Para novios que darán el sí y cumpleañeras de 15 es una odisea encontrar uno disponible. Para el año que viene quedan pocos lugares. Marzo, abril, noviembre y diciembre, los meses requeridos.
En los primeros días de noviembre, Mariana y Diego decidieron casarse y pusieron fecha para el año que viene. Ella empezó a buscar salones y parroquias para su casamiento, a realizarse en noviembre de 2012. Pero aunque parezca un tanto exagerado, lo cierto es que de haber iniciado la búsqueda más tarde, probablemente no hubiese conseguido su salón preferido.
Sucede que de los más de cien salones habilitados para fiestas privadas que hay en la ciudad de Santa Fe no dan abasto para la cantidad de casamientos, fiestas de 15 y otras celebraciones que hay anualmente como egresos y cenas o despedidas empresariales. Y, por eso, las reservas se hacen con un promedio de anticipación de entre un año y hasta 18 meses, no más debido a las variaciones económicas que suceden año a año.
“Cuando decidimos casarnos y pensamos en noviembre, comenzamos a ver los salones como para tener una idea sobre cuánta plata necesitábamos, pero nos encontramos con la sorpresa que para la fecha elegida –17 de noviembre– no había salón disponible, por lo menos el que nosotros queríamos. Entonces tuvimos que optar por un sábado anterior, el 3, para así poder contar con ese lugar”, detalló Mariana que ahora iniciará la odisea de encontrar parroquia, aunque según lo averiguado hay más disponibilidad.
Si además se contabilizan la cantidad de fiestas de 15 que hay por año, no es de extrañar que, a pesar de que la gente puede optar no sólo por los salones habilitados, sino además por alguno de los clubes, hoteles o los boliches bailables de la ciudad que también tienen permiso para realizar festejos privados, los lugares más tradicionales, así como los que están de “moda”, tengan reservas ya señadas para dentro de un año.
“Parece gracioso pero tengo reservas para la segunda quincena y todos los fines de semana de diciembre, pero de 2013. Si bien es una fecha para recepciones y egresos, también hay casamientos y cumpleaños de 15”, dijo Gustavo, encargado de unos de los salones de fiesta ubicado en calle San Luis al 2.800. Y si bien ése es “un caso excepcional”, casi todos los viernes y sábados de marzo y abril de 2012 “ya están tomados”; octubre, noviembre y diciembre, también del año que viene “están todos reservado”; y por eso las consultas por fechas para noviembre de 2013 “no son una rareza”.
Algunas explicaciones
Los salones consultados por Diario UNO coincidieron en señalar que existen dos temporadas altas, que van de marzo a mayo y de octubre a diciembre, y los días que primero se ocupan son los sábados, aunque los viernes también son días muy solicitados por los descuentos que hacen los proveedores de servicios para fiestas, sobre todo para los cumpleaños de 15.
El porqué de tanta anticipación no tiene una única explicación. “Los novios y los padres de las chicas que buscan festejar sus 15 años empiezan los preparativos con mucha anticipación, porque cada vez salen más novedades en el mercado, por lo cual tienen que ocuparse de más cosas, y el primer paso siempre es el salón”, aseguró Alejandro, propietario de un salón ubicado por la avenida General Paz 7.800 donde ya tienen casi todo reservado para el año que viene, sólo quedan algunos fines de semana en el invierno, la temporada baja que ellos denominan. “Una vez que ya tienen reservado el salón y la iglesia, los novios se tranquilizan”, agregó.
En cuanto a la reserva del lugar elegido, la mayoría de los consultados coincidió en que piden un depósito del 20 por ciento y luego el interesado opta la forma de pago que quiere hacer, que puede ser en cuotas o la liquidación días antes de la fecha pactada. Los propietarios o encargados anticipan que el precio puede sufrir alguna variación, sobre todo teniendo en cuanta que son con un año de anticipación y hasta más, pero por lo general tratan de absorberlo para no modificar tanto el valor acordado en un primer momento.
“En un primer encuentro y cuando se toma la decisión, pedimos un depósito del 20 por ciento del valor para reservarlo y después acordamos la forma de pago de lo que queda. Tratamos de absorber nosotros el aumento que pueda surgir en ese año de contrato, salvo que sea muy excepcional. A la hora de hacer el contrato, ya tenemos en cuenta un 15 o 20 por ciento más que es lo que maneja la cámara inmobiliaria como aumento anual en el sector. Después si llega a ser mucho más la suba, se negocia con el cliente.”, contó Juan Carlos, otro propietario de una salón ubicado en el norte de la ciudad de Santa Fe.
La parroquia, también un tema
Otro problema es combinar la fecha de la ceremonia religiosa con la de la fiesta, aunque, generalmente, los novios priorizan el salón por sobre la parroquia. De todas maneras, según las consultas hechas por Diario UNO en algunas iglesias santafesinas, para 2012 quedan lugares disponibles ya que por general, las reservas se hacen unos seis meses antes. En el caso del Registro Civil, no se otorgan turnos antes de los 180 días de la fecha elegida.
