El zurdo Jorge Velázquez será el reemplazante del expulsado Fausto Montero con el mismo esquema. Falcioni debe resolver quién va por Clemente y si vuelve Mouche arriba.
Del “portazo” a la puerta abierta. Asoma
Falcioni, que calmó los nervios comprando algunos obsequios. Primero
renunció arriba del avión y después puso los pies sobre la tierra.
El
zurdo nacido en Vera, Jorge Velázquez, es el hombre indicado para
reemplazar en Unión al expulsado Fausto Montero, con lo cual las
especulaciones de posibles cambios de esquema y nombres —pensando en
Boca— quedaron descartadas por López y Planes. Apenas el corrimiento de
Matías Donnet que transitará el carril derecho del mediocampo, en una
función que conoce a la perfección.
Si bien falta la confirmación de boca del propio entrenador, Frank Darío Kudelka, todos los caminos conducen a Enrique Bologna; Erramuspe, Juan Pablo Avendaño, Nicolás Correa y Juan Pablo Cárdenas; Matías Donnet, Pablo Míguez y Jorge Velázquez; Paulo Rosales; Diego Jara y Jerónimo Barrales.
De esta manera, más allá que esperaba más volumen de juego en el Diego Armando Maradona, el entrenador se la juega priorizando un mediocampo con todos jugadores de buen pie y manteniendo dos delanteros de punta para lastimar a un Boca que llegará a Santa Fe con el cartelito de último campeón e invicto con una seguidilla importante sin conocer la derrota.
Si Unión, en su auspiciosa vuelta a Primera, recibió un golpe duro el año pasado, se lo dio Boca en La Bombonera. Es por eso que el partido adquiere todos los condimentos necesarios y genera una gran expectativa de cara al domingo en el 15 de Abril.
Después de la tormenta...
Hoy, Boca pareció recuperar algo de paz. Todo comenzó, bien temprano, con una reunión que comenzó a las 9.30 y terminó a las 9.40. ¿Qué fue lo que sucedió en esos 10 minutos? Una escueta conversación entre el director técnico de Boca y todo el plantel xeneize, que estuvieron cara a cara en el vestuario del complejo Pedro Pompilio.
Luego, comenzó la práctica que consistió en trabajos de gimnasio. Todo esto, tras la novela que Boca tuvo que pasar ayer, luego de su retorno desde Venezuela y que recién tuvo una definición con una reunión que mantuvieron Angelici y Falcioni, la cual comenzó anoche y culminó hoy por la madrugada. Allí, se definió que el técnico continuará en su cargo.
¿Se podrá recuperar la relación entre el “Emperador” y el plantel? ¿Cómo queda el técnico ante sus dirigidos, quienes ayer le hicieron saber al presidente su disconformismo con el accionar de Falcioni? Todas respuestas que comenzarán a vislumbrarse desde hoy; pero que seguramente no se aclararán (si se aclaran) hasta que pasen varios días o semanas.
Desde los números, inmejorable; desde el juego, cuestionable; desde la relación entre entrenador y jugadores, más o menos: Ése es el presente de Boca. Un campeón invicto, dos veces vencedor de River en el verano, protagonista de tres campeonatos, que casi se queda sin entrenador. Un disparate total y absoluto. O en realidad, una demostración de que no siempre los resultados tapan todo.
I
nterminable fue el día de ayer para el “Mundo Boca”. Con 15 horas de vuelo. Durante el mismo, se filtró la información que ocuparía el corazón del país mediático. Pelea en el vestuario. Renuncia de Falcioni. Escándalo total.
A partir de eso, llegada a Buenos Aires ante la multitud de periodistas. Falcioni y Angelici no hablan. Los jugadores, tampoco. Excepto, Riquelme quien aceptó la existencia de la discusión pero le bajó los decibeles: “Es normal, siempre se habla en el vestuario”.
Luego, Angelici se juntó con los referentes del plantel, con Román a la cabeza. Allí, le cayeron encima a Falcioni y parecía todo perdido. El enojo era porque “JC” le había echado la culpa al “10” de darle indicaciones a Cvitanich contra lo ordenado desde el banco. Erviti aceptó esa culpa y en medio de la pelea en el vestuario, el entrenador debió pedir disculpas.
Pero Angelici tuvo paciencia, esperó hasta la noche. Se juntó con Falcioni y lo convenció de seguir adelante. Aparentemente, el técnico habría solicitado “superpoderes” para manejar la disciplina del plantel y el presidente le habría dicho que sí.
Lo cierto es que la tensa relación entre Román (ahora, más el resto del plantel) y Falcioni se complica aún más. Así y todo, fueron campeones invictos y tienen tres competencias en este semestre. Desde hoy, comenzará a saberse la verdad.
Por otra parte, y en lo que respecta a lo netamente futbolístico, Boca también va preparando su encuentro ante Unión, que se jugará el domingo desde las 19.10.
