“Una vez más se niega la realidad”, se quejó Plaini, al salir al cruce de las declaraciones del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, que esta mañana calificó la huelga convocada por las CGT de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo como un “gran piquete nacional con paro de transporte”.
Por su parte, Juan Carlos Schmid (Dragados y Balizamiento) insistió en que desvincular el acatamiento del paro de los piquetes que sectores de izquierda realizan en varios puntos del país.
Los líderes gremiales destacaron que el acatamiento al paro fue “muy fuerte en todo el país”, porque “hay millones de trabajadores que han adherido” y se desligaron nuevamente de los piquetes que partidos de izquierdas realizan en todo el país.
Al hacer a las 11.30 un primer balance del resultado de la huelga, Juan Carlos Schmid, secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento adherido a la central de Hugo Moyano, sostuvo que “los piquetes y cortes corren por cuenta de sectores que no están contenidos ni representados por los gremios convocantes” de las huelgas.
En conferencia de prensa en la sede de Azopardo 802, Schmid defendió la paralización del transporte público, porque “estos trabajadores tienen el mismo derecho a protestar como el resto”, en tanto que Carlos Acuña (CGT Azul y Blanca) remarcó que “el pueblo trabajador se expresó” hoy frente a la postura de “algunos funcionarios que se lo toman como chicana”.
Desde el sector del gobierno, el titular de la CTA oficialista, Hugo Yasky, cuestionó la huelga al considerar que “es raro hacerle un paro a un gobierno” que “recuperó” la “vigencia plena de las paritarias libres”.
“Es raro hacerle un paro a un gobierno que recuperó para el movimiento sindical, entre otras conquistas, la vigencia plena de las paritarias libres, el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, la jubilación para el sector público”, advirtió el sindicalista.
En diálogo con Radio 10, el dirigente también cuestionó que entre los motivos que impulsaron la protesta se encuentre el Impuesto a las Ganancias, que afecta “al seis por ciento” de los trabajadores, mientras “el problema de los trabajadores no registrados”, que alcanza al “34” por ciento, “no lo mencionaron”.
Al respecto, detalló que de ese porcentaje “la mayoría tiene un salario que está por debajo de los 5.000 pesos”.
“El problema es que no se menciona eso como motivo, se menciona como un motivo el mínimo no imponible, que es verdad, es un problema para el 6 por ciento el total de los trabajadores; lo otro, que es un problema para el 35 por ciento, eso no aparece”, cuestionó Yasky.
En este sentido, disparó: “Creo que cuando uno algunas cosas no las menciona es porque las consiente”.
Para el gobierno el paro no tiene sentido
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo que los organizadores del paro que se lleva a cabo hoy en todo el país “pretenden sitiar los grandes centros urbanos” con “un gran piquete nacional y un paro de transporte”, y consideró que los reclamos que se plantean “no tienen el más mínimo sentido” y “no se condicen con la realidad”.
“Esa es una metodología a la vieja usanza del Medioevo. En la Edad Media los señores feudales impedían el acceso a la población. No hay lugar para la barbarie ni para medidas que conspiran contra el libre ejercicio del derecho de huelga de los trabajadores”, dijo Capitanich en su habitual rueda de prensa en Casa de Gobierno.
En este marco, destacó que quien “sale muy fortalecido” de la medida de fuerza es el dirigente gastronómico Luis Barrionuevo, quien -indicó- queda instalado “claramente como un líder opositor del Frente Renovador” y, a su vez, se convierte “en referente de la izquierda, que estaba buscando un nuevo liderazgo”.
En este marco, sostuvo que, incluso, con este posicionamiento, el titular de la CGT Azul y Blanca “ha neutralizado a las figuras emergentes de ese espacio” y, también, “como líder opositor sindical, ha neutralizado claramente a Hugo Moyano y, con esta gran convocatoria a un piquete general del país, se ha convertido en un nuevo líder de la izquierda argentina”.
En cuanto a los reclamos del paro de hoy, Capitanich dijo que “todos los temas” planteados “no tienen el más mínimo sentido” y “no se condicen con la realidad”.
Por su parte, el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, calificó de “extorsivo” el paro impulsado por el sindicalismo opositor y dijo que “es una vergüenza que no se le dé la posibilidad a la gente de elegir de ir a trabajar o no”.
Además, atacó duramente al titular de la CGT Azul y Blanca, al sostener que es “el dirigente sindical emblema del vaciamiento del Estado de la década del ’90” y “no es referente en la Argentina un tipo como Barrionuevo”.
EL LITORAL.
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