Silvia Pozzo se cansó de reclamar y no tener respuesta. Esta mañana partió hacia el Congreso de la Nación. Viaja acompañada por un ciclista profesional.
Cansada de reclamar contra el maltrato animal y no obtener respuesta, Silvia Pozzo optó por una forma original de protesta: viajar al Congreso de la Nación en bicicleta. “Hicimos todo lo necesario: elevamos notas, nos reunimos con funcionarios, pero nadie nos resolvió nada. Entonces se me ocurrió hacer algo diferente. Me voy a Buenos Aires en bicicleta para pedir la reforma de la ley 14.346 frente al Congreso de la Nación”, relató la mujer.
Esta ley penal, sancionada en 1954, condena el maltrato y la crueldad con los animales con prisión de 15 días a un año. “Son penas excarcelables y las multas todavía están en australes. Es irrisorio que tengamos una ley así”, planteó esta proteccionista independiente.
Pozzo denunció el maltrato que sufren los equinos en nuestra ciudad. “Una cosa es cirujear y otra es maltratar al animal, lastimarlo, tenerlo enfermo, no darle agua, torturarlo y sobrecargarlo. En la calle, se ven carros con más de diez personas arriba. Estamos cansados de que los caballos se mueran tirando del carro y que las yeguas tengan que parir con la carga a cuestas”, insistió.
El punto de partida fue la Legislatura, donde esta mañana amigos y familiares se acercaron para despedirlos. Silvia viajará acompañada por un ciclista profesional. Ella es profesora de educación física y hace fisicoculturismo, por lo que considera que no tendrá problema de resistencia.
El objetivo es llegar a Rosario esta tarde, donde se reunirán con proteccionistas. “Vamos a parar cada 50 kilómetros para descansar, hidratarnos e ir al baño. Tomamos todas las precauciones del caso, nos protegemos del sol y vamos a pedalear mientras haya luz”, detalló la mujer antes de partir.
El viaje continuará durante el fin de semana: irán parando en distintas localidades para descansar. El lunes esperan llegar a Buenos Aires, donde harán oír su voz por los animales frente al Congreso de la Nación.
Esta ley penal, sancionada en 1954, condena el maltrato y la crueldad con los animales con prisión de 15 días a un año. “Son penas excarcelables y las multas todavía están en australes. Es irrisorio que tengamos una ley así”, planteó esta proteccionista independiente.
Pozzo denunció el maltrato que sufren los equinos en nuestra ciudad. “Una cosa es cirujear y otra es maltratar al animal, lastimarlo, tenerlo enfermo, no darle agua, torturarlo y sobrecargarlo. En la calle, se ven carros con más de diez personas arriba. Estamos cansados de que los caballos se mueran tirando del carro y que las yeguas tengan que parir con la carga a cuestas”, insistió.
El punto de partida fue la Legislatura, donde esta mañana amigos y familiares se acercaron para despedirlos. Silvia viajará acompañada por un ciclista profesional. Ella es profesora de educación física y hace fisicoculturismo, por lo que considera que no tendrá problema de resistencia.
El objetivo es llegar a Rosario esta tarde, donde se reunirán con proteccionistas. “Vamos a parar cada 50 kilómetros para descansar, hidratarnos e ir al baño. Tomamos todas las precauciones del caso, nos protegemos del sol y vamos a pedalear mientras haya luz”, detalló la mujer antes de partir.
El viaje continuará durante el fin de semana: irán parando en distintas localidades para descansar. El lunes esperan llegar a Buenos Aires, donde harán oír su voz por los animales frente al Congreso de la Nación.
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