Este viernes, con un presupuesto cercano a los 13 millones de pesos, la Municipalidad licitará el servicio de captura y explotación de este combustible, generado por los rellenos sanitarios locales
En 1997, muchos países se comprometieron a lograr la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para este año (2012), a través del Protocolo de Kyoto. Hoy, la capital provincial tiene esa meta y la chance de hacerla realidad.
El próximo viernes 29 de junio, a las 11, tendrá lugar la apertura de sobres en el marco de la licitación para la concesión del servicio de captura y explotación del biogás generado por los rellenos sanitarios de la ciudad de Santa Fe. El presupuesto oficial alcanza los 12.865.000 pesos.
El plazo total de la prestación de los servicios licitados será de 20 años contados a partir de la firma del contrato y se dará de manera simultánea en dos depósitos, uno clausurado y otro en actividad, donde presta servicios el operador del relleno sanitario.
En la primera etapa y por un período máximo de seis años se operará en el Relleno Sanitario Altos de Nogueras. En el nuevo Complejo Ambiental se podrá comenzar a desgasificar a partir del cierre de la primera celda y cuando estén dadas las condiciones en cuanto a cantidad y calidad del biogás generado y su posibilidad de extracción.
Además de la prestación de los servicios de captación, tratamiento y eventual aprovechamiento de biogás, la empresa adjudicataria será la responsable de prestar otros servicios complementarios relativos a la custodia y mantenimiento de los predios de la concesión.
El pliego de bases y condiciones para la licitación, se puede consultar en la Secretaría del Ambiente de la Municipalidad –Secretaría de Desarrollo Social, Salta 2.951, 9º piso –, la cual será también la autoridad de aplicación, o la que la reemplace en el futuro.
Mejor vida y más ingresos
De acuerdo a expertos locales en la temática, en Santa Fe el potencial de generación de orgánicos es de aproximadamente 100 a 125 toneladas por día (t/día). Roberto Celano, subsecretario de Ambiente municipal (quien participó días atrás de Río+20, en la Tercera Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo), explicó que “el biogás se podrá transformar en certificados de reducción de emisiones”.
“La ciudad se verá beneficiada porque contamina menos ya que disminuye la emisión de gases de los dos rellenos sanitarios y a su vez puede recibir un aporte económico por parte de la venta de los bonos”, expresó.
¿A qué se refiere el funcionario? A los bonos de carbono (también llamados Créditos de Carbono). Es un mecanismo internacional de descontaminación para reducir las emisiones contaminantes al medio ambiente; es uno de los tres mecanismos propuestos en el Protocolo de Kyoto para la reducción de emisiones causantes del calentamiento global o efecto invernadero.
La transacción de los bonos de carbono –un bono de carbono representa el derecho a emitir una tonelada de dióxido de carbono– permite mitigar la generación de gases invernadero, beneficiando a las empresas que no emiten o disminuyen la emisión y haciendo pagar a las que emiten más de lo permitido.
Las reducciones de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) se miden en toneladas de dióxido de carbono (CO2) equivalente, y se traducen en Certificados de Emisiones Reducidas (CER). Un CER equivale a una tonelada de CO2 que se deja de emitir a la atmósfera, y puede ser vendido en el mercado de carbono a otros países industrializados.
Los tipos de proyecto que pueden aplicar a una certificación son, por ejemplo, generación de energía renovable, mejoramiento de eficiencia energética de procesos, reforestación, limpieza de lagos y ríos, entre otros.
Los pliegos
El subsecretario de Ambiente explicó las características de los pliegos: “Esperamos que las empresas que se presenten puedan a corto plazo captar y quemar los gases de efecto invernadero y transformarlos en bonos de carbono”.
Luego de detallar las cifras y el panorama que se prevé para los próximos años a nivel mundial en términos de generación de basura y aumento del calentamiento global, el funcionario señaló que “todas las ciudades del mundo van a tener que trabajar en disminuir los efectos del cambio climático”.
En ese marco, destacó el camino emprendido en la ciudad de Santa Fe. “Uno de los ejes principales que hemos tomado es la habilitación de un nuevo relleno sanitario con una planta de clasificación de última generación que va a reducir notablemente la disposición de los residuos en este lugar. De esta manera, disminuimos las emisiones en la fabricación de productos nuevos”, explicó.
En cuanto a los números, indicó que en el antiguo relleno sanitario –clausurado en noviembre de 2010– se dispusieron unas 1.130.000 toneladas de basura; mientras que en el nuevo –que comenzó a funcionar el mismo mes– se depositarán 1.500.000 toneladas.
“En el relleno viejo se emitieron 57 millones de metros cúbicos de gas metano; lo que pretendemos es que esto no siga sucediendo y que este gas se pueda captar y quemar y de esta forma contribuir al cuidado del medio ambiente”, dijo y agregó: “Lo que pretendemos con este tipo de acciones es disminuir la elevación de gases de efecto invernadero a la atmósfera
No hay comentarios:
Publicar un comentario