Escribe: Dr. Fernando Neuspiller (*)
La Inseminación Artificial con semen de donante (IAD) es una técnica que originalmente se indica en parejas en donde existe un factor masculino de esterilidad irreversible, pero cada vez es más común el uso de dicha técnica en mujeres que deciden, sin tener un factor de esterilidad, ser madres solteras. Por diversos motivos el promedio de edad de las mujeres que deciden ser madres ronda los 38 años de edad. En muchos de estos casos las mujeres no se encuentran en una relación de pareja por lo que no pueden retrasar mucho más la maternidad y toman la decisión de afrontarla en solitario.
La Inseminación Artificial es un procedimiento en el cual luego de una inducción de la ovulación, se introduce una muestra de semen previamente capacitada, es decir preparada en el laboratorio a través de técnicas especializadas, en el interior del útero de la mujer con el fin de incrementar el potencial de los espermatozoides y las posibilidades de fecundación del óvulo. Se la considera un tratamiento de baja complejidad porque no se extraen los óvulos del cuerpo de la mujer sino que se introduce la muestra de semen.
Este tratamiento de Inseminación Artificial se indica en aquellas parejas en las que se constata que la mujer tiene al menos una trompa permeable, que tiene posibilidades de ovular tanto espontáneamente como con inducción de la ovulación y la pareja tiene al menos 3 millones de espermatozoides en la muestra capacitada por ml. En el caso de la IAD, se indica cuando el varón es azoospérmico (ausencia de espermatozoides en el semen), si el varón es portador de alguna enfermedad, en parejas serodiscordantes, madres solteras o parejas de lesbianas. Si la mujer es de edad avanzada, la indicación médica será realizar un tratamiento de alta complejidad como puede ser la Fecundación In Vitro o la Ovodonación.
El tratamiento se puede dividir en 3 etapas:
1. la estimulación ovárica que tiene que realizarse la paciente, consiste en estimular el ovario para que produzca más óvulos que los que produciría de forma natural y su duración oscila entre los 10-12 días.
2. la preparación del semen que puede ser de la pareja o donado, consiste en seleccionar y concentrar los espermatozoides de mejor movilidad.
3. La inseminación propiamente dicha: Ese mismo día se recomienda que la paciente haya tomado líquido previamente para tener la vejiga llena y así facilitar el proceso. Su duración depende de la dificultad del proceso pero por lo general se tarda aproximadamente 15 minutos, en consultorio.
Luego de las primeras 4 inseminaciones, si están bien indicadas, se embaraza aproximadamente el 50% de las pacientes. Médicamente si los ovarios de la mujer están sanos, luego de una inseminación artificial frustrada, se puede realizar un próximo intento en el siguiente ciclo de la mujer.
El 20% de los embarazos obtenidos en IVI Buenos Aires, fueron a través del tratamiento de Inseminación Artificial.
(*) Director de IVI Buenos Aires. Matrícula: 82.815
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