Ahora son gomerías, talleres o casas de familia. La Municipalidad dice que buscaron más rentabilidad.
La mitad de los lavaderos de la ciudad se mudó de rubro en los
últimos meses. A partir de un relevamiento ligado a la ordenanza de uso
responsable del agua, la Municipalidad constató que de 270 lavaderos
registrados, 130 pasaron a ser gomerías, talleres mecánicos o
simplemente casas de familia. Según fuentes municipales, el cambio se
debió no al control sino a la búsqueda de mayor rentabilidad, ya que
menos de 10 lavaderos fueron clausurados por no cumplir con la normativa
vigente. En tanto, un 90 por ciento de los lavaderos cumplen con la
normativa de ahorro de agua potable, al poseer dispositivos de corte o
hidrolavadoras.
En diálogo con El Ciudadano, el subsecretario de Gobierno, Miguel
Pedrana, explicó que del relevamiento de lavaderos realizados por la
Dirección General de Inspección en los seis distritos de Rosario, un 48
por ciento de los lavaderos a verificar habían salido del rubro. “Ha
caído la cantidad de lavaderos. Se han reconvertido en garages, gomerías
y algunos en casas de familia”, detalló el funcionario. Los restantes
139 locales que siguen en la actividad cuentan con permiso de
habilitación, o están en proceso de tramitación. “Entre 7 y 8 no tenían
habilitación. Se detectaron algunas violaciones y clausuras previas que
fueron debidamente registradas”, agregó Pedrana. Desde el municipio
señalaron que en los casos de lavaderos sin habilitación ni trámite
iniciado se los notificó de la irregularidad y se les hizo entrega de la
ordenanza regulatoria de la actividad para que cuenten con la
información necesaria, proceso rubricado con la firma de los
responsables de los lavaderos, quienes fueron emplazados a regularizar
su situación lo antes posible.
Consultado por la zona de avenida Pellegrini entre bulevar Avellaneda y
Provincias Unidas, donde tras la pavimentación los lavaderos de autos se
transformaron en una oportunidad laboral para muchas familias vencidas
por la crisis, el funcionario municipal apuntó que los lugares
habilitados poseen equipos de corte y se están ajustando a la normativa
vigente. Entre ellos, una decena de estos negocios no posee
habilitación, aunque sus propietarios han comenzado algún trámite para
pertenecer al rubro. “Trataremos de no llegar a la clausura, ya que
existe una fuerza de trabajo activa en estos lugares. Son familias que
viven de esto. Hay que darles la oportunidad de que ingresen al
sistema”, explicó Pedrana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario