Marcelo Tinelli hará numerosos cambios en el Fútbol para Todos. / Télam
Como si todavía estuviera en el patio de su escuela de Bolívar,Marcelo Tinelli cambia figuritas. Sólo que ahora no se obsesiona por tener las del tucumano Albretch, el Gringo Scotta o el Sapo Villar, ídolos de su San Lorenzo cuando él era un infante. En su nuevo rol deproductor general del Fútbol para Todos (FPT), el hombre saca y pone. Limpia la pantalla de mensajes políticos. La desideologiza.
Sale Marcelo Araujo, entra Sebastián Vignolo. Sale Julio Ricardo, entra Diego Latorre. Sale Javier Vicente, el relator militante. Entra Mariano Closs. Sale Alejandro Apo. Entra la figurita difícil, Juan Pablo Varsky. Y todo con ritmo de videoclip, casi sin margen para asimilar los cambios. Así son los tiempos de la tele y de la política.
Nuevo jefe. Todo arrancó el día de Reyes, cuando Tinelli, con el proyecto de AFA TV bajo el brazo, llegó a la Casa Rosada a reunirse con el jefe de Gabinete. No tardó demasiado Jorge Capitanich en cambiar de frente y ponerle la pelota en el pecho: más allá de la movida de AFA TV, la intención de fondo del chaqueño era que el empresario se hiciera cargo de la nueva etapa del FTP. La segunda reunión, el 20 de enero, fue más pública, saludos con Cristina de ocasión y tapas de diarios incluidas. Ahí empezó a quedar clara la letra chica del desembarco de Tinelli.
Uno de los puntos clave del acuerdo pasa por la oxigenación de la pantalla. “Le pidió a Capitanich que le entregara la casa vacía”, cuenta un allegado al Gobierno, en obvia alusión a Araujo –propalador del discurso oficialista en sus relatos– y Julio Ricardo –por una cuestión generacional–, principalmente. Tinelli exigió que los nuevos relatores no estuviesen obligados a portar relato: nada de consignas políticas en medio de un córner. El ícono de ese estilo era Javier Vicente, que ganó amigos y enemigos con frases como “la defensa de Arsenal está unida y organizada”. Vicente, allegado a Gabriel Mariotto, ya no será parte del FPT.
La misma lógica aplicará a los sobreimpresos en pantalla –zócalos, en la jerga de la tele–, que aparecían constantemente durante los partidos con alusiones a programas o campañas del gobierno nacional. Capitanich aceptó que esas menciones se harán sólo antes del partido, en el entretiempo o después. De los dos lados de la negociación coinciden en que no hubo problemas en ponerse de acuerdo: “Coqui sabe que tanto machacar con la propaganda terminaba siendo un búmeran para el Gobierno”, razona un colaborador directo del jefe de Gabinete; “nosotros queremos tener una estética europea, no podemos ensuciar la pantalla con avisos cada dos minutos”, argumentan cerca de Tinelli.
Entusiasmado con su chiche nuevo, el empresario ni siquiera arregló los números, jura su mismo colaborador. “Junta televisión y fútbol, las cosas que más le gustan. Con eso está hecho”, apunta la fuente. En el mejor de los casos, esta unidad de negocio no le aportará ni por asomo lo que puede ganar como conductor de ShowMatch, en el horario central de El Trece.
En ese juego, corrió principalmente por cuenta de Tinelli la elección de las caras y voces centrales del nuevo FPT. Sin que esté confirmado,Juan Pablo Varsky asomaba anoche como el próximo gran nombre en ingresar a las transmisiones. Haría dupla con Mariano Closs, otro que está en negociaciones. La ya confirmada es la de Sebastián Vignolo y Diego Latorre, que además conformarán la pareja central de las transmisiones del Mundial en la TV Pública. Otra dupla será la de Pablo Giralt y Juan José Buscalia. Fernando Pacini, al que Tinelli intentará convencer, decidió hacerse a un costado tras la eyección de sus viejos compañeros.
Socios. Cuando el viernes a las 5 de la tarde empiecen a jugar Estudiantes-Arsenal en el pintoresco Ciudad de La Plata por la primera fecha del torneo Final, la pretendida estética europea dará su primer examen. “Nueva música, estadísticas al momento, mejor definición y más cámaras”, es el menú que publicitan los que trabajan en la puesta en marcha.
El proyecto lleva la firma de Torneos y Competencias (aportará los fierros y el conocimiento en transmisiones) e Ideas Sports, una nueva sociedad repartida en partes iguales. Se tratará de una contratación directa del Estado “por falta de tiempo para hacer una licitación”, aducen. Ideas Sports, al revés de lo que se informó a principios de semana, pertenece enteramente a Tinelli. La productora Torneos camina desde hace años sin Clarín (con quien sí comparte el canal TyC Sports), condición indispensable para que el Gobierno le haga un lugar al lado de Tinelli, el nuevo dueño de la pelota televisiva. El que ahora arma su propio álbum.
