El santotomesino Argentino Foremny, junto a un grupo de ex
combatientes, regresó a las Islas Malvinas a 30 años de la guerra. Se
entrevistó con el gobernador del archipiélago y visitó el cementerio de
Darwin, donde rindió homenaje a los caídos en combate. “La ciudad creció
entre tres o cuatro veces y está irreconocible”, destacó.
Adolfo Schweighofer y Argentino Foremny en el cementerio de Darwin.
“Llegamos a territorio argentino el sábado pasado, con una profunda emoción al ser recibidos por un grupo de ex combatientes y la banda del ejército. Tenemos la enorme satisfacción de ser los primeros veteranos no solo santafesinos, sino de la provincia, que estuvimos en territorio malvinense después de la guerra”, remarcó Foremny al iniciar el diálogo.
La experiencia y la estadía
En primer lugar, el ex combatiente destacó el paso por el cementerio de Darwin y en ese sentido apuntó: “pudimos rendir homenaje a nuestros caídos, en territorio argentino, como yo digo. En el cementerio de Darwin cometimos la travesura de desplegar nuestra bandera y cantar el himno. Fue algo que nos salió de adentro y por suerte nadie nos vio para denunciarnos, porque eso implica la deportación. Al haber un vuelo por semana, nos hubiera deparado estar una semana detenidos”.
El encuentro con el gobernador
Durante la visita al archipiélago, Foremny y el también santafesino Adolfo Schweighofer se entrevistaron de forma exclusiva con el gobernador Nigel Haywood, representante de la corona inglesa en funciones de defensa y relaciones exteriores. “Filmamos una entrevista de 45 minutos, donde se habló de diversos temas y el único límite era hablar del tema soberanía. Hablamos sin ningún tipo de tapujos”, puntualizó el santotomesino.
“Adolfo Schweighofer realizó estas gestiones por inquietud periodística, no la esperábamos pero se dio. Nunca había recibido a periodistas de gran calibre de nuestro país y tampoco a veteranos. Tuvimos la suerte de ser los primeros”, añadió.
Al brindar detalles sobre el encuentro, Foremny señaló que una pregunta suya se refirió a los aspectos en los que se podía negociar entre los países: “él me dijo que sería importante negociar con nuestro país un mejor control sobre el área de pesca porque según los estudios que están haciendo ellos, Argentina no ejerce control sobre las especies de calamares y los perjudica a ellos”.
“Otra cuestión a negociar sería que ellos consideran que sería factible que nuestro país liberara su espacio aéreo a empresas de países limítrofes para que puedan dirigirse libremente a Malvinas. Son necesidades que tienen ellos, pero no hacen apreciaciones relacionadas a la soberanía, tal es así que rechazó la propuesta de la presidenta en contar con tres vuelos semanales a las islas”, esbozó.
El día a día
Sin dudas que una de las cuestiones principales del viaje era ver como iban a ser recibidos por los habitantes de las islas, cuestión que también fue mencionada por el ex veterano de nuestra ciudad: “la relación con los habitantes fue fría, ellos no nos quieren por lo ocurrido desde el año 1982 a la fecha, no tienen ni la más mínima confianza en nuestro gobierno por más que sea democrático. Eso lo resaltan a cada momento, pero sin embargo no fue una relación hostil, de provocación o de sentirnos inseguros”.
“Nos trataron como si fuéramos turistas de cualquier lugar del mundo, pero con sus reservas. Debemos tener en cuenta que el mayor contacto nosotros lo teníamos con trabajadores de origen chileno. Yo digo que los malvinenses pasaron de ser campesinos a estancieros y se sienten con tal”, remarcó.
Para Foremny, “el progreso económico, las regalías pesqueras de alrededor de 600 millones de dólares anuales para mejorar la calidad de vida de 3000 habitantes los puso en esa posición. Hay camionetas de alta gama por doquier y cuando Argentina ocupó las islas en el 82 había apenas entre 30 y 40. La ciudad en sí creció tres o cuatro veces y está irreconocible”.
La mirada sobre Malvinas
Por último, reflexionó acerca del futuro en materia de negociaciones entre Argentina y el Reino Unido por la soberanía: “considero que estamos en una situación muy difícil, por el progreso de los isleños, por su postura, que si bien fue más o menos parecida siempre, ahora están en un progreso económico muy grande y no tienen necesidades. Es tanto el progreso económico que tienen, que cada vez va a ser más difícil la negociación”.
“Pero no hay que ceder, aunque sea más difícil hay que continuar con las negociaciones”, finalizó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario