El prometido refuerzo de Gendarmería Nacional para garantizar la seguridad frente a la inminente largada del rally Dakar (el 5 de enero próximo) comenzó a materializarse ayer en Rosario: una avanzada de efectivos de esa fuerza federal llegó a la ciudad para desplegar patrullajes diarios, entre otras tareas preventivas.
.La Capital |
Los uniformados continuarán desembarcando hoy hasta completar un total de 500, a sumar a los aproximadamente 800 que ya permanecían en la Región II.
A nadie sorprenderá la nueva multiplicación de uniformes verdes en distintos puntos de la ciudad en los próximos días. Es que a principios de diciembre unos 1.500 gendarmes (más 380 efectivos de Prefectura y agentes de la Policía Federal) habían llegado a Rosario como consecuencia de la rebelión de policías provinciales en demanda de una mejora salarial.
Pero, tras permanecer cinco días en la ciudad en función de la disminución de la presencia policial en las calles, las fuerzas federales se retiraron con destino a otras provincias con conflictos similares.
"Los gendarmes comenzaron a llegar hoy (por ayer). Son unos 500, que se sumarán a los cerca de 800 efectivos de esa fuerza que ya estaban en Rosario. Harán patrullajes diarios y permanecerán en la ciudad hasta poco después del rally", afirmó a La Capital el ministro de Seguridad provincial, Raúl Lamberto.
Es ese sentido, los objetivos a controlar son la avenida de Circunvalación, el autódromo (donde en unos días depositarán los vehículos que participarán de la competencia automovilística) y otras zonas de la ciudad.
El funcionario de la administración de Antonio Bonfatti indicó que el arribo de los efectivos de Gendarmería está acompañado de "unidades móviles para su traslado y cuestiones de logística, como también equipos para desarrollar tareas de prevención".
Al tiempo que la protesta policial se sofocaba, tomó cuerpo la decisión de que unos 1.200 gendarmes permanecieran en Rosario antes, durante y después del Dakar.
Finalmente, la aceitada coordinación entre las autoridades nacionales y provinciales durante los días de la rebelión de los policías desembocó en un nuevo refuerzo de personal de Gendarmería.
De hecho, Bonfatti recibió el miércoles un llamado del secretario de Seguridad nacional, Sergio Berni, quien confirmó el nuevo arribo de los gendarmes.
Respecto del rol a desempeñar en el Dakar, la fuerza federal es responsable de la seguridad del despliegue del rally en todo su recorrido, desde el puesto de largada hasta los trayectos por rutas nacionales.
Lo cierto es que la llegada de más gendarmes a la ciudad por el Dakar venía gestionándose hace meses, pero la protesta de los policías aceleró los tiempos.
Llamativamente, durante los cuatro días de crisis policial hubo menos delitos en las calles, según consignaron los taxistas (blancos fijos de robos). Y en Tribunales las jornadas no fueron tan agitadas y en las guardias médicas ingresaron menos heridos.
Es más: el propio abogado que ofició de vocero de los policías, Luis Tomasevich, llegó a decir ante la prensa que, "sin dudas, había bajado el nivel de delitos" durante esas jornadas.
Toma de distancia. Por su parte, Lamberto buscó despegar los nuevos refuerzos de Gendarmería de las medidas dispuestas por el Ministerio de Seguridad de la Nación para ayer y hoy, tras las alertas por posibles saqueos en sintonía con un nuevo aniversario de la caída del gobierno de Fernando de la Rúa (2001).
"En absoluto. Además, la provincia ya tiene activado su plan de contingencia para prevenir delitos organizados (oficiales de la policía pertenecientes a distintas dependencias y gendarmes que ya estaban en la ciudad)", indicó el ministro, que enfatizó que el registro del termómetro social dista de las marcas experimentadas el 27 de noviembre, cuando ocurrieron ataques a supermercados del sur de Rosario y de Villa Gobernador Gálvez.
Al respecto, Lamberto resaltó: "Quedó demostrado que por entonces hubo un firme accionar del ministerio, la policía y la Justicia, que acaba de dictar procesamientos por esos hechos".
El funcionario aludió al procesamiento de 32 personas acusadas de participar en los saqueos cometidos contra el súper chino Hua Ding en Villa Gobernador Gálvez (ver página 4), que se suma al dictado el miércoles a otros 14 partícipes de ese ataque, en su gran mayoría jóvenes.
Según las autoridades provinciales y municipales, los legítimos reclamos de los sectores más vulnerables de la sociedad no estuvieron ligados al vandalismo organizado.
En esa línea, apuntaron a actores vinculados a economías delictivas o a grupos narcos que, al igual que a fines de 2012 pero con menos adhesión, conmovieron días atrás a Rosario y Villa Gobernador Gálvez.
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