Por Andrés Eliceche
Sale Marcelo Araujo, entra Sebastián Vignolo. Sale Julio Ricardo, entra Diego Latorre. Sale Javier Vicente, el relator militante. Entra Mariano Closs. Sale Alejandro Apo. Entra la figurita difícil, Juan Pablo Varsky. Y todo con ritmo de videoclip, casi sin margen para asimilar los cambios. Así son los tiempos de la tele y de la política.
Nuevo jefe. Todo arrancó el día de Reyes, cuando Tinelli, con el proyecto de AFA TV bajo el brazo, llegó a la Casa Rosada a reunirse con el jefe de Gabinete. No tardó demasiado Jorge Capitanich en cambiar de frente y ponerle la pelota en el pecho: más allá de la movida de AFA TV, la intención de fondo del chaqueño era que el empresario se hiciera cargo de la nueva etapa del FTP. La segunda reunión, el 20 de enero, fue más pública, saludos con Cristina de ocasión y tapas de diarios incluidas. Ahí empezó a quedar clara la letra chica del desembarco de Tinelli.
Uno de los puntos clave del acuerdo pasa por la oxigenación de la pantalla. “Le pidió a Capitanich que le entregara la casa vacía”, cuenta un allegado al Gobierno, en obvia alusión a Araujo –propalador del discurso oficialista en sus relatos– y Julio Ricardo –por una cuestión generacional–, principalmente. Tinelli exigió que los nuevos relatores no estuviesen obligados a portar relato: nada de consignas políticas en medio de un córner. El ícono de ese estilo era Javier Vicente, que ganó amigos y enemigos con frases como “la defensa de Arsenal está unida y organizada”. Vicente, allegado a Gabriel Mariotto, ya no será parte del FPT.
La misma lógica aplicará a los sobreimpresos en pantalla –zócalos, en la jerga de la tele–, que aparecían constantemente durante los partidos con alusiones a programas o campañas del gobierno nacional. Capitanich aceptó que esas menciones se harán sólo antes del partido, en el entretiempo o después. De los dos lados de la negociación coinciden en que no hubo problemas en ponerse de acuerdo: “Coqui sabe que tanto machacar con la propaganda terminaba siendo un búmeran para el Gobierno”, razona un colaborador directo del jefe de Gabinete; “nosotros queremos tener una estética europea, no podemos ensuciar la pantalla con avisos cada dos minutos”, argumentan cerca de Tinelli.
Entusiasmado con su chiche nuevo, el empresario ni siquiera arregló los números, jura su mismo colaborador. “Junta televisión y fútbol, las cosas que más le gustan. Con eso está hecho”, apunta la fuente. En el mejor de los casos, esta unidad de negocio no le aportará ni por asomo lo que puede ganar como conductor de ShowMatch, en el horario central de El Trece.
En ese juego, corrió principalmente por cuenta de Tinelli la elección de las caras y voces centrales del nuevo FPT. Sin que esté confirmado,Juan Pablo Varsky asomaba anoche como el próximo gran nombre en ingresar a las transmisiones. Haría dupla con Mariano Closs, otro que está en negociaciones. La ya confirmada es la de Sebastián Vignolo y Diego Latorre, que además conformarán la pareja central de las transmisiones del Mundial en la TV Pública. Otra dupla será la de Pablo Giralt y Juan José Buscalia. Fernando Pacini, al que Tinelli intentará convencer, decidió hacerse a un costado tras la eyección de sus viejos compañeros.
Socios. Cuando el viernes a las 5 de la tarde empiecen a jugar Estudiantes-Arsenal en el pintoresco Ciudad de La Plata por la primera fecha del torneo Final, la pretendida estética europea dará su primer examen. “Nueva música, estadísticas al momento, mejor definición y más cámaras”, es el menú que publicitan los que trabajan en la puesta en marcha.
El proyecto lleva la firma de Torneos y Competencias (aportará los fierros y el conocimiento en transmisiones) e Ideas Sports, una nueva sociedad repartida en partes iguales. Se tratará de una contratación directa del Estado “por falta de tiempo para hacer una licitación”, aducen. Ideas Sports, al revés de lo que se informó a principios de semana, pertenece enteramente a Tinelli. La productora Torneos camina desde hace años sin Clarín (con quien sí comparte el canal TyC Sports), condición indispensable para que el Gobierno le haga un lugar al lado de Tinelli, el nuevo dueño de la pelota televisiva. El que ahora arma su propio álbum.
Por Andrés Eliceche
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