En Barrio Cabal avanza la obra de entubado del canal de Estado de Israel

La obra comprende en su primera etapa tareas de saneamiento, construcción de un conducto de 300 metros, y la realización de una plazoleta en la intersección de Blas Parera y Estado de Israel. El Municipio santafesino invierte en esos trabajos más de 4 millones de pesos. “Es un esfuerzo significativo de la ciudad, que vale la pena porque los vecinos de estos barrios llevan décadas reclamando esta obra; por eso nos animamos a decir que es un día histórico”, afirmó el intendente José Corral.

 Desde el Hipódromo hasta el reservorio, la descarga de los conductos pluviales en calle Estado de Israel era conducida hasta el momento, a través del un canal a cielo abierto. Los vecinos llevaban más de cuarenta años reclamando por el entubado del zanjón, que genera olores nauseabundos, suciedad, y hasta peligro para la circulación de vehículos y personas. A comienzos de julio, la empresa EFE Construcciones, que resultó adjudicataria en la licitación pública realizada por el Municipio, inició los trabajos de la primera etapa de entubado, que ya muestran un avance significativo.

La obra está incluida en el marco del proyecto de desagües del Instituto Nacional del Agua (INA), y demanda una inversión de 4.024.000 pesos, que afronta el Municipio con fondos propios.

Esta mañana, el intendente José Corral observó las tareas que se ejecutan para entubar los primeros 300 metros del canal Estado de Israel, en el tramo que va desde Blas Parera hasta el cruce de calle con B. de Irigoyen. En ese lugar, era incesante el movimiento de las máquinas y operarios, que ya comenzaron a colocar las piezas premoldeadas de hormigón, elaboradas por la propia empresa constructora. A simple vista, pueden observarse las dimensiones del nuevo conducto, que supera la capacidad de conducción de fluidos del viejo zanjón, lo que permitirá un drenaje más rápido hacia el reservorio.

“Insisto en la importancia de estas obras que no se ven, porque una vez terminadas quedan bajo tierra, pero de las que los vecinos saben la importancia que tienen. Esta obra va a cambiar definitivamente el barrio; no sólo por los malos olores y las cuestiones vinculadas a la salud; sino también para dejar de tener los problemas de anegamiento por lluvias, que afectaban a las calles transversales a Estado de Israel”, afirmó José Corral.

En su recorrida, el mandatario estuvo acompañado por la secretaria de Gobierno, Adriana Molina; el secretario de Obras Públicas y Recursos Hídricos del Gobierno de la Ciudad, Roberto Porta; el subsecretario de Planeamiento Hídrico, Felipe Franco; y los coordinadores de Distrito, Guillermo Quiroga y Horacio Centurión; entre otros funcionarios, personal técnico de la empresa, y vecinos de la zona.

Detalles

La obra consiste en la construcción de un conducto de hormigón armado de 2,50 metros de ancho y 1,60 metros de alto. En materia de prevención del riesgo hídrico, los trabajos -que tienen un plazo de 180 días corridos- prevén que la parte superior del conducto de hormigón esté cubierta por césped, y que presente además un diseño que permita retardar el escurrimiento del agua en la superficie en caso de precipitaciones abundantes e intensas.

La obra incluye además la construcción de una plazoleta en la intersección de Blas Parera y Estado de Israel, donde se instalarán bancos, iluminación y senderos peatonales realizados con bloques intertrabados. Los trabajos a realizar se completan con la ejecución de cordón cuneta a lo largo de ese tramo de Estado de Israel, que servirán para un mejor mantenimiento del pavimento.

Respuesta a un reclamo histórico

Después de recorrer la obra, el intendente José Corral afirmó que “es un momento histórico para la ciudad, especialmente para los barrios del Norte, porque hace décadas que los vecinos piden el entubamiento del zanjón de Estado de Israel”. En ese sentido, enumeró las razones sanitarias que justificaban el pedido de los vecinos, y agregó que “este entubado va a permitir que el agua corra mejor y más rápido, porque están bien previstas las pendientes, y tienen una sección suficiente como para que el agua escurra hacia los reservorios”.

En relación con el monto de la inversión, el mandatario dijo que “hay que destacar este esfuerzo municipal, porque las obras de este tamaño usualmente las financian el Estado Nacional o la Provincia; pero nosotros no quisimos esperar más y hemos hecho un esfuerzo con fondos solamente municipales para esta primera etapa de 300 metros, con la idea de continuar luego la obra hasta llegar al reservorio”. Más adelante, insistió en que “se trata de un esfuerzo significativo de la ciudad, que vale la pena porque los vecinos de estos barrios llevan décadas reclamando esta obra; y por eso nos animamos a decir que es un día histórico, cuando vemos estos primeros metros de un conducto que se está haciendo como se debe”.

Por otra parte, José Corral remarcó que “arriba de este conducto va a haber un espacio verde, que va a funcionar como un retardador, que va a permitir retener algo de agua en las lluvias intensas”. Y explicó que “vamos a hacer veredas, conectando con una nueva plaza que ya estamos construyendo en la esquina de avenida Blas Parera y Estado de Israel, que también es un nuevo espacio verde de calidad para toda la ciudad”.

Finalmente, en cuanto a los plazos de ejecución de los trabajos, el Intendente afirmó que “estamos muy contentos porque la obra marcha bien. En estas semanas que pasaron, la empresa que tiene la obra a cargo hizo los premoldeados, que se están trasladando hasta este lugar para colocarlos. Llevamos un mes de obra en marcha, y esperamos que en el transcurso de este año tengamos terminada esta etapa”, concluyó.

Atentos y comprometidos

Mónica Parente vive en barrio Cabal desde que nació, hace 52 años. Junto a otros vecinos de la zona, se acercó esta mañana para dialogar con el Intendente y el personal que conduce la obra, demostrando su interés y compromiso con el avance y continuidad de los trabajos. “Esta obra es un adelanto inmenso para nuestro barrio porque esto tiene cuarenta años de generar problemas con la basura, y enfermedades”, afirmó.

Además, comentó que “el mal olor es permanente, sobre todo en el verano; y no sólo para los que viven sobre calle Estado de Israel, sino también para los que están varias cuadras hacia el Norte. Hay muchos roedores, víboras, y mosquitos que generan enfermedades; también se han caído autos y personas, y se perdieron animales domésticos. En general este zanjón era un atraso para el barrio porque con los problemas que genera, la gente no quiere invertir, ni hacer nada”.