El número corresponde a las 627
actividades desarrolladas en las salas Mayor y Marechal, el Anfiteatro
del Parque Sur y el Museo del Teatro. Entre las propuestas, se destacan
espectáculos de nivel internacional y seminarios a cargo de prestigiosos
docentes argentinos.
En los últimos años el Teatro Municipal 1º de Mayo ha
experimentado un profundo proceso de transformación, tanto en lo que
refiere a su política de programación como en su faceta edilicia. Este
cambio cualitativo tuvo su repercusión en aspectos cuantitativos,
referidos a la cantidad de espectadores que pasaron por sus diferentes
espacios y al número de propuestas que completaron su cartelera. En este
sentido, a lo largo de 2011 se contabilizaron 101.215 espectadores que
participaron de las 627 propuestas que se presentaron en las salas Mayor
y Marechal, el Anfiteatro “Juan de Garay” del Parque Sur y en la Sala
Franze del Museo del Teatro. Vale destacar que estas cifras rondan la
media de los últimos cuatro años, y supera con creces los números
correspondientes al período 2004-2007, cuando el promedio rondaba los 74
mil espectadores).
Destacados de programación
De la vasta programación artística que completó la cartelera de los diferentes espacios del Teatro Municipal durante 2011, se destacan, por un lado, espectáculos de nivel nacional e internacional y, por otro, seminarios y cursos formativos de prestigiosos docentes argentinos.
En materia escénica, debemos remarcar la presentación de “Todos eran mis hijos”, obra de Arthur Miller protagonizada por Lito Cruz, Ana María Picchio, Sebastián Meloni, Vanesa González y Federico D’Elía; “Antes de que me olvide”, de Enrique Pinti; del Teatro Negro de Praga; de “Un dios salvaje”, protagonizada por Gabriel Goity, Florencia Peña, Fernán Mirás y María Onetto; “Algo Sobre Mi Madre”, con Gabriela Acher; “Los 39 Escalones”, genial comedia de Alfred Hitchcock interpretada por Fabián Gianola, Laura Oliva, Fabián Mazzei y Nicolás Scarpino; “Drácula. 20 años”, el consagrado e impactante musical de Cibrian-Mahler; “Más de lo mismo”, recital de Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale; “Biz Biz Bang Bang. El Último Beso”, impactante espectáculo de Nuevo Circo de ‘Le Lido’ Centre Municipal des Arts du Cirque (Centro de Artes Circenses) de Toulouse, Francia (en el marco de la programación del Centro de Artes Circenses y Urbanas de Santa Fe); “Baraka”, en su gira despedida, con la actuación de Darío Grandinetti, Juan Leyrado, Jorge Marrale y Hugo Arana; “¡Viva la diferencia!”, la conferencia de la psicóloga chilena Pilar Sordo; y, días atrás, “El hermano muerto”, protagonizada por la gravitante actriz Julia Varley, del Odin Teatret de Dinamarca.
Rock, cumbia y más
El Anfiteatro, a su vez, fue escenario para estrenos y temporada de numerosas obras de elencos santafesinos, para convocantes recitales de rock y para el siempre exitoso y multitudinario ciclo “Tropicales en el Parque”. Además, a dos años de su reapertura, la Sala Marechal del Teatro Municipal 1º de Mayo está definitivamente instalada en el panorama cultural de la ciudad y la región. Desde aquel 6 de mayo de 2009 en el que esta usina artística volvió a la vida, su lógica de programación ha mantenido una coherencia interna que apunta configurar una cartelera participativa y abierta, generando espacios de cooperación y abriendo constantemente la agenda a los artistas locales. En este sentido, al igual que en los años precedentes, en 2011 se desarrolló una programación basada en la cartelera abierta protagonizada por grupos de teatro independientes de la ciudad que hicieron temporada en esta sala; y, en esta misma línea, se afianzó la lógica de Ciclos temáticos en Marechal, cuya programación presentó cuatro propuestas: en febrero, Teatro de Humor; en abril, Teatro de Ciudades; en junio, Danza de Ciudades; y en septiembre-octubre, Operas Primas.
Por otro lado, en junio el Teatro Municipal fue sede de Trotamundos 2011, la segunda edición del Festival Internacional de Títeres organizado por el Gobierno de la Ciudad. Fue coordinado por el elenco del Teatro de Títeres Municipal y contó con la participación de prestigiosas compañías titiriteras de Perú, Chile, Colombia, Brasil y de las provincias argentinas de Río Negro, Neuquén, Misiones, Buenos Aires y Santa Fe.
Finalmente, en materia formativa, en el marco de su programa Centro Experimental en Artes Escénicas, el Teatro Municipal fue escenario para el desarrollo del proyecto Escenarios Educativos, que incluye las actividades de Aula Ciudad, seminarios, talleres, jornadas formativas, clases abiertas y clínicas; de los laboratorios escénicos como Retroclub Santa Fe a cargo de Julieta Tabbush, Cuerpo y Ciudad dirigido por Adriana Barenstein, y del Centro de Artes Circenses y Urbanas dirigido por Gerardo Hochman.
Transformaciones profundas
“Sin duda, un Teatro no adquiere prestigio sólo por sus características arquitectónicas o su infraestructura edilicia, sino también por su historia, su anclaje social, su programación y su producción”, reflexionó el secretario de Cultura, Damián Rodríguez Kees, y completó: “En los últimos cuatro años hemos generado cambios y transformaciones en todos estos aspectos del Teatro Municipal 1º de Mayo, ya que si bien han sido profundos y contundentes, como todo movimiento en el campo social, el ciudadano los incorpora rápidamente a su vida cotidiana y se diluye la perspectiva de dichas transformaciones”.
En esta línea, recordó que “en diciembre de 2007, la Sala Marechal se encontraba en desuso y deteriorada, la sala mayor mostraba un aspecto remozado y buenas condiciones en los espacios para los espectadores, pero no así tras bambalinas: goteras sobre el escenario y la capilla, desagües mal entrazados, bombas de agua mal colocadas, sistema contra incendios sin mantenimiento, camarines y baños en mal estado, carpintería desarmada y utilizada como depósito, pianos sin mantenimiento, entre otras falencias edilicias y de infraestructura. El personal era insuficiente en todas sus especificidades: administración, esceno-montaje, mantenimiento, sala y seguridad. Al mismo tiempo la programación estaba prácticamente tercerizada y el Teatro no conocía de producciones propias y mucho menos de articulación con procesos educativos. Este panorama no era más que un reflejo de la desarticulización de los lazos sociales y una posición relegada de la cultura”.
Marcando el contrapunto, Rodríguez Kees destacó que “en la actualidad, apenas cuatro años después podemos decir que la sala Marechal se encuentra en pleno funcionamiento, con su infraestructura adecuada a las nuevas técnicas y necesidades. Los pianos han sido recuperados y son aprovechados por cantidad de pianistas que pasan por sus diferentes ciclos. El Museo del Teatro articula y dialoga con la programación, dando cuenta de la historia escénica de la ciudad. La carpintería fue recuperada y cuenta con maestros especializados. El personal fue incrementado mediante concursos, asegurando un óptimo servicio los siete días de la semana. En estos cuatro años generamos una coordinación de programación, articulando las producciones propias con las de otros estamentos del Estado, privadas e independientes, muchas veces interactuando a manera de trabajo cooperativo. La diversidad, el riesgo estético, las vanguardias, las nuevas tendencias dialogan ahora con las expresiones populares y la tradición. Lo local, lo nacional y lo extranjero se dan cita a manera de recorrido previsible, organizado en ciclos con continuidad anual, direccionado a la integración social y a la generación de conocimiento a través del arte, brindando no sólo lo que el público pide sino lo que merece, estableciendo distancias críticas con las ofertas del mercado”. Además, puntualizó: “los procesos educativos atravesaron el accionar del Teatro articulando con proyectos y programas como ‘Aula Ciudad’, ‘SOS Música’, ‘Escenarios Educativos’ y el Liceo Municipal, a tal punto que su accionar traspasó las paredes del edificio histórico para trasladarse a otros espacios, como el Molino Marconetti y, a manera de ejemplo, dar nacimiento al Centro de Artes Circenses y Urbanas, germinado en un curso realizado por primera vez en las tablas de la Sala Mayor en ocasión de la visita del Teatro ‘La Arena’”.
