Es el que se realizó el 3 de abril en la Unión Ferroviaria local. Aseguran que se realizó para satisfacer apetencias personales. Dirigentes gremiales santafesinos impulsan un proceso de normalización de la central obrera santafesina.
.El Litoral |
“Estamos sorprendidos y dolidos porque hicimos todos los esfuerzos para alcanzar la unidad y que no exista en Santa Fe, como nunca existió, un movimiento obrero dividido. Históricamente, supimos encontrar el punto en común que nos atravesara para coincidir en una propuesta para todos los trabajadores. Lo que estamos viviendo hoy es lamentable y no vamos a consentir con nuestro silencio lo que no es unidad. Queremos decirle a todos los santafesinos que no hay una CGT formalmente elegida en su conducción, que no respetaron los plazos, no hubo veedores, no hubo poderes de acreditación de representatividad y lo que es peor aún, no se votó. Y nosotros estamos acostumbrados a ejercer la democracia sindical”, disparó Susana Rueda (Atsa).
“Nuestro objetivo es sostener la unidad del movimiento obrero santafesino. El año pasado, un grupo de gremios nos propusimos reactivar la CGT Santa Fe que por distintos motivos hacía dos años estaba prácticamente cerrada. Hicimos una serie de reuniones donde planteamos la necesidad de volver a ponerla en marcha y decidimos hacer el congreso normalizador en diciembre del año pasado manteniendo siempre el principio de la unidad. Pero por el conflicto con el personalidad de la seguridad lo postergamos para principios de éste año. Volvimos a reunirnos en febrero y llegamos a un punto donde un grupo de gremios, contra lo que pensaba la mayoría, no entendió necesaria la unidad y realizó una supuesta normalización sin ninguna fiscalización ni constatación, ni poderes. En ese marco, decidimos no participar y lo que hicimos público mediante una solicitada”, recordó Jorge Molina (UPCN).
“Jugaron hasta con el hecho de que muchos dirigentes gremiales no estaban en Santa Fe para hacer la convocatoria sin la participación de todos. Lo venimos diciendo desde hace mucho tiempo: la CGT está totalmente cerrada. Hace dos años que no nos sentimos representados. Queremos hacer un cambio y ponerla al servicio de los trabajadores. No queremos dirigentes que se callen ante ningún sector político. Queremos gremios que participen y que digan las cosas que le preocupan a los trabajadores. Si hay dirigentes que tengan que dar un paso al costado que lo hagan, pero la gran mayoría están empezando a dialogar con nosotros. Queremos una sola CGT. No queremos seguir el ejemplo nacional”, enfatizó Osvaldo Agrafobo de UTA.
“Hemos dado un paso atrás. Por cuestiones personales algunos compañeros equivocan los caminos.
Aquí se trata de que cada una de las organizaciones sindicales trabaje para el conjunto del movimiento obrero y no para los intereses personales de nadie. Queremos que todos los sindicatos participen y por eso estamos dispuestos a trabajar para conseguir la unidad. Oportunamente, vamos a formalizar una institución que convoque a todo el movimiento obrero”, manifestó Julio Rizza, de Sivendia.
“Lamentablemente, en momentos tan difíciles para los trabajadores cuando la inseguridad castiga de la manera que lo hace a los trabajadores, porque son nuestros compañeros cuando van o vuelven de trabajar los que sufren los hechos más lamentables de inseguridad. También son nuestros compañeros los que se ven perjudicados porque no existe en nuestra provincia ningún programa de control de los precios cuidados y éstas son las cosas que queremos discutir con el gobierno provincial y municipal y con cada una de las municipalidades que correspondan. Queremos tener la fuerza necesaria para mostrar cuál es la situación de los trabajadores santafesinos”, finalizó Susana Rueda.
Diálogo abierto
Los dirigentes sindicales informaron que ya se habían abierto canales de diálogo con gremios que participaron del congreso de la Unión Ferroviaria. “Lo que no entra en esta mesa de unidad son las apetencias personales en pos del conjunto. Nosotros respetamos a todos y entendemos que si los gremios que están en esa pretendida CGT entienden el valor de la unidad y que esta actitud parcial no les sirve a nadie y menos a ellos, seguramente en el corto tiempo nos encontraremos todos juntos confluyendo en la unidad de la regional. Pero en una unidad genuina, no impuesta a los manotazos por la ambición de algunos dirigentes que están más apurados en los procesos electorales que en los problemas del trabajador”, explicó Jorge Molina.
“Cuando decimos que no se hizo formal ni legalmente nosotros vamos a seguir los caminos que correspondan para recuperar la institucionalidad. Todos los que estamos sentados acá pertenecemos a una entidad sindical legítimamente constituida y estamos elaborando todas las estrategias para encontrar el camino legal para realizar realmente un proceso electoral donde participen todas las entidades gremiales”, manifestó Susana Rueda.
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