Para este partido, la idea primaria es jugar con todos los titulares; sin embargo, quien no podrá estar es Clemente Rodríguez (ausente ante Zamora, en Venezuela), que como consecuencia de una distensión no podrá reaparecer. La otra duda pasa por el reemplazante de Santiago Silva; aunque sería Pablo Mouche.
Si bien falta la confirmación de boca del propio entrenador, Frank Darío Kudelka, todos los caminos conducen a Enrique Bologna; Erramuspe, Juan Pablo Avendaño, Nicolás Correa y Juan Pablo Cárdenas; Matías Donnet, Pablo Míguez y Jorge Velázquez; Paulo Rosales; Diego Jara y Jerónimo Barrales.
De esta manera, más allá que esperaba más volumen de juego en el Diego Armando Maradona, el entrenador se la juega priorizando un mediocampo con todos jugadores de buen pie y manteniendo dos delanteros de punta para lastimar a un Boca que llegará a Santa Fe con el cartelito de último campeón e invicto con una seguidilla importante sin conocer la derrota.
Si Unión, en su auspiciosa vuelta a Primera, recibió un golpe duro el año pasado, se lo dio Boca en La Bombonera. Es por eso que el partido adquiere todos los condimentos necesarios y genera una gran expectativa de cara al domingo en el 15 de Abril.
Después de la tormenta...
Hoy, Boca pareció recuperar algo de paz. Todo comenzó, bien temprano, con una reunión que comenzó a las 9.30 y terminó a las 9.40. ¿Qué fue lo que sucedió en esos 10 minutos? Una escueta conversación entre el director técnico de Boca y todo el plantel xeneize, que estuvieron cara a cara en el vestuario del complejo Pedro Pompilio.
Luego, comenzó la práctica que consistió en trabajos de gimnasio. Todo esto, tras la novela que Boca tuvo que pasar ayer, luego de su retorno desde Venezuela y que recién tuvo una definición con una reunión que mantuvieron Angelici y Falcioni, la cual comenzó anoche y culminó hoy por la madrugada. Allí, se definió que el técnico continuará en su cargo.
¿Se podrá recuperar la relación entre el “Emperador” y el plantel? ¿Cómo queda el técnico ante sus dirigidos, quienes ayer le hicieron saber al presidente su disconformismo con el accionar de Falcioni? Todas respuestas que comenzarán a vislumbrarse desde hoy; pero que seguramente no se aclararán (si se aclaran) hasta que pasen varios días o semanas.
Desde los números, inmejorable; desde el juego, cuestionable; desde la relación entre entrenador y jugadores, más o menos: Ése es el presente de Boca. Un campeón invicto, dos veces vencedor de River en el verano, protagonista de tres campeonatos, que casi se queda sin entrenador. Un disparate total y absoluto. O en realidad, una demostración de que no siempre los resultados tapan todo.
I
nterminable fue el día de ayer para el “Mundo Boca”. Con 15 horas de vuelo. Durante el mismo, se filtró la información que ocuparía el corazón del país mediático. Pelea en el vestuario. Renuncia de Falcioni. Escándalo total.
A partir de eso, llegada a Buenos Aires ante la multitud de periodistas. Falcioni y Angelici no hablan. Los jugadores, tampoco. Excepto, Riquelme quien aceptó la existencia de la discusión pero le bajó los decibeles: “Es normal, siempre se habla en el vestuario”.
Luego, Angelici se juntó con los referentes del plantel, con Román a la cabeza. Allí, le cayeron encima a Falcioni y parecía todo perdido. El enojo era porque “JC” le había echado la culpa al “10” de darle indicaciones a Cvitanich contra lo ordenado desde el banco. Erviti aceptó esa culpa y en medio de la pelea en el vestuario, el entrenador debió pedir disculpas.
Pero Angelici tuvo paciencia, esperó hasta la noche. Se juntó con Falcioni y lo convenció de seguir adelante. Aparentemente, el técnico habría solicitado “superpoderes” para manejar la disciplina del plantel y el presidente le habría dicho que sí.
Lo cierto es que la tensa relación entre Román (ahora, más el resto del plantel) y Falcioni se complica aún más. Así y todo, fueron campeones invictos y tienen tres competencias en este semestre. Desde hoy, comenzará a saberse la verdad.
Por otra parte, y en lo que respecta a lo netamente futbolístico, Boca también va preparando su encuentro ante Unión, que se jugará el domingo desde las 19.10.
Para este partido, la idea primaria es jugar con todos los titulares; sin embargo, quien no podrá estar es Clemente Rodríguez (ausente ante Zamora, en Venezuela), que como consecuencia de una distensión no podrá reaparecer. La otra duda pasa por el reemplazante de Santiago Silva; aunque sería Pablo Mouche.
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