Foto:Lucas Cejas
Ilustración
Ivana Fux
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En un plenario con más de doscientos dirigentes, los radicales agrupados en NEO, el sector más vinculado al Partido Socialista, marcaron la cancha a sus correligionarios de MAR y Universidad, las líneas internas que decidieron integrar la mesa provincial de Cambiemos.
Durante dos horas en la sede del Comité provincial y con la presencia del vicegobernador Carlos Fascendini, el sector analizó la situación interna derivada del acto que se concretó semanas atrás en Capital Federal junto a funcionarios nacionales, para formalizar un espacio entre referentes santafesinos del PRO y de la UCR.
NEO emitió un documento de cinco puntos en el que, en primer lugar, ratifican su pertenencia al Frente Progresista “en cumplimiento de lo resuelto oportunamente por los cuerpos orgánicos partidarios”, y con la salvedad de que dicha integración “excede los formalismos estatutarios, y se sustenta en una clara identificación con sus postulados ideológicos, objetivos y gestiones de gobierno”.
En Cambiemos, no
En el segundo punto, NEO rechazó la incorporación de la UCR a la Mesa Cambiemos Santa Fe. “La UCR no integra dicha mesa”, advirtieron, y alertaron que una decisión de alianzas como la citada debe establecerse en el marco de una Convención. En tal sentido, “exhortaron” a quienes adoptan posiciones diferentes de las resueltas orgánicamente por el partido, a “aclarar que lo hacen en términos estrictamente individuales, especialmente si esos dirigentes ocupan un lugar en la estructura partidaria, que puede inducir al error a la ciudadanía”. La redacción apunta directamente a Julián Galdeano, que preside la UCR provincial e integra la Mesa de Cambiemos en representación de MAR; y a José Corral, titular de la UCR nacional, que es miembro de la misma mesa por el sector Universidad.
Si ello no se corrige, advirtió el sector, se solicitará al presidente de la Convención provincial que incluya en el temario de la próxima reunión ordinaria la política de alianzas de la UCR de Santa Fe.
Aunque ausente de cualquier escrito o documento, la sensación que predominó ayer fue que más tarde o más temprano, tal como se vienen desencadenando los hechos, es inevitable una ruptura pero no del Frente Progresista, sino de la propia UCR.
Institucionalización
En el tercer punto, NEO aludió a la relación entre las fuerzas que integran la actual coalición gobernante; pidió la “urgente institucionalización del Frente Progresista” y la coordinación de la actividad política en todo el territorio provincial “que evite el deterioro innecesario de la relación entre las fuerzas, jerarquice a los referentes locales y fortalezca a los actores territoriales que mayor inserción tienen en cada departamento y localidad, y por lo tanto, mayores chances le brinden al Frente en futuros procesos electorales”. Al respecto, consideraron que una “actitud diferente a la planteada es funcional a quienes están esperando agazapados para capitalizar nuestras eventuales diferencias”.
Finalmente, expresaron su adhesión y apoyo al proceso de reforma de la Constitución, y volvieron a reclamarle a quienes adopten posturas diferentes de las resueltas orgánicamente, que aclaren que sus posiciones son a título personal. El dardo, otra vez, fue hacia José Corral quien ha señalado públicamente que no es momento para discutir una reforma.
El último punto del documento se refirió a la inseguridad; lo definieron como “uno de los principales problemas” de la provincia, y por lo mismo, consideraron que es “imprescindible una colaboración activa entre los tres poderes del estado y los distintos niveles de gobierno”.
Apoyo a Fascendini
La decisión de convocar a un plenario surgió entre las filas de NEO no sólo por el cimbronazo generado a raíz de la conformación de la Mesa de Cambiemos Santa Fe, sino también por la desautorización de parte de Miguel Lifschitz que sufrió uno de sus principales referentes: el vicegobernador Carlos Fascendini. Fue a propósito de las declaraciones del esperancino cuando sugirió que “la banda de Corral y Barletta” debía dejar los cargos que tienen en la provincia, si ya tenían resuelto jugar en Cambiemos. El gobernador habló entonces (en privado) con Corral, y públicamente, aclaró que no pensaba como Fascendini, quien desairado, decidió no participar el lunes del acto en la Casa Gris para presentar el proceso de reforma de la Constitución.
Ayer, aunque no lo hicieron constar explícitamente en el documento, NEO respaldó al vicegobernador, con la aclaración de que -quizá- no fue demasiado feliz la elección de los vocablos empleados por el vice. Al mismo tiempo, trascendió que Fascendini y Lifschitz compartieron una comida en Rosario para recomponer la relación.
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