Y llegó el día…en que se acaban las palabras y los discursos de campaña quedan en el olvido.
Cuando es el turno de hablar de los ciudadanos estadounidenses a través del voto popular. Y ya nada más importa que los fríos números de los comicios.
Y esos ciudadanos norteamericanos decidieron que Donald Trump sea el nuevo Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica.
El candidato republicano ganó las elecciones en Estados Unidos, y superó la cifra de 270 electores propios por lo que se convirtió en el Presidente del gran país del norte.
Por su parte Hillary Clinton, la candidata del partido demócrata aparece como la gran perdedora de la jornada. Sus aspiraciones presidenciales terminaron de momento ya que la mayoría de los estadounidenses le está dando la espalda.
Tal vez sus declaraciones “políticamente correctas” le jugaron en contra, aunque se debe reconocer que una gran parte de la población estadounidense acompaño a la demócrata en las urnas.
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