Bella pero con muchas falencias.
Así ven muchos a esta localidad que cuando se la nombra, en el
inconsciente colectivo se la relaciona inmediatamente con la palabra
basural. Pero precisamente el históricamente problemático volcadero de
residuos "no es el problema sino la consecuencia de toda una serie de
inconvenientes de larga data, y que tal vez tenga que ver con la falta
de atención, de insistencia o, en definitiva, de compromiso de gestiones
anteriores", expresó la flamante jefa comunal, Elsa Bianco, que está
convencida de que la forma de lograr resultados es regionalizando las
cuestiones, integrando a Ricardone a ciertos planes de los que estamos
recluidos".
Con un notable agotamiento tras arduas
jornadas de trabajo junto a su personal, a la policía y a los vecinos
para atender las complicaciones de la última tormenta del martes que
provocó, entre otros trastornos, voladura de techos, caída de postes y
árboles, cortes de luz y despiste de camiones hacia las banquinas, la
mandataria detalló a LaCapital éstos y otros trastornos que "arrastramos
desde años y que necesitamos una solución rápida y definitiva, sin
tantas barreras burocráticas".
Tras una recorrida con autoridades provinciales que
constataron las falencias hídricas de la localidad, la mandataria
demandó un "mayor mantenimiento de parte de la EPE, que asigne más
personal a estas tareas, porque no puede ser que una tormenta que no fue
tan grave deje semejante cantidad de postes y cables caídos, que
rescatamos con recursos propios. También debemos hacer un mea culpa,
hubo numerosos árboles se ve que no se mantenían y que cayeron sobre
viviendas. Afortunadamente en esta ocasión no hubo víctimas", destacó.
Otro problema a causa de la falta de mantenimiento es
el de las banquinas, donde vuelcan camiones, "les saltan los ejes y
caen a pocos metros de las casas, con el riesgo que ello representa y
debemos retirarlos desde la comuna. Somos un pueblo de paso por donde va
el tránsito pesado de la 34 y el portuario de la 11, y la cantidad de
estos vehículos genera problemas y hay muy pocas soluciones".
Contaminación y agua. "No podemos
lograr soluciones definitivas a problemas que venimos arrastrando desde
hace años. Uno de ellos es el problema de nuestra agua que tiene niveles
elevadísimos de arsénico y accedemos al servicio a través de la empresa
Vicentín. Una solución al tema de la provisión sería que nos integraran
al proyecto de acueducto sur y ya estamos trabajando en ello para
pertenecer a este plan, estar integrados y establecer un sistema
regional de regulación de la calidad de agua y temas relacionados con el
medio ambiente", señaló Bianco.
Al respecto, la jefa comunal se refirió a "la
necesidad de trabajar en conjunto, establecer una mesa de diálogo, en
especial en cuanto a la expansión de las localidades para que no haya
invasión contaminante de todo tipo. En nuestro caso, es necesario que la
comuna tenga participación en el control medioambiental de las obras de
ampliación que se hacen en el basural, que tengamos el poder de policía
para garantizar la transparencia de las mismas".
Este es un pueblo con falta de servicios, tenemos
problemas con las cloacas, con la zona de napas con pozos que rebasan
permanentemente (una pequeña lluvia causa catástrofes), empresas
contaminantes y otras a las que las recibimos, pero no tenemos la
infraestructura necesaria para contenerlas.
Compromiso. "No queremos perder la
calidad de vida. El compromiso de trabajo lo tenemos y ponemos lo mejor
de nosotros. Evidentemente en gestiones anteriores no se ha hecho
hincapié o se ha insistido para solucionar estos problemas ni para que
nos involucren a nivel provincial y nacional en el plan estratégico, que
abarca a Rosario y nosotros nos sentimos excluidos. Queremos trabajar
en los procesos contra la contaminación, en acuerdos, tratados, en el
trazado de rutas, caminos intervecinales, alternativos, provinciales y
nacionales en el ejido urbano. Queremos participar", dijo la jefa
comunal.
Bianco acotó que "Ricardone es una sociedad muy
comprometida pero está cansada de esperar. Y con ello corremos el riesgo
de que diga basta. Necesitamos que nos escuchen y nos den soluciones
rápidas, sin tanta burocracia. Desde que asumimos, este mes lo hemos
invertido en ponernos al tanto de diversas situaciones y trabajamos en
conjunto con todos los sectores de la localidad. Ahora que tenemos un
panorama, no me molesta golpear puertas, pese a que todos dicen que
enero es un mes parado".
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