El concejal del Frente para la Victoria, Roberto Sukerman dijo ser escéptico ante la nueva convocatoria de Fein. Reclamó avances concretos y que se escuchen sus ideas.
La Capital |
El peronismo tomó distancia ayer de la convocatoria al "gran acuerdo por la convivencia democrática" que anunció la intendenta Mónica Fein. El concejal kirchnerista Roberto Sukerman mostró su "escepticismo" en torno a esta invitación a coordinar acciones contra la violencia y el narcotráfico. "Queremos cuestiones concretas. A los vecinos no les importa de qué partido somos. Quieren respuestas y no se las podemos dar directamente como concejales. Las tiene que dar el Ejecutivo provincial y el municipal. «Nos dicen para qué se sientan ahí y hablan al cuete si, al final, no resuelven nada»", disparó.
Fein había adelantado a La Capital que iba a invitar a los referentes de todos los partidos políticos, a las instituciones más representativas de Rosario y a los líderes gremiales y sectoriales para suscribir un acta que promueva medidas para disminuir la violencia y que apuntalen el diálogo plural. El punto culminante pensado por el municipio será el acto por la conmemoración de la creación de la bandera, el miércoles 27 de febrero (en el Monumento), con una fuerte presencia local y sin invitación formal a las autoridades nacionales.
"En el Frente para la Victoria (FPV) cada vez somos más escépticos de que funcione esta convocatoria", advirtió Sukerman, en alusión a las dos cumbres políticas anteriores llevadas adelante en el Palacio de los Leones, donde todos los bloques del cuerpo se reunieron con Fein y su gabinete. Allí se acordó crear un área local para prevenir e investigar delitos complejos.
Al respecto, Sukerman agregó: "Participamos de las dos primeras reuniones y algún punto de los que propusimos se incorporó, como el programa de protección de testigos y víctimas. Pero, la verdad es que nos parece insuficiente y hay que seguir insistiendo ante el gobierno provincial", dijo el edil.
"Hay cuestiones internas de disputas entre municipio y provincia que exceden a la seguridad, y lo vimos cuando fueron los saqueos, la falta de colaboración de la provincia con Rosario. Creemos que la intendenta lo que quiere es tener un plafón más grande, más apoyo, porque ella sola no puede exigirle a la provincia en cuestiones de seguridad", enfatizó.
Fue entonces cuando el concejal confesó: "Tenemos un gran temor, que es lo que nos expresan los vecinos a cada momento. Que estemos sentados en una mesa donde no se resuelve nada y las muertes se sigan dando" en los barrios de la ciudad.
Ante la invitación a participar de nuevas actividades que confluyan en un gran acto el 27 de febrero, el edil del PJ aclaró que su bloque pretende "cuestiones concretas".
"A los vecinos no les importa de qué partido somos. Quieren respuestas y no se las podemos dar directamente como concejales. Las tiene que dar el Ejecutivo provincial y el municipal. «Nos dicen para qué se sientan ahí y hablan al cuete si, al final, no resuelven nada»", señaló.
"Si no vemos medidas concretas que podamos apoyar no tiene mucho sentido sentarse, porque vamos a terminar perdiendo el tiempo y engañando a todos", remató el representante K en el Palacio Vasallo.
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