“Es probable que se nacionalice el conflicto”, respondió Pedro Apaolaza a la pregunta de si volverían las manifestaciones o eventuales bloqueos comerciales, aunque mostró la predisposición de “no querer llegar a eso”.
“Estamos trabajando con los técnicos realmente para ver que podemos proponer, y cuáles son las variables que podrían llevar a aprobar este proyecto pero que sea, instisto con esto, razonable y pagable”, dijo el dirigente de la CRA.
Desde los sectores agrarios, la clave de la oposición al proyecto está en el concepto del revalúo fiscal de los campos y los plazos de aplicación, considerando como tiempo razonable para su ejecución unos 5 años.
En referencia al concepto del revalúo, Apaolaza sostiene que el mismo debe realizarse no en tanto a la extensión de la propiedad sino sobre la capacidad productiva de las tierras: “Para nosotros las tierras no es un bien de especulación, no es algo que se compra hoy y se vende mañana, es un bien productivo y no un bien de cambio”, dijo el referente agrario.
De esta forma, “los campos mas grandes son los menos afectados, y (la reforma) va a sacar de sistema a los campos pequeños”, subrayó.
Por su parte, en declaracioens a Radio Mitre, Eduardo Buzzi, titular de la Federación Agraria Argentina, denunció que el revalúo es “el último manotazo que nos falta para que nos saquen de la cancha a los productores” y llamó a “buscar consensos”.
La última actualización en los valores de las parcelas fue en el 2006, durante la gobernación de Felipe Solá.
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