De todas maneras, al igual que con los salones, las parroquias también ya tienen turnos reservados para 2012 y para octubre, noviembre y diciembre ya casi no quedan lugares. En una iglesia del sur de la ciudad y hasta en la propia Basílica de Guadalupe se dan hasta tres turnos para casamientos los sábados, ante la gran demanda para esos meses del año. “Pero los de marzo y abril de 2012 ya están todos tomados”, informó una de las encargadas de agendar los turnos, y añadió: “Antes reservaban con menos tiempo, pero ahora llaman hasta con un año de anticipación”.
Sucede que de los más de cien salones habilitados para fiestas privadas que hay en la ciudad de Santa Fe no dan abasto para la cantidad de casamientos, fiestas de 15 y otras celebraciones que hay anualmente como egresos y cenas o despedidas empresariales. Y, por eso, las reservas se hacen con un promedio de anticipación de entre un año y hasta 18 meses, no más debido a las variaciones económicas que suceden año a año.
“Cuando decidimos casarnos y pensamos en noviembre, comenzamos a ver los salones como para tener una idea sobre cuánta plata necesitábamos, pero nos encontramos con la sorpresa que para la fecha elegida –17 de noviembre– no había salón disponible, por lo menos el que nosotros queríamos. Entonces tuvimos que optar por un sábado anterior, el 3, para así poder contar con ese lugar”, detalló Mariana que ahora iniciará la odisea de encontrar parroquia, aunque según lo averiguado hay más disponibilidad.
Si además se contabilizan la cantidad de fiestas de 15 que hay por año, no es de extrañar que, a pesar de que la gente puede optar no sólo por los salones habilitados, sino además por alguno de los clubes, hoteles o los boliches bailables de la ciudad que también tienen permiso para realizar festejos privados, los lugares más tradicionales, así como los que están de “moda”, tengan reservas ya señadas para dentro de un año.
“Parece gracioso pero tengo reservas para la segunda quincena y todos los fines de semana de diciembre, pero de 2013. Si bien es una fecha para recepciones y egresos, también hay casamientos y cumpleaños de 15”, dijo Gustavo, encargado de unos de los salones de fiesta ubicado en calle San Luis al 2.800. Y si bien ése es “un caso excepcional”, casi todos los viernes y sábados de marzo y abril de 2012 “ya están tomados”; octubre, noviembre y diciembre, también del año que viene “están todos reservado”; y por eso las consultas por fechas para noviembre de 2013 “no son una rareza”.
Algunas explicaciones
Los salones consultados por Diario UNO coincidieron en señalar que existen dos temporadas altas, que van de marzo a mayo y de octubre a diciembre, y los días que primero se ocupan son los sábados, aunque los viernes también son días muy solicitados por los descuentos que hacen los proveedores de servicios para fiestas, sobre todo para los cumpleaños de 15.
El porqué de tanta anticipación no tiene una única explicación. “Los novios y los padres de las chicas que buscan festejar sus 15 años empiezan los preparativos con mucha anticipación, porque cada vez salen más novedades en el mercado, por lo cual tienen que ocuparse de más cosas, y el primer paso siempre es el salón”, aseguró Alejandro, propietario de un salón ubicado por la avenida General Paz 7.800 donde ya tienen casi todo reservado para el año que viene, sólo quedan algunos fines de semana en el invierno, la temporada baja que ellos denominan. “Una vez que ya tienen reservado el salón y la iglesia, los novios se tranquilizan”, agregó.
En cuanto a la reserva del lugar elegido, la mayoría de los consultados coincidió en que piden un depósito del 20 por ciento y luego el interesado opta la forma de pago que quiere hacer, que puede ser en cuotas o la liquidación días antes de la fecha pactada. Los propietarios o encargados anticipan que el precio puede sufrir alguna variación, sobre todo teniendo en cuanta que son con un año de anticipación y hasta más, pero por lo general tratan de absorberlo para no modificar tanto el valor acordado en un primer momento.
“En un primer encuentro y cuando se toma la decisión, pedimos un depósito del 20 por ciento del valor para reservarlo y después acordamos la forma de pago de lo que queda. Tratamos de absorber nosotros el aumento que pueda surgir en ese año de contrato, salvo que sea muy excepcional. A la hora de hacer el contrato, ya tenemos en cuenta un 15 o 20 por ciento más que es lo que maneja la cámara inmobiliaria como aumento anual en el sector. Después si llega a ser mucho más la suba, se negocia con el cliente.”, contó Juan Carlos, otro propietario de una salón ubicado en el norte de la ciudad de Santa Fe.
La parroquia, también un tema
Otro problema es combinar la fecha de la ceremonia religiosa con la de la fiesta, aunque, generalmente, los novios priorizan el salón por sobre la parroquia. De todas maneras, según las consultas hechas por Diario UNO en algunas iglesias santafesinas, para 2012 quedan lugares disponibles ya que por general, las reservas se hacen unos seis meses antes. En el caso del Registro Civil, no se otorgan turnos antes de los 180 días de la fecha elegida.
De todas maneras, al igual que con los salones, las parroquias también ya tienen turnos reservados para 2012 y para octubre, noviembre y diciembre ya casi no quedan lugares. En una iglesia del sur de la ciudad y hasta en la propia Basílica de Guadalupe se dan hasta tres turnos para casamientos los sábados, ante la gran demanda para esos meses del año. “Pero los de marzo y abril de 2012 ya están todos tomados”, informó una de las encargadas de agendar los turnos, y añadió: “Antes reservaban con menos tiempo, pero ahora llaman hasta con un año de anticipación”.
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