La Municipalidad de Santo Tomé avanza con la instalación de 350 medidores domiciliarios de agua corriente en el sector céntrico de la ciudad. La obra no tiene costo para los vecinos y está destinada a alentar el consumo responsable del agua, disminuyendo el derroche y generando una forma justa y eficiente de abonar el servicio.
Con una inversión cercana a los $75.000, los trabajos son realizados por la firma Vidal Rivero y abarcan 13 manzanas, las que se encuentran ubicadas en dos zonas de la Vecinal 7 de Marzo. Una de ellas, ya completada al día de la fecha, está limitada por las calles General López, Iriondo, Avenida del Trabajo y Avenida Luján; la otra, próxima a ser ejecutada, por Mitre, Hernandarias, Libertad y Avenida del Trabajo.
A propósito de esta iniciativa, el secretario de Obras y Servicios Públicos, Arq. Ricardo Méndez, sostuvo que “desde el gobierno municipal entendemos que el sistema de medidores de agua es el método más justo para abonar el servicio, ya que cada usuario paga por lo que efectivamente consume”.
Con relación al progreso de las tareas, el funcionario mencionó que “la obra global prevé la colocación de 350 medidores, de los cuales ya hay 225 puestos en funcionamiento. De esta forma, el plazo de finalización se estima para mediados de septiembre”.
Méndez explicó que “del total de domicilios servidos con agua corriente en la ciudad, un 60% cuenta con medidor. Por ello, con obras como la que estamos realizando, procuramos incorporar nuevos sectores a este sistema”.
“No hay que olvidar que en Santo Tomé el servicio de agua corriente está a cargo del Municipio, el que realiza un gran esfuerzo para mantener todo el sistema de captación y distribución, que es sumamente costoso”, finalizó.
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