El presidente de la Federación de Centros Tamberos aseguró que dos dirigentes ataron al resto a un acuerdo que llevará el precio de la leche a la baja. Paradójicamente agregó que a diferencia del arreglo de 2008, éste se llevó a cabo de cara a los productores.
“El final no fue el más deseado ni esperado por todos. Ni siquiera en el peor de los casos íbamos a esperar que termine de esta manera”. Con esta frase, el titular de la Federación de Centros Tamberos (Fecet) resumió las sensaciones que quedaron en los productores tamberos luego del histórico reclamo.
Colombero manifestó que en la reunión del jueves 9 después de mucho tiempo estuvieron sentadas en la mesa todas las partes involucradas -producción, industria, estados provinciales y gobierno nacional-, generando el ámbito necesario para que se alcance alguna solución.
“Fue una negociación durísima, donde la industria hizo un balance de hasta dónde podía llegar, que en definitiva fue lo que se terminó acordando. (Sus representantes) Plantearon un panorama muy complicado, donde en principio ni siquiera se podían mantener los precios, y aseguraron que el segundo semestre iba a ser muy difícil, fundamentalmente porque el mercado interno estaba reprimido y en el externo había caído el precio internacional”, indicó.
El dirigente agregó que los productores, durante el encuentro, plantearon la necesidad de recomponer en forma urgente el precio en tranquera de tambo, en función de que el número que todo el mundo conoce -el famoso $1,50- “no cierra” ninguna ecuación económica. “Luego de las exposiciones se pasó a un cuarto intermedio para ver si existía alguna posibilidad para que la industria revea esa situación y mejore lo que había planteado. Volvimos de ese interín y la reunión siguió siendo más de lo mismo”, añadió.
En tanto -explicó Colombero-, las Pymes lácteas (que estuvieron representadas por Pablo Villano), manifestaron que la oferta que hacía el Centro de la Industria Lechera (CIL) iba a ser muy difícil de cumplirla. “Avanzada la reunión, los productores insistimos en conseguir los 15 centavos que veníamos planteando para comenzar a resolver la cuestión, incluso se pensó en algún momento pedirlo en carácter de crédito blando -a tasa preferencial y largo plazo-, pero no hubo resultados positivos”, planteó.
Sorpresa
El presidente de Fecet aseguró que sobre el final de la noche donde nada había cambiado con relación a la oferta planteada, el subsecretario Lechería de la Nación, Arturo Videla, en tono exaltado manifestó que era vergonzoso no llegar a un acuerdo para salir de la coyuntura.
“Durante la reunión también se le planteó a los Estados provinciales la posibilidad de que aporten un subsidio para salir de esta situación. Allí, las provincias de Córdoba y Santa Fe expresaron que no hay recursos para aportar y el Estado nacional aseguró que si iba a poner un dinero, sería después de que se desglose la cadena, en un término de 45 a 60 días”, aseguró.
Colombero expresó que todo lo que se ha dicho de una mejora de 15 centavos “fue mentira, no existió. Lo concreto es que al acuerdo lo firmó un sector muy chico de la producción -en un principio la provincia de Córdoba-. El presidente de Caprolec, Pablo D‘Angelo, antes de rubricar el mismo dijo que por malo que sea lo iban a firmar”, apuntó.
En este sentido, el dirigente agropecuario manifestó que ante la consulta a las bases se definió que era inadmisible firmar ese documento y se decidió de última pasar a un cuarto intermedio y ver qué solución se tomaba. “Allí, vino la sorpresa mayúscula de la noche. Fue cuando un representante de la provincia de Santa Fe, el presidente de Meprolsafe (Mesa de Productores de Leche de la Provincia de Santa Fe), Oscar Poi, expresó que retiraba su gente de los piquetes y adhería al convenio. No dejó margen para ningún tipo de negociación posible, y optamos por retirarnos ante los requerimientos exaltados de Videla para que firmáramos el acuerdo. Acá han pasado dos cosas gravísimas, la primera es que se rompió el frente gremial y lo más importante es que se ha traicionado el mandato de los productores”, argumentó.
Colombero planteó que los dirigentes de la provincia salieron para la reunión con la posición clara, “si había mejora el conflicto termina, si esa mejora es mínima se consulta y si no existe nada también se iba a consultar. Pero dos dirigentes nos ataron a todos. Tomaron la decisión que el martes fue homologada en el Ministerio de Agricultura de la Nación”, sintetizó.
Panorama complicado
Sobre el acuerdo firmado por los tamberos “K”, el titular de Fecet anticipó que los productores deben entender que lo acordado sólo mantiene el precio de la proteína tomando como base mayo de 2012 hasta el mes de diciembre. “Apymel (Asociación de Pyme Lácteas) fue clara y contundente cuando dijo que no podían garantizar o comprometerse a cumplir con esto. El panorama es complicado, ya que seguimos con el precio planchado”, insistió.
Colombero recalcó que sobre los 15 centavos de subsidio que se habló en estos días no existe, al menos en este acuerdo. “En la asamblea que llevamos a cabo el día siguiente, en Rafaela, fuimos claros y contundentes: el conflicto sigue latente. Los bloqueos están suspendidos pero el conflicto continúa. A partir de esta semana, con las herramientas que tengamos, vamos a empezar a trabajar para resolver esta situación tan delicada que vive el sector”, puntualizó.
El dirigente agradeció al Ministerio de la Producción de la provincia el haber facilitado, al menos, el ámbito para comenzar con reuniones y negociaciones. “Somos conscientes de que en el corto plazo el problema se va ir acrecentado porque en definitiva no se solucionó nada. Estará en la inteligencia y prudencia de todas las parte ver cómo vamos a ir avanzando para corregir esta situación. Nosotros teníamos bien en claro el mandato de nuestros productores a la hora de la negociación, pero nos traicionaron, nos fuimos con las manos vacías. Eso es lo más grave”, acotó.
Gustavo Colombero expresó que “todo lo que se ha dicho de una mejora de 15 centavos fue mentira, no existió”.
Expulsiones y viejos recuerdos
Sobre la expulsión de integrantes de la Mesa Nacional, durante la reunión en Rosario, Colombero apuntó que existía la necesidad. en Videla y Socín, de llevarse un acuerdo bueno o malo para mantenerse en el cargo. “Esa es la impresión que se ve desde el sector, por ahí pasaba esa problemática”, especuló.
En cuanto al último pacto que se había realizado con estas características, el dirigente explicó que “la diferencia con aquella vendetta de 2008, pasa porque en ese momento el pacto fue a espalda de los productores. Esta, en cambio, se hizo en frente y de una manera alevosa. Creo que algún integrante de la Mesa de Productores de Leche de Santa Fe, me dio la impresión de que quedó sorprendido con esta medida”, remarcó.
/// el dato
“Una burla”
El vicepresidente de la Unión General de Tamberos (UGT), Guillermo Draletti, cuestionó las negociaciones que llevan adelante sectores de la producción tambera con el gobierno nacional y el Centro de Industrias Lácteas (CIL) por el precio de la leche y disparó: “De continuar esta situación, termina en nuevo conflicto, en otra protesta”. Y coincidió con Colombero al señalar: “El acuerdo al que arribaron es una burla, es muy posible que aún con lo firmado se bajen los precios de la leche llegado octubre. Nosotros no queremos ser partícipes de esto y el gobierno aprovecha la situación para dividir”, aseguró.
/// la clave
“Hay que tener en claro que la mayoría de los representantes de las 14 entidades que integramos la Mesa Nacional de Productores no firmamos este acuerdo y el ministerio de la Producción de la provincia tampoco rubricó el documento”.
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