Cristina Fernández de Kirchner llegará mañana después de mediodía. La jefa de Estado pidió cambios en la organización de las actividades.
Si el clima no juega una mala pasada, la celebración del aniversario de la creación de la Bandera nacional, que se realizará mañana en Rosario, contará este año con la presencia de la presidenta Cristina Fernández y parte de su gabinete.
En la previa, el tradicional acto en homenaje a la enseña patria está cargado de colores políticos, porque por primera vez las gradas asentadas sobre la avenida Belgrano contendrán a una jefa de Estado -y posible candidata a la reelección- y a un candidato presidencial, como el gobernador Hermes Binner; y dos postulantes a gobernador, como el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti, y su rival el 24 de julio el diputado nacional Agustín Rossi. Para el intendente rosarino Miguel Lifschitz será su último acto como jefe comunal, después de dos períodos consecutivos al mando del Palacio de los Leones.
A diferencia de otros años, el acto comenzará un poco más tarde de lo acostumbrado. La idea es que la celebración comience después de las 12.30, horario en que está previsto que aterrice el Tango 01 en el aeropuerto Malvinas Argentinas, de Fisherton, con la presidenta Cristina Fernández, proveniente de El Calafate, donde la mandataria tenía pensado pasar el fin de semana si las cenizas volcánicas no le impedían llegar a ese zona de la Patagonia.
Por orden expresa de la jefa de Estado el palco de las autoridades se montará más adelante, más cerca de la gente. Y recomendó también que el tradicional desfile cívico-militar sea más corto de lo acostumbrado. Está previsto, según informaron desde Protocolo, que la presidenta llegue a Rosario entre las 12.30 y las 13. Será recibida por el gobernador Hermes Binner, y de inmediato, ambos abordarán un helicóptero que los depositará en la base de Prefectura, junto al río Paraná. Tras el saludo de bienvenida del intendente Miguel Lifschitz, las autoridades serán transportadas en vehículos hasta el palco.
Al Himno Nacional les seguirán los discursos del intendente, el gobernador y la presidenta. Luego comenzará el desfile cívico-militar y la recorrida de “la bandera más larga del mundo”, iniciativa del proyecto Alta en el Cielo.
El palco, en tanto, estará ubicado sobre la avenida Belgrano y no en el predio del Parque Nacional a la Bandera. A las autoridades y el público, en función de la nueva disposición, sólo los separará la traza (por donde pasará el desfile), mientras que la prensa se ubicará en los laterales de la estructura.
Pese a que para el lunes se espera una temperatura mínima de 3º, en la Municipalidad aventuraron la posible presencia de 50.000 personas al pie y en los alrededores del Monumento.
Diferencia
A pesar de que preexiste una idea generalizada de no romper el clima de fiesta patria, y llamar a acercarse al acto sólo con banderas argentinas, es probable que haya excepciones. Es de esperar en el actual contexto, en particular de parte de algún sector kirchnerista, alguna muestra de la efervescencia movilizadora que lo viene caracterizando desde 2008 a esta parte. No sólo con la motivación del inminente anuncio de la presidenta sobre su futuro inmediato y el del movimiento que lidera, sino también porque por vez primera es el kirchnerismo el que tiene la responsabilidad de liderar al PJ santafesino en busca de reconquistar el gobierno provincial.
Hermes Binner, ya lanzado a la presidencia, estará en el centro de la vidriera. Ya no es sólo el gobernador de Santa Fe, sino el flamante referente de un espacio electoral que aspira a constituirse como tercera fuerza nacional en octubre. A su lado estará Cristina, que habrá que ver si el lunes aterriza en Rosario como presidenta o si ya será candidata a la reelección. A cuatro días del cierre de listas y con el país esperando la decisión, no es descabellado que a la hora del discurso presidencial Cristina destine un par de párrafos para plantar señales concretas sobre sus próximos pasos. También estarán Antonio Bonfatti y Agustín Rossi. Uno de ellos será el próximo gobernador de Santa Fe y asistirá al acto del año que viene, el de los 200 años, en esa condición.
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