Un ambicioso operativo de control de motos preventivo en la zona norte de la ciudad terminó anoche con 80 motos secuestradas, de las cuales la mitad carecía de los elementos de seguridad necesarios para circular. Del procedimiento participaron cincuenta agentes municipales de Tránsito asistidos por efectivos de la policía santafesina, que montaron controles en puntos cercanos al parque Alem.
“Es necesario que la gente asuma más su responsabilidad ciudadana y use los elementos de seguridad porque de cada diez accidentes que se producen en la ciudad, en seis participan motos”, dijo a modo de balance Luis Baita, titular de la Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de Rosario. El operativo estuvo a cargo de cincuenta agentes de la Dirección General de Tránsito con la participación de efectivos de la Unidad Regional II. Como resultado de la intervención se remitieron al corralón municipal 80 motos por distintas irregularidades: los conductores no usaban el casco, no tenían la documentación al día o llevaban caños de escape antirreglamentarios. En diez casos se trató de ciclomotores de baja cilindrada que llevaban acompañantes, con el agravante de que se trataba de niños. Estadísticas. “Necesitamos que la gente colabore y adopte actitudes legales, responsables y seguras. Usar el casco reduce en un 83 por ciento la posibilidad de tener heridas fatales y ese es un dato estadístico bien claro”, advirtió Baita. Según el funcionario, el resultado de la medida fue “muy importante” y concluyó con un número de secuestros similar al obtenido en procedimientos anteriores, en los cuales se desactivaron picadas clandestinas. La finalidad del operativo fue preventiva (no se trató de una intervención por carreras clandestinas) y afectó a motociclistas que pasaban por el lugar. Los agentes cercaron las distintas salidas del parque para evitar intentos de fuga que pudieran provocar accidentes. O que pusieran en riesgo a los vecinos que disfrutaban del domingo aire libre. El control se extendió varias horas y transcurrió sin incidentes. Se sumó a los realizados el fin de semana en materia de control de alcoholemia y multas por estacionar en sitios no permitidos, en los que también se remitieron vehículos al corralón. Para regularizar su situación, los titulares de las motos secuestradas deberán asistir a talleres de sensibilización que dicta el Municipio —a partir de una ordenanza del año 2006— y acudir al Tribunal de Faltas. Antes de retirar su unidad del corralón deberán contar con los elementos de seguridad correspondientes y regularizar los escapes si el rodado posee uno antirreglamentario. Historial. El procedimiento de ayer tiene como precedente más cercano el operativo realizado el 12 de agosto pasado en La Florida y en el circuito para aprender a manejar conocido como La Zapatilla, en el parque Alem. Entonces los agentes de Tránsito bloquearon nueve sectores del parque para evitar que los vehículos participantes de las carreras irregulares pudieran escaparse. En esa ocasión se incautaron casi 80 rodados: 24 autos y 54 motos. Con participación de la fiscal Marcela Canavesio, de la oficina de causas con imputados no individualizados, cinco conductores fueron detenidas. Todos involucrados en carreras ilegales. Una semana antes, vecinos del parque Alem habían registrado fotográficamente cómo se corrían picadas de motos en el circuito para aprender a manejar. Más de 40 motos surcaban esa traza a alta velocidad frente a unas 200 personas que estaban en el lugar, familias y jóvenes. Tras desactivar picadas la semana siguiente, las autoridades no descartaron realizar un vallado o un ingreso único al predio.
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