"El Frente Progresista tiene atrasado un debate sobre el respeto a la pluralidad"

Pablo Javkin dijo que "tenemos que trabajar para ganar el 24 de julio".

El diputado provincial Pablo Javkin (CC-ARI, FPCyS) y candidato a diputado nacional por el espacio que lidera Elisa Carrió estuvo anoche en Sin Mordaza TV. "La sociedad se enojó mucho cuando dijimos que el Acuerdo Cívico y Social era difícil de sostener y sin embargo evitamos dividirnos 20 días antes de inscribir las listas porque eso favorece los planes del gobierno", sentenció el legislador.

En primer término, el legislador comentó que estará acompañado por Noelia Chiementín en la lista nacional, sumado a "figuras de otros ámbitos que queremos incorporar a la política porque queremos darle una fuerte impronta en el interior productivo de la provincia".
Consultado por cómo ve el panorama en el Frente Progresista, producto de lo ocurrido tanto a nivel provincial como nacional con la candidatura presidencial de Hermes Binner, el legislador dijo que "algo nos van a tener que reconocer porque cuando en octubre del año pasado planteamos -lo planteó Carrió y trajo mucho costo en ese momento- que el Acuerdo Cívico y Social realmente no tenía condiciones para seguir, en su momento parecía una cuestión rupturista de nuestra parte, y ahora estamos verificando lo que en ese momento todos planteábamos. Un acuerdo político a nivel nacional requiere una solidez mayor y también requiere un modo de construcción política acordado. En el Acuerdo Cívico y Social eso no se estaba dando, en el Congreso no se votaba de la misma manera, había diferencias en los dictámenes de Comisión, había posiciones disímiles y, aún con mucho costo, planteamos que íbamos a terminar trabajando solos a nivel nacional. Y la verdad que la realidad está marcando lo que nosotros planteábamos. Incluso Binner, que parecía que iba a acompañar la fórmula del radicalismo, abre otra candidatura presidencial", opinó.
"Siempre en esto la sociedad decide, pero creo que las cosas requieren tiempo y es difícil armar una conformación presidencial en dos o tres meses", determinó.
-¿Al oficialismo le facilita las cosas que la oposición sea tan heterogénea?
-Creo que lo que es funcional al gobierno, sin lugar a dudas, hacerlo en esta instancia. Insisto, en octubre del año pasado dijimos que preferíamos sincerar la situación en ese momento y no dividir la oposición dos meses antes de la elección. Y ojalá todos hubieran hecho lo mismo, porque si hubiese habido distintas alternativas opositoras con tiempo de trabajo, a lo mejor lográbamos que al tener más ofertas y que el oficialismo reduzca también su caudal. No cabe duda que hacerlo a último momento favorece al oficialismo. La sociedad se enojó mucho cuando dijimos que el Acuerdo Cívico y Social era difícil de sostener y sin embargo es importante remarcar hoy, ocho o nueve meses después, que evitamos lo que había que evitar, que era dividirnos 20 días antes de inscribir las listas o las alianzas, porque eso favorece los planes del gobierno.
-¿Cree que algunas alianzas del socialismo con ciertos sectores de la derecha traen consecuencias internas?
-Me parece que el Frente Progresista tiene atrasado un debate que tiene que ver con la institucionalidad, pero que tiene que ver en términos profundos con el respeto a la pluralidad. Y la pluralidad no puede ser siempre en beneficio de uno. Entonces hay una concepción de que si en Santa Fe hay determinada pluralidad que nos conviene para ganar pero después a nivel nacional todos los que integran ese frente no nos sirven, incluso tratando de usar la misma sigla a nivel nacional pero con otros actores...Uno siempre tiene respeto, la representatividad electoral la da la sociedad, pero en la política hay acciones que después tienen sus consecuencias, sus precios. Me parece que hay que ser muy cuidadosos de la construcción de Santa Fe. Nosotros tenemos una elección a gobernador el 24 de julio y hay que ganar. Y si uno se la pasa atacando a los mismos actores a los que tenemos que tratar de ganarle el 24 de julio, eso puede tener un efecto negativo. Me parece que las victorias electorales deberían tener como consecuencia mesura, actitud y entendimiento, y obviamente no es lo que parece darse en este tiempo.
-¿Está previsto que venga Elisa Carrió a la provincia después de las elecciones generales en Santa Fe?
-Lilita va a venir, ésta es una provincia que nos ha acompañado siempre. La semana que viene voy a empezar a recorrer la provincia, para mi es una buena oportunidad porque en la elección provincial estuve muy encerrado en el departamento Rosario. Santa Fe es una sociedad que tiene mucha libertad para votar, el resultado de la elección provincial mostró mucho de esto. La boleta única fue un vehículo, pero lo que hubo detrás fue la decisión de la gente de usarla. Entonces que nadie crea que es dueño de nada.
-¿Cómo analiza el apoyo que está consiguiendo Miguel del Sel en el territorio santafesino?
-Nadie puede subestimar una elección en la que sacó esa cantidad de votos en la primaria. Yo soy miembro del Frente Progresista y queremos que el frente gane, vamos a tener representación legislativa, tenemos presencia en algunas comunas, pero las construcciones plurales tienen que tener respeto de los dos lados. Nosotros vamos a una interna con el radicalismo en un acuerdo. No pudimos ganar pero hicimos una muy buena elección con la fórmula Barletta-Comi y creo que merecemos un respeto dentro de la pluralidad que es el frente. Pero ojo con subestimar cómo la sociedad ve algunas maniobras de la política, entonces nuestro mayor esfuerzo es apostar a que el Frente Progresista gane. Vamos a trabajar mucho, no le vamos a dar pretextos a nadie. Pero es muy difícil entender que la política nacional es una cosa y la política provincial otra. No se puede pedir que el partido de Carrió acompañe, como hemos hecho en la provincia con nuestros espacios legislativos sosteniendo la gestión del Frente Progresista, y después a nivel nacional apoyar a una cosa totalmente distinta a lo que se quiere. Ahora pasa lo mismo con el radicalismo. Por eso creo que tenemos que trabajar para ganar el 24 de julio, después el frente va a merecer una discusión muy profunda acerca de cómo afronta lo que viene, con otros límites, con cuestiones más compartidas, con institucionalidades, con pluralidades. Sería bueno hacer lo que hacen los uruguayos: hay alternancia de partidos, en los cargos y en las funciones, hay equilibrios, hay una institucionalidad, hay autoridades del propio frente y, sobre todo, hay respeto por la diferencia dentro del frente. Eso es algo que en Santa Fe todavía tenemos que ejercitar.