“En condición normal, la cirugía de Cristina no presenta riesgos”

El cirujano Luis Bassagaisteguy dio detalles de la intervención a la mandataria nacional. “El alta se da entre las 24 y las 48 horas, pero el paciente se recupera rápido y muy bien”, explicó.

 

“La operación a la que será sometida la presidenta de la Nación tiene baja morbimortalidad; se relaciona con la experiencia del cirujano que la realiza”, dice a UNO Medios el médico Luis Horacio Bassagaisteguy, titular de la cátedra de Otorrinolaringología de la UNR.


El reconocido cirujano (que cumple sus tareas en el Instituto de Diagnóstico y Cirugía, Sanatorio Parque, Americano y Centro) dio detalles del proceso quirúrgico al que será sometida Cristina Fernández de Kirchner con tono didáctico, ante el expreso pedido del cronista, quien admite ser neófito en las lides de la medicina.


Bassagaisteguy indica que la operación debería promediar 90 minutos. Por estas horas, según el especialista, “en la presidenta debería predominar la idea de que la vida después de la operación es completamente normal, tomando solamente un comprimido de la hormona por día, y realizando controles anuales, que siempre deben ser realizados por el endocrinólogo y el cirujano de cabeza y cuello”.


—¿En qué consiste en líneas generales la intervención a la presidenta de la Nación?


—La cirugía consiste en la resección de toda la glándula tiroides. Esta glándula esta compuesta de un lóbulo izquierdo, una unión que se llama istmo y un lóbulo derecho. Además se deben explorar los ganglios cercanos al lóbulo donde se encuentra el tumor. Se realiza bajo anestesia general.


—¿Cuáles son los riesgos en este tipo de cirugías?


—Es una cirugía con baja morbimortalidad. Se relaciona con la experiencia del cirujano que realiza la intervención. Este debe ser un cirujano especializado en cabeza y cuello, que realice varias cirugías por semana, para reducir al mínimo este riesgo. Afortunadamente en la provincia de Santa Fe los cirujanos de cabeza y cuello están muy acreditados para esta operación. Además existen en la actualidad equipos médicos, como el bisturí armónico, que permite el control de los numerosos vasos sanguíneos que irrigan la glándula, un estimulador del nervio laríngeo que permite su conservación para no causar daño permanente en la voz, y además se conservan las glándulas paratiroides que regulan el metabolismo del del calcio. Con esto le digo que, en condiciones normales, la morbilidad debería ser casi cero.

La evolución
—¿Cuánto tiempo dura habitualmente una operación de este tipo?


—La duración de la operación promedia la hora y media.


—¿Cómo es la etapa preoperatoria?


—En la etapa preoperatoria se necesita una evaluación por parte del endocrinólogo, que es el otro integrante del equipo que va a completar el tratamiento, con iodo radioactivo en el posoperatorio, y una evaluación clínica general como para cualquier otra operación.


—¿Cuántos días se deben esperar para el alta médica?


—El alta de la operación se da entre las 24 a 48 horas, pero el paciente se recupera rápidamente pues a las 3 horas del posoperatorio puede retomar la alimentación e incorporarse del reposo.

Posteriormente necesita una espera de 20 a 30 días para poder tomar el iodo radioactivo que termina con cualquier célula tiroidea que hubiera quedado.


—¿En qué consiste el posoperatorio?


—La idea que tiene que predominar es el conocimiento de la enfermedad, que este cáncer es curable con la cirugía en mas del 95% de los casos y que lo que hay que hacer es ocuparse del mismo y no preocuparse. A pesar de ser un cáncer, tiene en la mayoría de los casos un muy buen pronóstico y se cura. En el posoperatorio los pacientes tienden a no sentirse bien, pues al no tener la glándula tiroides el metabolismo del cuerpo se reduce y eso lleva a un malestar con retención de líquidos, tendencia al frío, alteración en el transito intestinal y en general todas las funciones corporales bajan. Todos estos síntomas retroceden cuando luego de tomar el iodo radioactivo se comienza el reemplazo de la hormona tiroidea para suplir la falta de la glándula, y el paciente retoma una vida totalmente normal.


—¿Cómo debe estar contenida la paciente antes y después de la operación?


—La idea que tiene que predominar es el conocimiento de la enfermedad, que este cáncer es curable con la cirugía en mas del 95% de los casos y que lo que hay que hacer es ocuparse del mismo y no preocuparse a pesar de ser un cáncer tiene en la mayoría de los casos un muy buen pronostico y se cura. En el pop los pacientes tienden a no sentirse bien pues al no tener la glándula tiroides el metabolismo del cuerpo se reduce y eso lleva a un malestar con retención de líquidos, tendencia al frío, alteración en el transito intestinal y en general todas las funciones corporales bajan. Todos estos síntomas retroceden cuando luego de tomar el iodo radioactivo se comienza el reemplazo de la hormona tiroidea para suplir la falta de la glándula.


—¿Puede una paciente retomar una vida normal?

—Efectivamente, la vida es completamente normal, tomando solamente un comprimido de la hormona por día, y controles anuales que siempre deben ser realizados por el endocrinólogo y el cirujano de cabeza y cuello.