El primer gol Tatengue lo convirtió Jerónimo Barrales a los 3 minutos del segundo tiempo. El empate del equipo rosarino lo hizo Martín Tonso a los 31 minutos y Enrique Bologna, de penal, puso el definitivo 2 a 1 para Unión. La Lepra terminó con ocho hombres por las expulsiones de Villalba, Muñoz y Ferracuti. Sarmiento sufrió fractura externa de tibia y peroné en la jugada donde fue expulsado el segundo jugador de Newells.
Unión de Santa Fe debió transpirar demasiado para imponerse por 2-1 como local sobre Newell's, que terminó con tres jugadores menos y dio pelea hasta donde pudo. Los dirigidos por Kudelka, pese a no lucir, lograron su quinto triunfo en el Apertura y siguen lejos de la Promoción. En cambio, la Lepra aún levanta vuelo pese a la llegada de Cagna. Los protagonistas pensaron el duelo de manera diferente, pero coincidieron en la falta de profundidad ofensiva y algunos desacoples defensivos. El Tatengue se basó en la precisión de Rosales para buscar a Barrales con pelotazos, mientras que la Lepra intentó jugar por abajo al compás de Bernardi y Figueroa. Como ninguno terminó de imponerse, el partido se tornó muy friccionado y reñido.
Pese a que tuvo menos fútbol asociado que su rival, las chances más claras en la etapa inicial fueron para Unión, que hirió en cada jugada de pelota detenida. A los 9, lo tuvo Correa de cabeza. Y Barrales tuvo un par de oportunidades mediante la misma vía a los 13 y a los 38. La ausencia de Pellerano por un problema físico fue difícil de disimular para los rosarinos.
En tanto, lo mejor de Newell's se produjo cuando Bernardi plantó bandera en campo rival y repartió fútbol hacia los costados, sobremanera a la derecha para las proyecciones de Díaz. A su vez, Figueroa se esforzó por ser el conductor. Fue saludable la intención de tocar hasta el área, pero faltó precisión en los remates finales. Lo tuvieron Pérez, en dos ocasiones, y Muñoz. A poco del entretiempo, Cagna maldijo la expulsión por doble amarilla de Villalba, el encargado de la contención media.
A los tres minutos del complemento, Unión abrió el marcador y le dio un cachetazo determinante a un equipo joven como el de Newell's. Rosales la abrió para Velázquez, que tiró un centro atrás por izquierda y lo encontró a Barrales. El remate del ex Banfield (enseguida salió por lesión) de frente al arco infló la red de Peratta y le dio un premio exagerado al anfitrión. La Lepra perdió el rumbo y desbarrancó a los 7: el juvenil Muñoz fue expulsado luego de provocarle la fractura de tibia y peroné a Sarmiento.
El estadio se estremeció ante la imagen de la pierna del mediocampista de Unión, que fue reemplazado inmediatamente por la tremenda lesión expuesta. El duelo perdió orden y vuelo porque el Tatengue no supo cómo ampliar la diferencia. Y los de Cagna mejoraron con los ingresos de Noir, Marcos Pérez y Tonso, quien precisamente aprovechó un pase del segundo para igualar a los 31. Un mazazo inesperado.
La roja a Ferracuti le dio otra nueva posibilidad a Unión, que fue a buscar empujado por su gente. Y llegó la falta de Bernardi sobre Núñez que le permitió a Bologna terminar con la angustia mediante un penal. Faltaban sólo tres minutos y el empate heroico de Newell's no pudo ser. En un duelo que recién ganó emoción en la etapa final por las expulsiones, los de Kudelka dieron un grito de alivio y hundieron un poco más a los rojinegros.
Pese a que tuvo menos fútbol asociado que su rival, las chances más claras en la etapa inicial fueron para Unión, que hirió en cada jugada de pelota detenida. A los 9, lo tuvo Correa de cabeza. Y Barrales tuvo un par de oportunidades mediante la misma vía a los 13 y a los 38. La ausencia de Pellerano por un problema físico fue difícil de disimular para los rosarinos.
En tanto, lo mejor de Newell's se produjo cuando Bernardi plantó bandera en campo rival y repartió fútbol hacia los costados, sobremanera a la derecha para las proyecciones de Díaz. A su vez, Figueroa se esforzó por ser el conductor. Fue saludable la intención de tocar hasta el área, pero faltó precisión en los remates finales. Lo tuvieron Pérez, en dos ocasiones, y Muñoz. A poco del entretiempo, Cagna maldijo la expulsión por doble amarilla de Villalba, el encargado de la contención media.
A los tres minutos del complemento, Unión abrió el marcador y le dio un cachetazo determinante a un equipo joven como el de Newell's. Rosales la abrió para Velázquez, que tiró un centro atrás por izquierda y lo encontró a Barrales. El remate del ex Banfield (enseguida salió por lesión) de frente al arco infló la red de Peratta y le dio un premio exagerado al anfitrión. La Lepra perdió el rumbo y desbarrancó a los 7: el juvenil Muñoz fue expulsado luego de provocarle la fractura de tibia y peroné a Sarmiento.
El estadio se estremeció ante la imagen de la pierna del mediocampista de Unión, que fue reemplazado inmediatamente por la tremenda lesión expuesta. El duelo perdió orden y vuelo porque el Tatengue no supo cómo ampliar la diferencia. Y los de Cagna mejoraron con los ingresos de Noir, Marcos Pérez y Tonso, quien precisamente aprovechó un pase del segundo para igualar a los 31. Un mazazo inesperado.
La roja a Ferracuti le dio otra nueva posibilidad a Unión, que fue a buscar empujado por su gente. Y llegó la falta de Bernardi sobre Núñez que le permitió a Bologna terminar con la angustia mediante un penal. Faltaban sólo tres minutos y el empate heroico de Newell's no pudo ser. En un duelo que recién ganó emoción en la etapa final por las expulsiones, los de Kudelka dieron un grito de alivio y hundieron un poco más a los rojinegros.
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