Podrán filmar y captar el audio desde pantallas táctiles interactivas que también ofrecerán otros servicios a los pasajeros.
La Capital |
El proyecto para instalar pantallas táctiles y dispositivos que permiten tomar fotografías y grabar conversaciones a bordo de los taxis volvió a tomar impulso en el Concejo Municipal. Los titulares de dos empresas que desarrollan esta tecnología expusieron en la comisión de Servicios Públicos las características del sistema que se proyecta poner en marcha, a modo de prueba, en 50 coches de alquiler. La iniciativa cuenta con el aval de un grupo de dueños de taxi, siempre y cuando se financie mediante publicidad y no demande inversión.
Una empresa de soluciones informáticas y rastreo satelital, Air Track, y una agencia de publicidad, Smiling Work, delinearon el sistema que se propone implementar para el servicio de taxis. Se trata de un dispositivo audiovisual que ofrecerá información turística, entretenimiento y avisos comerciales; al tiempo que permitirá también registrar con imágenes y audio todo lo que suceda dentro de la unidad.
Referentes de ambas firmas presentaron el lunes pasado el funcionamiento del sistema en la reunión de Servicios Públicos del Concejo Municipal. Allí está en estudio una iniciativa presentada en octubre pasado por la Cámara de Radiotaxis para solicitar al municipio la realización de una prueba piloto que permita testear el funcionamiento del sistema.
Según explicó el presidente de la comisión, Carlos Comi, la idea es que se autorice ensayar el sistema durante un tiempo acotado; para que después el municipio pueda licitar el servicio.
"La actual ordenanza sobre sistemas de seguridad para taxis prevé la incorporación de cámaras en las unidades. Sin embargo, no se ha podido avanzar con esto por un tema de costos que ni los titulares de los taxis ni el municipio pueden afrontar. Con esta propuesta, el sistema se financiaría mediante la venta de publicidad", sostuvo.
¿Cómo funcionan? En las ciudades de Buenos Aires y Córdoba ya se realizaron algunas experiencias con estos sistemas, aunque se los utilizó sólo como medio publicitario y de entretenimiento (ver aparte). La pantalla, color y de un tamaño similar a la de una netbook, se instalan en la parte posterior del apoya cabezas, en el asiento del acompañante.
El dispositivo sólo resulta visible para quien viaja en la parte trasera del coche y se activa ni bien ingresa al taxi, mediante sensores ubicados en el asiento.
De acuerdo a la descripción que recibieron los concejales, las pantallas consignarán datos del chofer y mostrarán las calles por las que está circulando el vehículo hacia el destino final. Además, los pasajeros podrán acceder a información sobre lugares de interés turísticos, noticias y juegos. Y contarán, en forma obligatoria, con una cámara frontal y un micrófono ambiental que permiten la grabación del pasajero, cuando el taxista considere que puede ser víctima de situaciones de robo o agresión. Para estos fines, al sistema se puede anexar un botón de pánico que podría conectarse a internet.
Si la prueba piloto resulta satisfactoria, al sistema se podría sumar también la posibilidad de abonar el viaje en forma electrónica mediante la tarjeta sin contacto que se utiliza para pagar el colectivo o tarjeta de crédito.
Gratuito. Las pantallas táctiles a bordo de los taxis prometen un beneficio adicional: como se financiarán mediante la incorporación de publicidad, no significarán ningún costo para los taxistas.
Se trata de una cuestión no menor para el sector, que suele esgrimir este argumento cada vez que se analizan medidas de protección. "Contar con cámaras en los vehículos puede ser una herramienta útil para prevenir robos o hechos violentos. Por eso sería interesante", sostuvo Marcelo Díaz, referente de la agrupación Taxistas Unidos, que nuclea a titulares de los coches.
No obstante, aclaró que avalarán la medida "siempre y cuando no demande ni un peso más; ya que el sistema está, de por sí, desfinanciado".
Por ahora, la iniciativa suma consensos.
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