El intendente José Luis Freyre
anunció que el municipio avanzará en la demolición de la cuestionada
obra lindera al edificio comercial, pero calificó al tema de “demasiado
manoseado”. La edificación había sido denunciada por el Concejo
Deliberante.
.La Capital |
La Municipalidad de Venado Tuerto procederá a la demolición parcial
de una ampliación de una obra irregular que se estaba construyendo en un
local comercial ubicado en calle Casey 647. De este modo se soluciona
un problema suscitado entre la Intendencia y el Concejo Deliberante, que
había ordenado detener la obra en su momento y encontró resistencia por
parte del dueño del negocio, denominado Taco.
El intendente José Luis Freyre anunció que el municipio avanzará en la demolición de la cuestionada obra lindera al edificio comercial, pero calificó al tema de “demasiado manoseado”.
La obra es un emprendimiento comercial —registrada a nombre de Ricardo Gómez, hermano de Miguel Gómez, propietario de Taco—, que “generó fuertes discusiones, en particular cuando concejales de la oposición ingresaron en el terreno de las relaciones personales”, ya que Miguel es amigo personal de Freyre.
Freyre resaltó que “la multa aplicada para quien comete una excepcionalidad valió para todo el mundo, menos para Gómez. En este caso particular no hay bien a preservar, sino que es en referencia al pulmón del centro de manzana, el punto objetado por los ediles opositores”.
Sin embargo, advirtió que “ese pulmón ya está perdido en casi todas las manzanas del microcentro, y en particular en ese sector. Si alrededor hubiesen existido jardines, patios o piletas no se hubiera dado este debate y cabía la demolición sin más. Paradójicamente, Gómez podría ir hacia arriba seis o siete pisos, algo espantoso para avenida Casey, pero debería dejar un hueco atrás”, dijo el mandatario venadense
Demolición. Sobre la demolición, el mandatario precisó que “deberá alcanzar el 60 o 70 por ciento de lo construido, no del total, aunque para nosotros es más conveniente cobrar una multa, que se haga una terraza verde y demoler algunos de los pisos construidos antes que insistir en ganar un espacio que no es pulmón de aire para nadie”.
Luego alertó que “si permitimos excepciones, hay que ser cautelosos para no generar un hecho que termine en un amparo y en la judicialización, como ocurre con un kiosco de diarios y revistas ubicado desde hace años en pleno centro de la ciudad. Debemos debatir esta cuestión con responsabilidad, porque este es un caso testigo para el desarrollo de la ciudad”, remató.
El intendente José Luis Freyre anunció que el municipio avanzará en la demolición de la cuestionada obra lindera al edificio comercial, pero calificó al tema de “demasiado manoseado”.
La obra es un emprendimiento comercial —registrada a nombre de Ricardo Gómez, hermano de Miguel Gómez, propietario de Taco—, que “generó fuertes discusiones, en particular cuando concejales de la oposición ingresaron en el terreno de las relaciones personales”, ya que Miguel es amigo personal de Freyre.
Freyre resaltó que “la multa aplicada para quien comete una excepcionalidad valió para todo el mundo, menos para Gómez. En este caso particular no hay bien a preservar, sino que es en referencia al pulmón del centro de manzana, el punto objetado por los ediles opositores”.
Sin embargo, advirtió que “ese pulmón ya está perdido en casi todas las manzanas del microcentro, y en particular en ese sector. Si alrededor hubiesen existido jardines, patios o piletas no se hubiera dado este debate y cabía la demolición sin más. Paradójicamente, Gómez podría ir hacia arriba seis o siete pisos, algo espantoso para avenida Casey, pero debería dejar un hueco atrás”, dijo el mandatario venadense
Demolición. Sobre la demolición, el mandatario precisó que “deberá alcanzar el 60 o 70 por ciento de lo construido, no del total, aunque para nosotros es más conveniente cobrar una multa, que se haga una terraza verde y demoler algunos de los pisos construidos antes que insistir en ganar un espacio que no es pulmón de aire para nadie”.
Luego alertó que “si permitimos excepciones, hay que ser cautelosos para no generar un hecho que termine en un amparo y en la judicialización, como ocurre con un kiosco de diarios y revistas ubicado desde hace años en pleno centro de la ciudad. Debemos debatir esta cuestión con responsabilidad, porque este es un caso testigo para el desarrollo de la ciudad”, remató.
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