El proyecto del diputado justicialista Alberto Cejas que suprime una de las exenciones impositivas que benefician a multinacionales que operan en los puertos de Santa Fe, tiene preferencia para ser tratado antes del 30 de noviembre. Si la ley es aprobada por la Legislatura, la provincia podría recaudar unos 300 millones de pesos. ¿Cómo puede ser que estas terminales portuarias que facturan millones de dólares estén exceptuadas de pagar impuestos en la provincia?", se preguntó el diputado Cejas, quien llamó a "terminar con esta herencia del neoliberalismo".
Un mes antes de dejar su banca, el diputado Alberto Cejas volvió a insistir esta semana con un proyecto de ley que presentó hace un año, para suprimir una de las exenciones impositivas que benefician a multinacionales que operan en Santa Fe. Y cobrarle el impuesto a los ingresos brutos a exportadoras de porotos de soja y sus derivados que fueron eximidas del gravamen a principios de los '90. "Hay que terminar con esta herencia del neoliberalismo", se ilusionó el legislador, al considerar "injusto" y "contradictorio" que zafen del fisco compañías que facturan m'as que el presupuesto de la provincia ?que en 2012 rondarß los 33 mil millones de pesos? y obligar a los propios trabajadores de esas empresas a pagar impuestos a las ganancias. Cejas estima que si la ley es aprobada por la Legislatura, la provincia podría recaudar unos 300 millones de pesos, y propuso que el 50 por ciento sea destinado a la construcción de viviendas sociales y la otra mitad a la promoción industrial en el centro?norte santafesino. El proyecto de Cejas -que cuenta con la adhesión de diputados del kirchnerismo- tiene preferencia para ser tratado antes del 30 de noviembre, y si el Frente Progresista lo acompaña, ya no tendrá el destino del cajón.
Cejas es secretario general de la CGT Santa Fe, pero no logró la reelección en su banca, a pesar de que el peronismo tendrá mayoría en la Cámara de Diputados, a partir del 10 de diciembre. En su despedida, insistió entonces con un proyecto que impulsó el año pasado para suprimir la exención a los ingresos brutos que beneficia a las exportadoras de soja y sus derivados, desde 1993. Lo acompañaron con su firma cuatro diputados del kirchnerismo, entre ellos el jefe del bloque del Frente para la Victoria, Luis Rubeo, Ricardo Peirone, Claudia Saldaña y Marcelo Brignoni y la diputada Silvia De Césaris, que responde al jefe histórico de UPCN, Alberto Maguid.
El proyecto de Cejas tiene preferencia para ser tratado antes que termine el período ordinario, el 30 de noviembre, y si el Frente Progresista lo acompaña, ya no tendrá el destino del cajón, como ocurrió hasta ahora. El ministro de Economía, Angel Sciara, ha dicho varias veces que las exenciones impositivas que vienen desde los 90 y benefician a grandes empresas le cuestan a la provincia más de 2.000 millones de pesos al año.
El diputado Cejas es más modesto en sus cálculos, estima que si se restituye el impuesto a los ingresos brutos a las cerealeras, la provincia podría recaudar unos 300 millones de pesos más. Para lo cual su proyecto propone dos destinos: la construcción de viviendas sociales y la promoción industrial en la zona centro norte. Una comisión bicameral de seguimiento integrada por dos diputados, dos senadores y dos funcionarios de la Casa Gris revisará las inversiones.
Las exenciones impositivas a las cerealeras vienen del régimen de promoción industrial, al que adhrió Santa Fe, en 1993. "Nosotros vemos bien las promociones, pero creemos que no deben ser de por vida. Y más, cuando se trata de empresas de esta magnitud que en conjunto han llegado a facturar más que el presupuesto de la provincia", dijo Cejas a Rosario/12.
?¿Qué empresas deberían pagar el impuesto?
?Las que facturan más de 40 millones de pesos anuales. Hace un año que estoy buscando adhesiones para este proyecto, porque se trata de multinacionales que no sólo no pagan ingresos brutos en Santa Fe, sino hemos tenido trabajadores muertos por no adecuar sus instalaciones a la ley de Higiene y Seguridad y remiten sus excedentes a sus casas matrices. Entonces, no vemos una reciprocidad con el pueblo santafesino, que ha contribuido con sus impuestos a que estas plantas se puedan radicar en la provincia -contestó.
"Además -agregó-, es un sentido de estricta justicia. ¿Cómo puede ser que estas terminales portuarias que facturan millones de dólares estén exceptuadas de pagar impuestos en la provincia, cuando los trabajadores de esas mismas empresas que cobran salarios de 8 mil, 9 mil o 10 mil pesos tienen que pagar impuestos a las ganancias?".
En los fundamentos, Cejas fue más preciso en la radiografía. "Se trata de grandes empresas que tienen facturaciones multimillonarias" y a pesar "han sido denunciadas por contratar trabajadores en negro, no respetar los convenios de trabajo, incumplir normas de protección ambiental y por falta de higiene y seguridad laboral". Y en algunos casos, han sido investigadas y denunciadas por evasión fiscal, como ocurrió en enero de 2009, marzo de 2010 y marzo de 2011, cuando "la Afip confirmó a través de sus operativos, que en Santa Fe la evasión tributaria por la compra y venta de granos en negro involucró a 24 firmas, en su mayoría acopios y comercializadoras", agregó.
