Solá: "Boudou es una vergüenza nacional"

El diputado del peronismo disidente apuesta por una derrota del kirchnerismo en las legislativas y no se gaurda nada. Ya no cree en Cristina y afirma que la gestión de la Presidenta "arruinó" los cinco años de Néstor. Su opinión de Boudou 

Solá en la redacción de Infobae

Crédito foto: Nicolás Stulberg

No es el Felipe Solá del 2007, tampoco el ganador del 2009, ni el desorientado del 2011. El ex gobernador de la provincia de Buenos Aires da la impresión de ser un hombre que encontró las soluciones de un perdido enigma: sabe lo que quiere y ya tiene aceptado qué es lo que no quiere.

El diputado nacional ya lanzó su candidatura para renovar su banca y apuesta a que el final del kirchnerismo se sentencia en estas elecciones legislativas. Así lo siente y así lo demuestra. Mira a los ojos cuando responde. Señala, apunta a la cámara y dispara un título tras otro. Solá descoloca. Es un político en campaña, pero sabe que dice cosa que van en contra de los manuales. No le importa.  

Marca una rotunda diferencia entre la gestión de Néstor Kirchner y la de Cristina y sostiene que las denuncias de corrupción empañarán como se lo recordará al ex presidente. No oculta que ya nada la une a Francisco De Narváez, lo definió como un mero "inversor" y a Mauricio Macri, con quienes les ganó al kirchnerismo en 2009.“Rovira la puta que te parió”, dice y mira al cielo entre risas cuando Infobae le recuerda la incursión electoral del ex gobernador misionero que terminó con su ilusión de convocar a una consulta popular para ver si podía presentarse por otro mandato.

Solá lo espera a Sergio Massa, el intendente de Tigre, con quien ya cerró un acuerdo político y con quien sueña compartir un boleta electoral. El diputado sostiene que no sabe que hará el hombre del Delta. Se ríe. Unos segundos después define al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, como "marketing y aguante".

-¿Es una década ganada?

-Para ser absolutamente objetivo, cosa que no es recomendable para un político en campaña… ¿Ganada o perdida con respecto a qué? Felipe González decía que cuando le preguntaban  “¿Cómo está tu mujer?”, el respondía: “¿Comparada con quién?”. Si es comparada con la crisis del 2001, años terribles para la economía argentina, hubo un lustro, media década, claramente ganada. Pero la media década empeora muchísimo cuando se toman los segundos cinco años de la década. Desde el 2008 hasta ahora no son ganados. No se ha llegada a completar aquello que se buscaba en términos de redistribución del ingreso, se quedó el crecimiento, se quedó el empleo y hubo un avance muy claro, un atropello como forma de gobierno que coincide con el Gobierno de Cristina, que se suponía que iba a ser lo contrario. Todo se fue al tacho y el gusto que queda en la boca es de esos segundos cinco años.

-Cuando en 20 años sus nietos le preguntem sobre Néstor Kirchner… ¿Qué le va a decir?

-Dentro de 20 años vamos a tener una mirada distinta. Lo que yo creo es que en la Argentina hubo cuatro presidentes importantes: Yrigoyen; Perón; Alfonsín, por lo que significa; Menem, también por lo que significó, fue muy fuerte y Kirchner. Por ahí soy injusto con alguno que quedó en el camino. Kirchner fue mucho más importante que Cristina. ¿Qué es la importancia? Cambiar el tiempo en el que se vive y Néstor cambió el tiempo en el que vivíamos, cambió el paradigma de la Argentina. Convenció a los argentinos que se podía manejar la economía desde la Argentina. Yo no olvido esas cosas y después la idea de llevar la cuestión de la Justicia con respecto a la memoria fue una idea excelente, pero mal implementada.

-¿Cree que estas denuncias de corrupción cambiarán la visión que se tiene del ex presidente?

-Estas cuestiones van a empeñar su memoria. Van a empeñar la figura de Kirchner, lo cual no quiere decir que lo que haya hecho no ha sido importante, pero si su figura quedará en duda. La corrupción es corrupción siempre y la gente lo siente así.

-Cuando estuvo bien cerca del poder kirchnerista… ¿No veía irregularidades? ¿No le preguntan eso?

-No lo veía. ¿Oí? Sí, pero no lo veía. En cambio si veía que la Argentina crecía, crecía el empleo y la inflación no era un problema. Frente a esa salida fenomenal de la crisis horrible, aprecias enormemente ese crecimiento. Lo que oía me sorprendía a veces, a veces mucho porque se hablaba de cifras enormes, pero no me constaba, no quería creer y a mi entusiasmaba que la Argentina crecía.

-¿Y ahora no piensa que quizás eso que le decían era cierto?

-Sí. Además los tiempos han cambiado.

-¿Qué anécdotas le quedaron de Néstor Kirchner?

-A mi me llamaba poco y algunas veces me llamó muy enojado y le di a entender que así no era la forma. No lo aceptó. Me dejó de llamar. Un día me dijo, en un avión, íbamos a Juárez: “El poder es tener cash y manejar las expectativas”. Cuando me dijo cash entendí claramente que hablaba de la caja pública. Estar líquido en materia de tesorería y manejar las expectativas. Alfonsín nunca tuvo cash, nunca respiró tranquilo, pero si manejó las expectativas.

