria para sumar de a tres, quedando en una posición expectante sea cual sea el resultado de los de arriba. Se espera un marco multitudinario en el Cementerio de los Elefantes, porque Colón está bien en los dos frentes (torneo y Copa) y porque Newell’s quiere pegar el gran salto a la cima. Unos 4.500 “leprosos” es lo que estiman desde el área de seguridad para el sector visitante en el Centenario.
En el mediocampo, Sebastián Prediger es determinante, porque es uno de los pocos volantes del fútbol argentino que está preparado para correr, marcar y jugar a la pelota con autoridad. Sin dudas que Colón sintió su ausencia frente a Tigre a la hora de “quebrar” líneas desde la mitad de la cancha.
Arriba, en los últimos metros, nadie niega las condiciones de los dos “9” de área —Rubén Ramírez y Emmanuel Gigliotti—, pero el jugador técnicamente distinto para abrir defensas es Facundo Curuchet: rápido, desequilibrante, encarador en el mano a mano. Y también Colón lo extrañó mucho en estos últimos 180 minutos fuera de Santa Fe como consecuencia de la lesión.
El mismo “Tata” admitió que “pagaría la entrada” para poder ver un partido como el Colón-Newell’s de mañana en Santa Fe. Con los mismos colores, con dos entrenadores que son amigos (Sensini y Martino) y con el mismo sueño de protagonismo para intentar llegar con chances a las fechas finales del campeonato, el domingo a la tarde en el sur de Santa Fe se pintará todo de rojo y negro.
Por eso, como ocurrió la vez anterior, es importante que “Boquita” Sensini tenga a todos los jugadores a disposición para tomar la mejor decisión acerca de cómo afrontar las dos competencias. Después de la complicada doble excursión de visitante —sacó uno de seis al empatar con Tigre después de perder ante San Lorenzo—, Colón vuelve a casa con los decisivos retornos del “Perro” Prediger en la mitad de la cancha y del veloz Facundo Curuchet en la ofensiva.
Para las aspiraciones sabaleras de ser protagonista del campeonato será fundamental volver mañana a la victoria para sumar de a tres, quedando en una posición expectante sea cual sea el resultado de los de arriba. Se espera un marco multitudinario en el Cementerio de los Elefantes, porque Colón está bien en los dos frentes (torneo y Copa) y porque Newell’s quiere pegar el gran salto a la cima. Unos 4.500 “leprosos” es lo que estiman desde el área de seguridad para el sector visitante en el Centenario.
En el mediocampo, Sebastián Prediger es determinante, porque es uno de los pocos volantes del fútbol argentino que está preparado para correr, marcar y jugar a la pelota con autoridad. Sin dudas que Colón sintió su ausencia frente a Tigre a la hora de “quebrar” líneas desde la mitad de la cancha.
Arriba, en los últimos metros, nadie niega las condiciones de los dos “9” de área —Rubén Ramírez y Emmanuel Gigliotti—, pero el jugador técnicamente distinto para abrir defensas es Facundo Curuchet: rápido, desequilibrante, encarador en el mano a mano. Y también Colón lo extrañó mucho en estos últimos 180 minutos fuera de Santa Fe como consecuencia de la lesión.
El mismo “Tata” admitió que “pagaría la entrada” para poder ver un partido como el Colón-Newell’s de mañana en Santa Fe. Con los mismos colores, con dos entrenadores que son amigos (Sensini y Martino) y con el mismo sueño de protagonismo para intentar llegar con chances a las fechas finales del campeonato, el domingo a la tarde en el sur de Santa Fe se pintará todo de rojo y negro.
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