Abierto a todos
Para el secretario de Cultura, “no es casual, entonces, que el Teatro Municipal “1º de Mayo” sea actualmente un referente a nivel nacional, un lugar deseado que prestigia a quien pasa por sus tablas. No es casual que el Teatro haya tenido récord de espectadores en los últimos años, que niños de escuelas más lejanas del centro hayan disfrutado de nuestras propuestas tanto como el más exigente espectador con conciertos y obras de alta calidad estética. Se trata de hacer de nuestro querido Teatro Municipal parte fundamental de una política cultural que privilegia el trabajo constante, continuo y cooperativo, la diversidad, el riesgo estético, la participación, la crítica, la integración social, como pilares en la construcción colectiva de ciudadanía. Nosotros, todos, los santafesinos, hemos hecho de este Teatro nuestro lugar de encuentros sensibles y de enamoramientos. Hemos dado forma, entre todos, a una nueva poética de la ciudad”.
Destacados de programación
De la vasta programación artística que completó la cartelera de los diferentes espacios del Teatro Municipal durante 2011, se destacan, por un lado, espectáculos de nivel nacional e internacional y, por otro, seminarios y cursos formativos de prestigiosos docentes argentinos.
En materia escénica, debemos remarcar la presentación de “Todos eran mis hijos”, obra de Arthur Miller protagonizada por Lito Cruz, Ana María Picchio, Sebastián Meloni, Vanesa González y Federico D’Elía; “Antes de que me olvide”, de Enrique Pinti; del Teatro Negro de Praga; de “Un dios salvaje”, protagonizada por Gabriel Goity, Florencia Peña, Fernán Mirás y María Onetto; “Algo Sobre Mi Madre”, con Gabriela Acher; “Los 39 Escalones”, genial comedia de Alfred Hitchcock interpretada por Fabián Gianola, Laura Oliva, Fabián Mazzei y Nicolás Scarpino; “Drácula. 20 años”, el consagrado e impactante musical de Cibrian-Mahler; “Más de lo mismo”, recital de Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale; “Biz Biz Bang Bang. El Último Beso”, impactante espectáculo de Nuevo Circo de ‘Le Lido’ Centre Municipal des Arts du Cirque (Centro de Artes Circenses) de Toulouse, Francia (en el marco de la programación del Centro de Artes Circenses y Urbanas de Santa Fe); “Baraka”, en su gira despedida, con la actuación de Darío Grandinetti, Juan Leyrado, Jorge Marrale y Hugo Arana; “¡Viva la diferencia!”, la conferencia de la psicóloga chilena Pilar Sordo; y, días atrás, “El hermano muerto”, protagonizada por la gravitante actriz Julia Varley, del Odin Teatret de Dinamarca.
Rock, cumbia y más
El Anfiteatro, a su vez, fue escenario para estrenos y temporada de numerosas obras de elencos santafesinos, para convocantes recitales de rock y para el siempre exitoso y multitudinario ciclo “Tropicales en el Parque”. Además, a dos años de su reapertura, la Sala Marechal del Teatro Municipal 1º de Mayo está definitivamente instalada en el panorama cultural de la ciudad y la región. Desde aquel 6 de mayo de 2009 en el que esta usina artística volvió a la vida, su lógica de programación ha mantenido una coherencia interna que apunta configurar una cartelera participativa y abierta, generando espacios de cooperación y abriendo constantemente la agenda a los artistas locales. En este sentido, al igual que en los años precedentes, en 2011 se desarrolló una programación basada en la cartelera abierta protagonizada por grupos de teatro independientes de la ciudad que hicieron temporada en esta sala; y, en esta misma línea, se afianzó la lógica de Ciclos temáticos en Marechal, cuya programación presentó cuatro propuestas: en febrero, Teatro de Humor; en abril, Teatro de Ciudades; en junio, Danza de Ciudades; y en septiembre-octubre, Operas Primas.
Por otro lado, en junio el Teatro Municipal fue sede de Trotamundos 2011, la segunda edición del Festival Internacional de Títeres organizado por el Gobierno de la Ciudad. Fue coordinado por el elenco del Teatro de Títeres Municipal y contó con la participación de prestigiosas compañías titiriteras de Perú, Chile, Colombia, Brasil y de las provincias argentinas de Río Negro, Neuquén, Misiones, Buenos Aires y Santa Fe.
Finalmente, en materia formativa, en el marco de su programa Centro Experimental en Artes Escénicas, el Teatro Municipal fue escenario para el desarrollo del proyecto Escenarios Educativos, que incluye las actividades de Aula Ciudad, seminarios, talleres, jornadas formativas, clases abiertas y clínicas; de los laboratorios escénicos como Retroclub Santa Fe a cargo de Julieta Tabbush, Cuerpo y Ciudad dirigido por Adriana Barenstein, y del Centro de Artes Circenses y Urbanas dirigido por Gerardo Hochman.