-Vamos a las legislativas… ¿Va a ver sorpresas con los candidatos en la provincia?

-Sí. Creo que va haber una sorpresa. Que no están todos los que son y que puede cambiar el panorama de la provincia de manera muy importante. No lo sé, sí lo creo. Es muy importante, porque en estas elecciones se puede decir que se debate la re re de CFK pero yo creo que eso está terminado. Lo que se debate es cuál es el tono que va a tener la oposición de cara al 2015. Un tono venezolano, de país dividido en dos, o un tono que diga “ya aprendimos lo bueno y lo malo”. Se puede tener un gobierno que sea lo más peronista posible, pensando que el crecimiento sin distribución de la riqueza no sirve y se puede seguir gobernando la Argentina sin alterar la constitución y manteniendo la República. La gente es más madura que el Gobierno de Cristina.

-¿Qué injerencia tendrá al elección de 2013 en la provincia de Buenos Aires con las presidenciales del 2015?

-Es la batalla central. Yo no creo que aparezca un gobernador con chances. La batalla se define en la provincia de Buenos Aires.

- Y el mito ese que dice que un gobernador bonaerense no puede llegar a la presidencia…

-Se deja de hablar de un mito cuando se termina y lo que es básico es que el gobierno domina a las provincias chicas con plata, pero la batalla central la da en la provincia de Buenos Aires y ahí es donde va a perder.

-Usted cice que el Gobierno Nacional va a perder... ¿Contra quién ?

-Esperemos. Será una sorpresa. Esperemos unos días.

-Desde un sector del kirchnerismo salieron a hablar de Amado Boudou como presidenciable ¿Lo cree posible?

-Boudou es una vergüenza. Es uno de los más graves errores de Cristina y es una vergüenza que sea Vicepresidente de la República un irresponsable que sea capaz de meterse en aventuras con esa banda. Tiene coronita, cuando lo van a juzgar hace volar a Righi, al fiscal y hace renunciar al juez Rafecas. Boudou es una mancha negra en el Gobierno de Cristina y los kirchneristas mantienen la cabeza gacha cuando uno habla de él.

-Hay un sector de la oposición que dice que no se puede hacer campaña pegándole al oficialismo… ¿Ese contexto cambió?

-Absolutamente. Si alguien piensa que puede ganar las elecciones siendo manso con la corrupción está totalmente loco. Una cosa es hacer política denunciando todo el día, otra cosa es cuando llega el momento no ser absolutamente duro. Si la cabeza del Gobierno no es así, no hay ninguna posibilidad que sea un gobierno honesto.  En Argentina hay un grupo de personas que piensa que antes que este Gobierno es mejor cualquier cosa, así pensaban muchos argentinos en el 76 y murieron 30 mil argentinos y además se entregó la economía. Ojo con lo que se piensa en ese sentido. No promover la división de los argentinos no es ser blando, es ser responsable y es estar mirando el 2015, no el logro del 2013 o a quién entusiasmo en un acto o en un conferencia… ¿Al más loquito que grita más fuerte? Yo voy a buscar a la gente que ama este país.

-Usted afirmó que en 2009 no se le ganó al kirchnerismo por dos puntos…

-En mi opinión se ganó por seis puntos pero no se fue al escrutinio definitivo de forma seria por decisión de Francisco De Narváez. Yo creo que si hubiésemos ganados por 2 y medio difícilmente nos hubiesen dado la elección.

-¿Cree que puede aparecer el fraude como ya advierte un sector de la oposición?

-Más vale prevenir que curar. Ojo con prevenir tanto, que la gente no tenga mido. Vamos a la cancha. Hay un límite para la acusación previa

-¿Felipe Solá se cansó de la rosca política? Lanzó su candidatura y se alejó de ese sector del peronismo que se reúne todas las semanas.

-Hay un poco de eso. Ese juego de fotos no me parece política. Es una forma que está haciendo exaltada. Se juntan seis o siete dirigentes del peronismo, alguno de ellos con muchos meritos, y hay uno solo que va a ser candidato. ¿Para qué tanta foto? Vamos a la provincia sin tanta foto.

-¿Solá y De Narváez comparten el mismo electorado?

-No. Hoy no se discute quién es más peronista o menos peronista, pero la verdad es que yo lo soy y el peronismo recibe a quienes quieren ser peronistas y así fue recibido De Narváez, pero él esta polarizando y buscando un voto anti k extremo y las posiciones que su sector tiene en la Cámara de Diputados son claramente liberales.

-¿Definio su lista?

Estamos en eso, estamos negociando.

-¿Y cómo vienen esas negociaciones?

-No me quejo. Vamos bien. ¿Te acordás como ganaba Leguizamo? (NdR: Irineo Leguizamo, famoso jockey considerado el más grande de la historia del turf sudamericano) De atropellada al final. Yo vengo  peleando con el montónm pero por ahí viene el tapado por afuera. Por adentro no hay garantías.

-¿Ya apostó a un caballo para 2015?

-Sí, pero no lo comentaría porque tengo intenciones de asociarme. No quiero que el precio suba.