"Genera un efecto de encierro negativo". Esta es una de las conclusiones del informe de la Comisión Coordinadora del Trabajo en el Hogar del Huérfano, compuesta por representantes de instancias públicas y privadas que tienen profunda relación con la niñez. Ahora trabajan para que los chicos sean sujetos de derecho.
"La lógica de la institución, más allá de la intención de las personas que la conducen y trabajan en ella, de manera inevitable, opera como 'institución total' y produce en la mayoría de los chicos un efecto de encierro y privación de la libertad con el consecuente rechazo que semejante vivencia genera". El concepto, a modo de diagnóstico y descripción, fue formulado en abril pasado -es decir bastante tiempo antes de que desde el Ministerio de Desarrollo Social, Subsecretaría, y Dirección de Promoción y Protección de los Derechos de Niños, Niñas, Adolescentes y Familias, se resolviera la intervención del Hogar del Huérfano-, por la Comisión Coordinadora del Trabajo en el HH, compuesta por representantes de instancias públicas y privadas que tienen profunda relación con la niñez y encaminan la tarea con el paradigma que ubica a los chicos como sujetos de derecho, tanto en el ámbito nacional como en el provincial. El informe también habla de "la imposilidad" de la estructura del Hogar de sostener dispositivos adecuados y diversos que propicien el tratamiento discursivo de los hechos traumáticos". La palabra no es un bien que allí circule con frecuencia y naturalidad y "el modo predominante del lazo entre los chicos es hostil y agresivo". Las relaciones asimétricas de poder vulneran los derechos de las personas que allí trabajan y están alojadas. Entre las conclusiones del informe está la que plantea que la lógica con la que opera la institución HH se corresponde con una 'institución total', que opera en los chicos de distintas edades allí alojados "un efecto de encierro y privación de la libertad con el consecuente rechazo que semejante vivencia genera". A partir de aquí un punto señala que "esta lógica produce una reivindicación idealizada 'del afuera y la familia', lo que dificulta la subjetivación del o de los acontecimientos que causaron la toma de la decisión", en referencia a la llegada de los niños al HH. También es útil decir que casi ninguno de los niños que llega a la institución es huérfano -ahora por derivación de la Dirección Provincial, antes por los juzgados de Menores. Estigmas y segregación El informe de la Comisión Ad Hoc afirma que el modo predominante del lazo entre los niños "es hostil y agresivo, proyectándose unos y otros los estigmas por lo que se suponen recíprocamente segregados; se trata de proyectar 'lo peor' en el otro, o 'ser el peor' como respuesta subjetiva al 'no ser nadie'. Se van transmitiendo sus historias desde las realidades dolorosas y fragmentadas que los habitan, por lo que las marcas comunes operan especularmente produciendo rechazo o fascinación, lo que dificulta la puesta en marcha de procesos identificatorios que promueven lazos de cooperación y solidaridad". La vulneración de los derechos que hace que los chicos lleguen al HH hace imprescindible el trabajo con hechos traumáticos. Pero la Comisión de Trabajo en el HH habla de "la imposibilidad estructural de sostener dispositivos adecuados y diversos, que propicien el tratamiento discursivo de los hechos traumáticos que promueven que los niños pasen de 'actin en actin', con las impulsiones que los desbordan, y presentan la mayoría de ellos las mismas manifestaciones fenoménicas que devienen, en algunas oportunidades, en pedido de consultas psiquiátricas o solicitud de medicación". La Comisión Ad Hoc se refiere al equipo profesional del Hogar del Huérfano y dice que "el esfuerzo y compromiso" del mismo "encuentra un tope, consecuencia de la lógica de la institución misma, por lo que requiere de un permanente apuntalamiento y revisión de su función para no perder la orientación de sus prácticas". Con respecto al personal de la institución las conclusiones daban cuenta de la necesidad de una "adecuada selección y capacitación", en atención a que es todo "ese personal el que está en relación directa con los niños y a cargo de su cuidado. La lógica de las instituciones totales se sostiene en dinámicas renegatorias y perversas, condicionando inevitablemente el perfil y las prácticas de quienes allí trabajan generando relaciones asimétricas de poder que vulneran los derechos" de las personas que allí trabajan y están alojadas. Y si bien las posibilidades de alojamiento para niños y adolescentes "es uno de los recursos de la estrategia de protección y restitución de derechos, para aquellas situaciones vitales en las que se requiere de una medida excepcional", se plantea que esa medida debe acotarse y realizar un trabajo que posibilite al chico generar su reinserción familiar y social. Pero el hogar, esto dicho por las profesionales que han hecho las denuncias, nunca permitió preparar para el afuera.
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