La Agencia Provincial de
Seguridad Vial realizará un plan de operativos que refuerza los
controles de rutina en rutas de la provincia.
Agenciafe de Seguridad Vial - camioneta
Las estadísticas muestran que, durante el invierno, los riesgos de accidentes se incrementan con respecto al verano debido a las condiciones climáticas adversas que reinan en la época invernal, el asfalto húmedo o mojado en caso de lluvia y la mayor circulación vehicular que se registra en este período de vacaciones.
Desde el organismo provincial destacan que el objetivo de las acciones de control y prevención es disminuir el nivel de siniestralidad que se eleva en estas fechas y que las familias puedan disfrutar sin tener que experimentar ningún hecho lamentable como son los accidentes de tránsito.
Según las estadísticas, en la provincia de Santa Fe, julio es uno de los meses del año en que se producen más accidentes con víctimas fatales. Si bien este dato no puede atribuirse exclusivamente a las vacaciones de invierno, en este período se incrementa la masa de vehículos que se moviliza por las rutas de la provincia y, sobre todo, teniendo en cuenta que Santa Fe representa un paso, muchas veces obligado, hacia los principales destinos turísticos, lo que impacta notablemente en el flujo vehicular aumentando los riesgos en la conducción.
CONTROLAR PARA PREVENIR
En función de estas consideraciones, la Agencia Provincial de Seguridad Vial ha previsto un plan de operativos que refuerza los controles de rutina que se llevan a cabo en rutas de la provincia para prevenir siniestros de tránsito. Los mismos se están llevando a cabo y continuarán durante el período de receso escolar en los principales corredores viales de las cinco regiones. Estarán coordinados por la Agencia Provincial de Seguridad Vial, la Policía de Seguridad Vial y de las distintas Unidades Regionales de la Provincia de Santa Fe, Gendarmería Nacional e inspectores municipales.
Los operativos son de ordenamiento, prevención y control de tránsito en los que se controlarán las principales conductas de riesgo que inciden en la accidentalidad vial y que están vinculadas al exceso de velocidad, al consumo de alcohol, al uso de dispositivos de seguridad, la portación de la documentación exigible (licencia de conducir, seguro de responsabilidad civil, comprobante de la RTO), distribución de pasajeros y conductores críticos (motociclistas y transportistas de pasajeros y de cargas).
OPERATIVOS DE ALCOHOLEMIA
El alcohol en la conducción es uno de los principales factores de riesgo asociados a la accidentalidad vial. Es por eso que dentro del plan de intensificación de controles la Agencia reforzará también los operativos de alcoholemia que tienen como finalidad proteger a todas las personas de las conductas riesgosas de algunos conductores.
Cabe recordar que cuando un test de alcohol arroja un resultado mayor a 0.50 grs. de alcohol en sangre (el máximo permitido por Ley en conductores de vehículos), se aplican medidas preventivas -como la remisión del vehículo al corralón- y sancionadoras -como la multa económica o la inhabilitación. La tasa de alcohol máxima para conducir moto es de 0,20 grs. y en conductores profesionales es 0 grs.
LA SEGURIDAD TAMBIÉN ES PARTE DEL VIAJE
Durante las vacaciones de invierno numerosas familias se trasladan a las rutas para llegar a los principales destinos turísticos, lo que genera un escenario de alto riesgo en la conducción. Es por eso que esta es una nueva oportunidad para alertar sobre los riesgos que implica la conducción en esta época, renovar la responsabilidad de cuidar de los nuestros y tomar las medidas necesarias para minimizar los peligros.
Una constante en este tipo de viajes es el apuro en salir, ya que en general se cuenta con pocos días de descanso. En este sentido, la Agencia recomienda no comenzar el viaje luego de una extensa jornada de trabajo y haber descansado como mínimo 8 horas. Conviene también organizar el recorrido con anticipación, seleccionando las rutas a transitar para elegir caminos seguros en cuanto a la infraestructura vial y demorar la salida si se presenta alguna contingencia de tránsito o climática como cortes, anegamientos, lluvias, niebla, etc.
Antes de salir, es necesario poner el auto en condiciones revisando fluidos, neumáticos, motor, frenos y luces. También es imprescindible contar con la documentación obligatoria del vehículo: cédula verde, seguro, Revisión Técnica Vehicular Obligatoria y cédula azul (en caso de ser necesario).
Se recuerda también que todos los pasajeros deben llevar abrochado el cinturón de seguridad y que los lugares más seguros para los niños son los asientos traseros. Además, que todos los niños menores de 3 años o con una estatura inferior a 1.45 metros de altura, deben viajar usando un silla de seguridad adecuada a su peso y altura.
Por otro lado, es importante no utilizar el teléfono celular y evitar enviar mensajes de texto mientras se conduce, ya que estas son una de las distracciones más comunes en los conductores. También hay que evitar realizar otras actividades como encender un cigarrillo, tomar mate, comer o leer. Estas acciones hacen que se pierda la atención en el camino.
No consumir alcohol, respetar los límites de velocidad y ser muy cuidadosos con las maniobras de adelantamiento, son conductas que garantizan seguridad para el conductor y todos los pasajeros y hacen que estas vacaciones sean una experiencia placentera para toda la familia.
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