Luz y Fuerza definirá el miércoles su plan de lucha en rechazo a la oferta salarial. El gobierno los acusa de engañar a la población: "Quieren que nos hagamos cargo del pago del impuesto a las Ganancias".
/La Capital |
El conflicto entre los trabajadores de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y el gobierno tuvo ayer una fuerte escalada. Tanto que el Sindicato de Luz y Fuerza amenazó con lanzar desde el miércoles un paro por tiempo indeterminado. El gremio denunció que la provincia ofreció al sector una suba salarial del 21 por ciento, por debajo del 30 otorgado a los estatales. El ministro de Servicios Púbicos, Antonio Ciancio, retrucó: "La verdad de la milanesa es que pretenden un aumento mucho mayor. Quieren que nos hagamos cargo del pago del impuesto a las Ganancias".
Los delegados lucifuercistas evaluaron ayer profundizar las medidas de fuerza con un paro por tiempo indeterminado en la EPE desde el miércoles próximo, en rechazo a la última oferta salarial de la gobernación.
La decisión sobre la modalidad del plan de lucha la adoptarán el martes. De concretarse la medida más intransigente, no habrá atención al público en la compañía, aunque las cuadrillas de operarios mantendrán la guardia mínima. Mientras tanto mantienen el trabajo a reglamento.
El malestar del sector surgió en la paritaria a raíz de la oferta de la Casa Gris. En ese sentido, Alfredo Romero, secretario general del gremio denunció: "Pedimos un 30 por ciento de aumento de la masa salarial de todos los trabajadores de la EPE y la empresa nos ha ofrecido un 21 por ciento".
Romero negó que la propuesta salarial recibida sea la misma que la otorgada a los estatales. "Respecto al resto de los empleados públicos, nosotros estamos viviendo una realidad totalmente distinta y el ingeniero (Daniel) Cantalejo lo sabe. Hay que corregir distorsiones de la estructura salarial", indicó.
Al respecto ejemplificó: "En los últimos siete años hubo unos 600 ingresantes, y a la fecha y todavía tienen la categoría inicial. Están cumpliendo funciones por encima de su remuneración salarial".
Ciancio recogió el guante y acusó a los trabajadores de la EPE de brindar "mala información" a la población sobre la medida de fuerza. "La verdad de la milanesa es que pretenden una modificación salarial mucho mayor a lo acordado con los otros gremios estatales", aseguró.
El funcionario remarcó que "los porcentajes son exactamente los mismos que se acordaron con UPCN y ATE. Los empleados de la EPE pretenden que la provincia se haga cargo de la retención del impuesto a las Ganancias.
"Esto es imposible —continuó— tan imposible que es muy difícil de poder acordar. Calculamos en función del 26 por ciento en las escalas más altas, al 30 por ciento en las más bajas, más las dos sumas fijas por enero y febrero una masa salarial de unos 220 millones de pesos".
Para Cantalejo, "el gremio tendrá que recapacitar y decir la verdad de lo que está pasando. Nos gustaría que todos los empleados ganen mucho más y hacemos lo posible, y creo que lo logramos, de estar siempre por encima de los niveles de la inflación".
No hay comentarios:
Publicar un comentario