Más de 200 personas mayores de 18 años se registraron en la ciudad de Rosario para la detección gratuita de hepatitis B y C, durante las dos primeras horas del operativo conjunto realizado hoy por el Ministerio de Salud, la Secretaría de Salud Pública de la Municipalidad, el Grupo Hepatitis Rosario y la sala 15 del hospital Centenario de esa ciudad.
El operativo de detección estuvo a cargo de profesionales del Centro de Tecnología en Salud Pública (CTSP) del hospital Centenario; en tanto que personal de Epidemiología de la zona sur vacunó contra la enfermedad de tipo B a los nacidos a partir de 1992 que no estaban vacunados o les faltaba completar el esquema de vacunación.
En ese marco, la coordinadora del Nodo Rosario del área de Inmunizaciones, Estela Bravo, destacó el trabajo en conjunto y articulado que incluyó además a la Facultad de Ciencias Médicas, “que nos ha permitido vacunar a todos los niños nacidos a partir del año 1992 con la vacuna contra la hepatitis B e iniciar esquemas a quien no tenía la vacuna aplicada, o bien completar los necesarios”.
Bravo remarcó que “esta es una muy buena oportunidad para captar al segmento de 11 a 19 años que son los más reacios a vacunarse”, y aseguró que “en todos los servicios de salud también se está vacunando a los niños menores, desde recién nacidos hasta los 11 años”.
Por su parte, la encargada del vacunatorio del hospital de Niños Víctor J. Vilela y secretaria del Comité de Infectología de la Sociedad de Pediatría de Rosario, Ana Chiossone, señaló que “en lo que va del año hasta hoy, en la provincia de Santa Fe no hay casos de hepatitis A en ninguno de los grupos etáreos, ni pediátricos ni adultos. En tanto, respecto de las hepatitis B y C, consignó que “los datos de casos están en franco descenso a partir de la incorporación de la vacuna obligatoria”.
Asimismo, Chiossone indicó que en el hospital “estamos haciendo un recupero de los niños pre- adolescentes porque esta vacuna se incorporó para neonatología a partir del año 2000, por lo que estamos reforzando que todos esos chicos reciban el esquema completo de hepatitis; son tres dosis separadas por 0, 1 y 6 meses la tercera”.
De igual modo, subrayó la necesidad de realizarse un análisis de sangre para detectar hepatitis ya que “hay un altísimo número de personas que pueden tener hepatitis A, B o C y no saberlo”, reforzando la importancia de la vacunación para aquellos que no estén inmunizados.
En tanto, la coordinadora general del Grupo Hepatitis Rosario, Edith Michelotti, se mostró satisfecha por la gran convocatoria y ponderó el trabajo que se realizaba en la plaza, entendiéndolo como una apuesta “por la salud y por la vida”.
“Por cada 10 personas infectadas por hepatitis B o C hay una con sida. Estamos frente a un verdadero flagelo mundial. En el mundo hay 550 millones de personas infectadas por hepatitis B o C y sólo un 2% lo sabe”, precisó Michelotti.
La actividad estuvo acompañada por música y entretenimiento; en tanto un grupo de actores brindó información al público presente y repartió globos a los niños.
Paralelamente a este encuentro, alumnos de la Facultad de Ciencias Médicas y Bioquímicas brindaron información y volantes ilustrativos en los distritos y las peatonales rosarinas.
VACUNA DISPONIBLE
La cartera sanitaria provincial destacó que se encuentra disponible la vacuna de hepatitis B en todos los centros de salud y hospitales por lo cual se aprovechó la fecha para iniciar o completar los esquemas de vacunación a niños desde recién nacidos hasta 19 años, como así también al personal de salud y a los grupos de riesgo.
Asimismo, en el salón Auditorio, sala 15, del hospital Centenario, se realizó una clase ilustrativa –a cargo del profesor Hugo Tanno– sobre hepatitis virales crónicas, destinada a estudiantes de la Facultad de Ciencias Médicas y Bioquímicas de Rosario.
En tanto ayer tuvo se emitió por un canal de aires de Rosario, un programa en el que la temática fue abordada por panelistas y reconocidos profesionales.
QUÉ ES LA HEPATITIS
La hepatitis es la inflamación del hígado provocada por infección de un virus, y más raramente por intoxicación. El síntoma principal es la ictericia (coloración amarilla de la piel).
Como consecuencia de la inflamación, se bloquea el paso de la bilis que produce el hígado al descomponer la grasa y se altera la función del hígado.
Cuando una persona contrae hepatitis, el hígado se inflama y deja de funcionar correctamente. Los virus responsables, por su parte, son gérmenes y hacen que la enfermedad, en sus tres tipos más habituales –A, B y C– se contagie de una persona a otra.
HEPATITIS C
La hepatitis C generalmente no presenta síntomas, por eso se la llama la “enfermedad silenciosa”. Este virus destruye lentamente células hepáticas y puede, con el transcurso de los años, producir cirrosis o cáncer hepático.
Esta patología se transmite cuando se produce un contacto entre sangre sana con sangre infectada por el virus C (transmisión vía parenteral), siendo las principales vías de contagio las agujas contaminadas o las transfusiones de sangre infectada; aunque en algunos casos, la enfermedad también puede contraerse por vía materno-fetal.
HEPATITIS B
Las vías de contagio de la hepatitis B pueden darse por vía sexual, transfusiones de sangre infectada o pinchazos con agujas contaminadas. Además, también se puede contagiar vía intrauterina, es decir, una madre portadora puede transmitirle el virus a su hijo durante la gestación.
Por lo general, la infección pasa desapercibida, aunque también pueden manifestarse ciertos síntomas como cansancio, ictericia o coloración oscura de la orina.
El tratamiento farmacológico es efectivo en muchos casos y los pacientes consiguen recobrar la salud. Sin embargo, si el trastorno está muy avanzado y ha provocado daños en el organismo, la única solución es el trasplante hepático.
DETECCIÓN
Tanto la hepatitis B como la C provocan un aumento de los niveles de transaminasas (enzimas del hígado), por lo que a través de un análisis de sangre puede sospecharse la existencia de la enfermedad. Por eso, la campaña contra la hepatitis reclama la inclusión de la medición del nivel de transaminasas en los análisis de sangre rutinarios.
PREVENCIÓN
Existe una vacuna disponible para la prevención de la hepatitis B la cual se recomienda para todas las personas menores de 19 años de edad, así como para los adultos mayores de 19 años que corren el riesgo de contraer la infección.
GRUPOS INCLUIDOS EN EL CALENDARIO DE VACUNACIÓN
>> Recién nacidos (RN): En la Argentina por resolución 940/00 del Ministerio de Salud se inició la vacunación a partir del 1° de noviembre del 2000. La vacuna se administra desde el nacimiento a los RN y se completa con tres dosis posteriores de vacuna pentavalente. En este momento, todos los niños desde el nacimiento hasta los 9 años cuentan con esta protección.
>> Preadolescentes (11 años): no inmunizados previamente, en el marco del Programa de Salud Escolar (a partir de 2003). Se inicia un esquema de tres dosis y, a la fecha, todos los niños de 11 a 19 años deben tener su esquema completo.
>> También es obligatoria para los trabajadores de la salud por la ley nacional Nº 24.151, que rige desde 1992. Se trabaja en conjunto con la universidad para vacunar a los alumnos de las carreras relacionadas con salud.
RECOMENDACIONES
Para evitar el contagio, deben tomarse sobre todo, medidas de higiene personales, que refieren a la posibilidad de entrar en contacto con sangre de personas infectadas y al hecho de mantener relaciones sexuales seguras: usar preservativos cada vez que se mantengan relaciones sexuales, no compartir agujas, cepillos de dientes, ni máquinas de afeitar y asegurarse que los instrumentos estén limpios, en los casos de hacerse un tatuaje o perforación en alguna parte del cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario