Aseguran que las jóvenes eran obligadas a ejercer la prostitución y además privadas de su libertad. Tras el operativo realizado por gendarmería se asistió a las alternadoras y se detuvo al dueño del local.
La Capital |
Seis mujeres que al parecer eran explotadas sexualmente fueron rescatadas de un prostíbulo de Firmat en el marco de un operativo realizado a las 2 de ayer por personal de Gendarmería Nacional con asiento en Rosario y del destacamento Venado Tuerto. La medida, ordenada por la Justicia Federal, derivó en la clausura del local y la detención de su encargado cuya identidad no trascendió.
El burdel allanado funcionaba bajo la denominación de Bar Nocturno "La Quinta" en un predio ubicado a la vera de la ruta provincial Nº 93, a pocos metros de un cruce ferroviario situado en cercanías del acceso a Firmat viniendo desde Melincué.
La orden provino del titular del Juzgado Federal Nº 4 de Rosario, Marcelo Bailaque, a raíz de una investigación iniciada hace un par de meses por el presunto delito de trata de personas que recayó en el Centro de Reunión de Informaciones (Cri) de gendarmería nacional.
La medida fue cumplimentada con la presencia del fiscal federal subrogante, Juan Murray, además de la intervención de la Oficina de Rescate de Víctimas de Trata de Personas del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
El fiscal confirmó el operativo ayer a LaCapital aunque prefirió no brindar mayores detalles. "Estamos en plena etapa investigaba", sintetizó el funcionario judicial al ser consultado sobre el tema. No obstante ratificó el rescate de "algunas" mujeres, aunque sin precisar el número y la detención del sujeto a cargo del prostíbulo.
Fuentes de la investigación indicaron que las jóvenes no sólo eran obligadas a ejercer la prostitución sino que además estaban privadas de su libertad. El operativo incluyó un fuerte despliegue de gendarmería así como de vehículos tanto de la fuerza nacional como particulares al tiempo que también participaron profesionales para atender a las víctimas. Las mujeres fueron trasladadas a Rosario aunque ya habrían retornado a sus lugares de origen.
Inscripción. El prostíbulo en cuestión fue inscripto hace un tiempo en la Municipalidad como bar nocturno. Algunas versiones indican que los propietarios reabrieron el local hace poco luego de haberlo cerrado tras el sonado procedimiento realizado en septiembre de 2012, también por Gendarmería, en un prostíbulo de Melincué y otro de Arteaga que derivo en el rescate de 23 mujeres.
La titular de la Subsecretaría de Seguridad de la Municipalidad firmatense, Silvia Rocha, calificó como "positivo" el operativo al sostener que "en realidad es la única que puede investigar ilícitos de este tipo y llegar a fondo".
La funcionaria aseguró que el organismo a su cargo intentó en dos oportunidades constatar las actividades del ahora clausurado local "La Quinta", situado en las afueras del radio urbano, pero "los resultados fueron negativos porque estaba cerrado", razón por la que los inspectores no pudieron ingresar para realizar su trabajo.
Tras el megaoperativo realizado por Gendarmería el año pasado en el sur provincial y que apuntó a desactivar una supuesta red de trata de personas no surgieron resultados en tal sentido.
En relación al burdel de Arteaga, cuyo caso tuvo aún más repercusión que al establecido en Melincué porque gracias al allanamiento quedó al descubierto que estaba funcionando pese a una clausura del Juzgado de Faltas de Casilda que no respetó, nunca pudo acreditarse que las mujeres eran explotadas. Las trabajadoras sexuales negaron haber sido obligadas a ejercer la prostitución al asegurar que lo hacían "por propia voluntad".
Al menos así lo manifestaron ante la por entonces jueza de Instrucción en lo Penal de Casilda, Silvia Nogueras, que también trabajó lo sucedido en el prostíbulo de Arteaga por razones jurisdiccionales dentro del marco de la Justicia provincial.
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