?¿Tiene una estimación de cuánto se podría recaudar? -insistió este diario.
?Estamos haciendo los estudios que todavía no están concluidos, porque hay convenios multilaterales con otras provincias, en función de que el producto viene de otros sectores del país. Pero entendemos que es un monto muy importante para empezar a solucionar el problema habitacional de la provincia y que el centro norte de Santa Fe tenga las mismas posibilidades que el sur para generar nuevos emprendimientos productivos.
?¿Arriesga una cifra?
?Creemos que la recaudación podría superar los 300 millones de pesos -concluyó Cejas.
Cejas es secretario general de la CGT Santa Fe, pero no logró la reelección en su banca, a pesar de que el peronismo tendrá mayoría en la Cámara de Diputados, a partir del 10 de diciembre. En su despedida, insistió entonces con un proyecto que impulsó el año pasado para suprimir la exención a los ingresos brutos que beneficia a las exportadoras de soja y sus derivados, desde 1993. Lo acompañaron con su firma cuatro diputados del kirchnerismo, entre ellos el jefe del bloque del Frente para la Victoria, Luis Rubeo, Ricardo Peirone, Claudia Saldaña y Marcelo Brignoni y la diputada Silvia De Césaris, que responde al jefe histórico de UPCN, Alberto Maguid.
El proyecto de Cejas tiene preferencia para ser tratado antes que termine el período ordinario, el 30 de noviembre, y si el Frente Progresista lo acompaña, ya no tendrá el destino del cajón, como ocurrió hasta ahora. El ministro de Economía, Angel Sciara, ha dicho varias veces que las exenciones impositivas que vienen desde los 90 y benefician a grandes empresas le cuestan a la provincia más de 2.000 millones de pesos al año.
El diputado Cejas es más modesto en sus cálculos, estima que si se restituye el impuesto a los ingresos brutos a las cerealeras, la provincia podría recaudar unos 300 millones de pesos más. Para lo cual su proyecto propone dos destinos: la construcción de viviendas sociales y la promoción industrial en la zona centro norte. Una comisión bicameral de seguimiento integrada por dos diputados, dos senadores y dos funcionarios de la Casa Gris revisará las inversiones.
Las exenciones impositivas a las cerealeras vienen del régimen de promoción industrial, al que adhrió Santa Fe, en 1993. "Nosotros vemos bien las promociones, pero creemos que no deben ser de por vida. Y más, cuando se trata de empresas de esta magnitud que en conjunto han llegado a facturar más que el presupuesto de la provincia", dijo Cejas a Rosario/12.
?¿Qué empresas deberían pagar el impuesto?
?Las que facturan más de 40 millones de pesos anuales. Hace un año que estoy buscando adhesiones para este proyecto, porque se trata de multinacionales que no sólo no pagan ingresos brutos en Santa Fe, sino hemos tenido trabajadores muertos por no adecuar sus instalaciones a la ley de Higiene y Seguridad y remiten sus excedentes a sus casas matrices. Entonces, no vemos una reciprocidad con el pueblo santafesino, que ha contribuido con sus impuestos a que estas plantas se puedan radicar en la provincia -contestó.
"Además -agregó-, es un sentido de estricta justicia. ¿Cómo puede ser que estas terminales portuarias que facturan millones de dólares estén exceptuadas de pagar impuestos en la provincia, cuando los trabajadores de esas mismas empresas que cobran salarios de 8 mil, 9 mil o 10 mil pesos tienen que pagar impuestos a las ganancias?".
En los fundamentos, Cejas fue más preciso en la radiografía. "Se trata de grandes empresas que tienen facturaciones multimillonarias" y a pesar "han sido denunciadas por contratar trabajadores en negro, no respetar los convenios de trabajo, incumplir normas de protección ambiental y por falta de higiene y seguridad laboral". Y en algunos casos, han sido investigadas y denunciadas por evasión fiscal, como ocurrió en enero de 2009, marzo de 2010 y marzo de 2011, cuando "la Afip confirmó a través de sus operativos, que en Santa Fe la evasión tributaria por la compra y venta de granos en negro involucró a 24 firmas, en su mayoría acopios y comercializadoras", agregó.
?¿Tiene una estimación de cuánto se podría recaudar? -insistió este diario.
?Estamos haciendo los estudios que todavía no están concluidos, porque hay convenios multilaterales con otras provincias, en función de que el producto viene de otros sectores del país. Pero entendemos que es un monto muy importante para empezar a solucionar el problema habitacional de la provincia y que el centro norte de Santa Fe tenga las mismas posibilidades que el sur para generar nuevos emprendimientos productivos.
?¿Arriesga una cifra?
?Creemos que la recaudación podría superar los 300 millones de pesos -concluyó Cejas.
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