Tras una gresca a la salida de
un boliche en Villa G. Gálvez, Milton C. El muchacho, de 22 años,
recibió un balazo que le atravesó la cara, le fracturó la mandíbula y le
lesionó la tráquea.
La Capital |
Milton C., uno de los principales animadores de las balaceras que en
los últimos tiempos tienen en vilo a los vecinos del barrio La Tablada y
las villas Manuelita y Del Tanque, fue gravemente herido ayer por la
mañana en un boliche ubicado en el límite de Villa Gobernador Gálvez y
Rosario. El muchacho, de 22 años, recibió un balazo que le atravesó la
cara, le fracturó la mandíbula y le lesionó la tráquea. "Se salvó de
milagro", dijeron fuentes de la investigación. En el mismo episodio
otros dos hombres domiciliados en Villa Gobenador Gálvez resultaron
heridos de bala y fueron internados en grave estado en el hospital Roque
Sáenz Peña. Mientras que una mujer sufrió un fuerte traumatismo de
cráneo.
Sobre el episodio existen dos relatos
bien contrapuestos. El primero, respaldado por media docena de
declaraciones, indicó que aproximadamente a las 6 de la mañana dentro
del boliche se produjo una gresca importante entre tres decenas de
clientes en la que abundaron puñetes y botellazos. Los contendientes
fueron conducidos por personal de seguridad hacia el exterior del local y
en la vereda se escucharon detonaciones de arma de fuego. La otra
versión, surgida de allegados a Milton, indicó que el conflictivo
muchacho salía del baño del boliche cuando uno de los parroquianos le
disparó desde corta distancia. Tampoco se puede descartar que el ataque a
balazos sobre Milton haya desatado la gresca y el posterior desbande en
el boliche.
En el lugar no se encontraron vainas
servidas, lo que podría indicar que el arma utilizada era un revólver,
dijeron los pesquisas. Y abonaron la hipótesis de que el ataque haya
sido en la puerta ya que el boliche está monitoreado por dos cámaras de
vigilancia y cuenta con detectores de metales de arco y manuales.
Víctima y victimario. Milton
quedó internado en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez en
estado reservado y conectado a una máquina que lo ayuda a respirar. Para
la Justicia, personificada en la figura del magistrado de Instrucción
Juan Andrés Donnola, el pibe fue víctima de un ataque a balazos. Si bien
no pesa una orden de captura sobre Milton, hace una semana su domicilio
fue allanado por orden de la jueza de Instrucción Roxana Bernardelli,
quien lo investiga como sospechoso de haber integrado un grupo de
muchachos que baleó a Matías Jesús P., de 16 años, el 27 de abril pasado
en Esmeralda al 3700. El allanamiento dio resultado negativo y Milton
no fue detenido porque no estaba en su residencia. La jueza debe ahora
decidir si ordena su detención, ya que no quedaba claro si el ejecutor
de los disparos había sido el pibe baleado.
"Milton no está formalmente acusado en
ningún homicidio. Lo que pasa es que hay muchos vecinos que hablan con
ustedes (los periodistas) pero a la comisaría y a los tribunales ni se
acercan", aseguró ayer una fuente policial. Y al ser consultada sobre el
crimen de Daniel Caballo Alcaraz, ocurrido el 10 de mayo pasado, dijo:
"Ningún familiar de la víctima se hizo presente para acusar formalmente a
este chico". Otro de los hechos imputados al joven herido fue el ataque
a balazos contra Miguelito G. (un pibe allegado a la familia Alcaraz)
"Ese ataque ni siquiera está denunciado", sostuvo el vocero. Son todos
comentarios que en la calle alimentan la usina de la venganza", explicó
el investigador que trabaja sobre las constantes balaceras en barrio La
Tablada.
En territorio ajeno.
Desde que Checho Alcaraz cayó preso el 18 de mayo último acusado del
homicidio del limpiavidrios Miguel Nicolás Albariño, las calles de La
Tablada y las villas Manuelita y Del tanque habían quedado a merced de
Milton C. Esto a pesar de que el muchacho había tenido en el corto
tiempo algunas balaceras con pesados del barrio Municipal donde supo
reinar Pimpi Caminos.
El viernes por la noche Milton salió
con su novia, una piba de 20 años. Ya en la madrugada del sábado, el
muchacho llegó al boliche "El Elegido" (antes conocido como "El
Límite"), ubicado sobre la colectora de avenida de Circunvalación, entre
San Martín y Filippini, en el límite entre Rosario y Villa Gobernador
Gálvez, frente al barrio Molino Blanco.
Para los policías, es impensable que en
el contexto de constantes conflictos que tiene en la calle, Milton haya
ido sólo con su novia a un territorio tan expuesto como el que ofrece
"El Elegido", un boliche al que asisten muchos de los pibes sin calma de
zona sur y Villa Gobernador Gálvez.
Sobre la vereda quedaron las manchas de
sangre que permitían adivinar el recorrido que habían seguido los
heridos de bala y hasta podía divisarse algún mechón de pelo arrancado.
Los allegados a Milton indicaron que el pibe fue al baño y al salir lo
balearon. Su novia lo vio ya en la vereda con la cara ensangrentada. Lo
trasladaron al Heca y si bien la herida en su rostro no comprometía la
vida, su estado era reservado. Juan Osvaldo F., de 18 años, recibió dos
balazos: uno en la zona lumbar y otra en el costado izquierdo del tórax.
Diego L., de 27 años, sufrió impactos en el tórax y el pie derecho.
Ambos son oriundos de Villa Gobernador Gálvez y siguieron la misma ruta.
Fueron examinados en el Gamen y luego trasladados al Roque Sáenz Peña.
El estado de ambos era al cierre de esta edición grave.
Un lugar difícil. No
fue la primera vez que el nombre de fantasía del boliche en cuestión se
vio salpicado por una balacera con heridos. El domingo 18 de septiembre
pasado, a las 6 de la mañana, se produjo un hecho similar al descripto
en esta crónica. Se produjo un ataque a balazos en el que David Cardozo,
de 25 años, llevó la peor parte ya que un plomo calibre 9 milímetros lo
impactó en el costado izquierdo hiriéndolo de gravedad. En aquella
ocasión la versión oficial habló de una gresca que terminó a balazos en
la calle mientras los allegados a la víctima contaron que el ataque fue
adentro del boliche.
El fin de semana del 14 y 15 de abril
dos cuidacoches fueron baleados en inmediaciones de "El Elegido".
Gustavo G., de 16 años, fue herido el sábado y Juan José A., de 29 años,
un día más tarde.
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