Transformaciones profundas
“Sin duda, un Teatro no adquiere prestigio sólo por sus características arquitectónicas o su infraestructura edilicia, sino también por su historia, su anclaje social, su programación y su producción”, reflexionó el secretario de Cultura, Damián Rodríguez Kees, y completó: “En los últimos cuatro años hemos generado cambios y transformaciones en todos estos aspectos del Teatro Municipal 1º de Mayo, ya que si bien han sido profundos y contundentes, como todo movimiento en el campo social, el ciudadano los incorpora rápidamente a su vida cotidiana y se diluye la perspectiva de dichas transformaciones”.
En esta línea, recordó que “en diciembre de 2007, la Sala Marechal se encontraba en desuso y deteriorada, la sala mayor mostraba un aspecto remozado y buenas condiciones en los espacios para los espectadores, pero no así tras bambalinas: goteras sobre el escenario y la capilla, desagües mal entrazados, bombas de agua mal colocadas, sistema contra incendios sin mantenimiento, camarines y baños en mal estado, carpintería desarmada y utilizada como depósito, pianos sin mantenimiento, entre otras falencias edilicias y de infraestructura. El personal era insuficiente en todas sus especificidades: administración, esceno-montaje, mantenimiento, sala y seguridad. Al mismo tiempo la programación estaba prácticamente tercerizada y el Teatro no conocía de producciones propias y mucho menos de articulación con procesos educativos. Este panorama no era más que un reflejo de la desarticulización de los lazos sociales y una posición relegada de la cultura”.
Marcando el contrapunto, Rodríguez Kees destacó que “en la actualidad, apenas cuatro años después podemos decir que la sala Marechal se encuentra en pleno funcionamiento, con su infraestructura adecuada a las nuevas técnicas y necesidades. Los pianos han sido recuperados y son aprovechados por cantidad de pianistas que pasan por sus diferentes ciclos. El Museo del Teatro articula y dialoga con la programación, dando cuenta de la historia escénica de la ciudad. La carpintería fue recuperada y cuenta con maestros especializados. El personal fue incrementado mediante concursos, asegurando un óptimo servicio los siete días de la semana. En estos cuatro años generamos una coordinación de programación, articulando las producciones propias con las de otros estamentos del Estado, privadas e independientes, muchas veces interactuando a manera de trabajo cooperativo. La diversidad, el riesgo estético, las vanguardias, las nuevas tendencias dialogan ahora con las expresiones populares y la tradición. Lo local, lo nacional y lo extranjero se dan cita a manera de recorrido previsible, organizado en ciclos con continuidad anual, direccionado a la integración social y a la generación de conocimiento a través del arte, brindando no sólo lo que el público pide sino lo que merece, estableciendo distancias críticas con las ofertas del mercado”. Además, puntualizó: “los procesos educativos atravesaron el accionar del Teatro articulando con proyectos y programas como ‘Aula Ciudad’, ‘SOS Música’, ‘Escenarios Educativos’ y el Liceo Municipal, a tal punto que su accionar traspasó las paredes del edificio histórico para trasladarse a otros espacios, como el Molino Marconetti y, a manera de ejemplo, dar nacimiento al Centro de Artes Circenses y Urbanas, germinado en un curso realizado por primera vez en las tablas de la Sala Mayor en ocasión de la visita del Teatro ‘La Arena’”.
Abierto a todos
Para el secretario de Cultura, “no es casual, entonces, que el Teatro Municipal “1º de Mayo” sea actualmente un referente a nivel nacional, un lugar deseado que prestigia a quien pasa por sus tablas. No es casual que el Teatro haya tenido récord de espectadores en los últimos años, que niños de escuelas más lejanas del centro hayan disfrutado de nuestras propuestas tanto como el más exigente espectador con conciertos y obras de alta calidad estética. Se trata de hacer de nuestro querido Teatro Municipal parte fundamental de una política cultural que privilegia el trabajo constante, continuo y cooperativo, la diversidad, el riesgo estético, la participación, la crítica, la integración social, como pilares en la construcción colectiva de ciudadanía. Nosotros, todos, los santafesinos, hemos hecho de este Teatro nuestro lugar de encuentros sensibles y de enamoramientos. Hemos dado forma, entre todos, a una nueva poética de la ciudad”.
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