Unión quiere gritar “al Diablo con los promedios”

Cada vez le falta menos al equipo de Kudelka para llegar a la línea de 50 puntos y el partido en Avellaneda puede ser la llave de salvación.

 

El once de Kudelka tendrá la baja obligada de Enrique Bologna bajo los caños por una cuestión familiar (tiene un problema de salud su pequeño hijo) y el arco será ocupado por Alejandro Limia, quien cada vez que fue llamado respondió tanto o más que en el ascenso. De paso, recupera el oficio de Avendaño atrás por Barisone y Donnet en el medio por Cavallaro.- Foto:Pablo Aguirre.

Dentro de 15 días, cuando vuelva el campeonato local —se para porque el fin de semana que viene hay Eliminatorias—, Unión será local de San Martín de San Juan en el 15 de Abril cuando queden tres fechas y nueve puntos en disputa. Hoy, con un juego menos, Unión está dos puntos por encima de los cuyanos que anoche dieron vuelta un partido increíble en el Hilario Sánchez contra Olimpo.

Ahí, en este cálculo, se nota la importancia de los tres puntos que le dio Barisone contra San Lorenzo hace una semana. Porque aún perdiendo mañana en Avellaneda, llegará al duelo con los sanjuaninos con “el lomo afuera” por esa ventaja. De ahí que sumar en Avellaneda, uno o tres, implicará acercarse al gran objetivo de la salvación total: descenso directo y Promociones.

La zona caliente está que arde: San Lorenzo arrancará jugando mañana contra Newell’s en descenso directo y Banfield —juega a la tardecita contra Argentinos en La Paternal— puede caer estrepitosamente en Promoción a tres fechas del final.

El rival de Unión, Independiente, está complicado adentro y afuera de la cancha por partes iguales. El presidente Cantero salió a desmentir, en medio de su lucha contra la barra brava, que fueron “apretados” algunos jugadores por bajo rendimiento. “Con miedo no se juega, pero es difícil. Todos los días hay un problema distinto. Se hace muy difícil el día a día en la semana de Independiente”, se confesó Cristian Pellerano, volante central titular contra Unión.

Lo concreto es que el equipo de Cristian Díaz perdió el rumbo, acumula tres derrotas consecutivas y llega muy presionado al partido contra Unión, con un entrenador que “pateó el tablero” con cuatro cambios.

El once de Kudelka tendrá la baja obligada de Enrique Bologna bajo los caños por una cuestión familiar (tiene un problema de salud su pequeño hijo) y el arco será ocupado por Alejandro Limia, quien cada vez que fue llamado respondió tanto o más que en el ascenso. De paso, recupera el oficio de Avendaño atrás por Barisone y Donnet en el medio por Cavallaro.

El resto, con la continuidad del “Gringo” Maidana por Juan Pablo Cárdenas y la ratificación del peleador Jerónimo Barrales por el goleador Diego Jara, será el mismo equipo que le ganó a San Lorenzo. Mañana, con el objetivo de sumar, Unión pisa la parte roja de Avellaneda. El punto sirve. Pero si llega a ganar los tres, el Tate gritará bien fuerte “al Diablo con los promedios” en el Libertadores de América.