El religioso de la Primera Iglesia Bautista de Paraná, Jorge Lucero, y organizador del polémico semianrio que busca curar la homosexualidad negó que hayan buscado “ofender a nadie, ni al Inadi, ni a la comunidad homosexual, ni a la comunidad lesbiana”. El curso comienza hoy a las 20.30 en PAraná y se extenderá hasta el domingo en el Centro Familiar Cristiano.
El pastor Lucero aseguró que el seminario busca aliviar el daño que sufrieron personas abusadas.
Según explicó el religioso, la actividad “está orientada a personas que han recibido un abuso y entonces su emoción, su relacionarse con otros, ha sido afectada”.
Para fundamentar su posición planteó que “no estamos hablando de que ha sido afectada -por la emoción- para la homosexualidad o la heterosexualidad".
En esa línea de pensamiento añadió: "Quisimos hacer nuestro aporte desde la iglesia diciendo que Dios tiene esperanza para aquel que ha sido abusado".
Sobre las organizaciones que se expresaron para repudiar este tipo de actividades el pastor opinó: “Yo no le quiero hacer mal a la ciudad ni a ninguno. Si alguien se siente ofendido tengo que plantearme qué es lo que tengo que hacer. Nosotros no queremos ofender a nadie. Dios no discriminó a nadie. Soy pastor y pastoreo un grupo de más de 1.000 personas; no fue nuestra intención ofender a nadie. Ni al Inadi, ni a la comunidad homosexual, ni a la comunidad de lesbiana”.
Más allá de las diferencias instó a acercar posiciones porque “Dios les ama y quién soy yo para no hacer lo mismo. Si ellos vienen tomaremos un café y se los explicaré. Mi iglesia está abierta para todos: para prostitutas, homosexuales, gays, para todos. No quiero ser provocador de nadie. Nosotros no quisimos ni hablar de la homosexualidad, quisimos hablar de otro tema. Que se queden tranquilos porque no discriminamos. Yo soy el responsable último y no lo planteamos en el sentido que se dijo”.
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