Ocurrió en la tarde del viernes en el norte de la ciudad. Luego de persuadirla, el hombre obligó a la menor a ir hacia un descampado en contra su voluntad. Hubo tocamientos y amenazas para que no cuente nada.
La madre supo por el relato de su hija la situación mortificante que sufrió a manos de un hombre al que reconoció plenamente; la mujer lo denunció, la policía lo atrapó
Evidente estado de shock
Una mujer vio cuando su hija de 12 años regresó de la escuela a su casa casi fuera de sí, y entonces le preguntó una y otra vez qué le había sucedido, hasta que ella no soportó la situación, se largó a llorar y le contó que el padre de un compañero de la escuela le ofreció traerla en su auto particular y las cosas se tornaron muy feas para ella.
Una mujer vio cuando su hija de 12 años regresó de la escuela a su casa casi fuera de sí, y entonces le preguntó una y otra vez qué le había sucedido, hasta que ella no soportó la situación, se largó a llorar y le contó que el padre de un compañero de la escuela le ofreció traerla en su auto particular y las cosas se tornaron muy feas para ella.
La madre de nena de 12 años se armó de paciencia para tratar de saber qué era lo que realmente había ocurrido con su hija, y le hizo saber que se quedará tranquila pero que intentara narrarle todas las circunstancias que atravesó por más difíciles que fueran.
La nena le contó a su madre
La menor tomó fuerzas frente a su madre y le dijo que ella salió de la escuela como todos los días y al regresar hacia la casa, el padre de un compañero, que en algunas oportunidades los había llevado en su auto al colegio, se le aproximó en el vehículo y se ofreció para trasladarla.
La menor tomó fuerzas frente a su madre y le dijo que ella salió de la escuela como todos los días y al regresar hacia la casa, el padre de un compañero, que en algunas oportunidades los había llevado en su auto al colegio, se le aproximó en el vehículo y se ofreció para trasladarla.
La víctima lo reconoció
La menor reconoció al hombre por su identidad, o sea, F. D. S. de 40 años, el tipo de vehículo, color y demás particularidades; y después le dijo a su madre que en contra de su voluntad la había llevado lejos por unos descampados y que hubo tocamientos en distintas partes de su cuerpo.
La menor reconoció al hombre por su identidad, o sea, F. D. S. de 40 años, el tipo de vehículo, color y demás particularidades; y después le dijo a su madre que en contra de su voluntad la había llevado lejos por unos descampados y que hubo tocamientos en distintas partes de su cuerpo.
Calma, prudencia y denuncia
La madre de la niña, con el lógico estupor que le produjo el relato de su hija, pero sin perder los estribos en semejante situación límite, tomó su teléfono celular y se comunicó con el 911, dialogó con el operador que la atendió y le explicó lo mejor que pudo la particular circunstancia que acababa de escuchar.
La madre de la niña, con el lógico estupor que le produjo el relato de su hija, pero sin perder los estribos en semejante situación límite, tomó su teléfono celular y se comunicó con el 911, dialogó con el operador que la atendió y le explicó lo mejor que pudo la particular circunstancia que acababa de escuchar.
Responsabilidad y reflejos
El operador del 911 policial se comunicó con el oficial de servicio de la agrupación Cuerpos de la UR I La Capital, y describió la denuncia de la víctima e información relativa al presunto causante del abuso.
Los vigilantes del comando armaron un operativo en la zona norte de la ciudad, y antes de las 19, arrestaron a F. D. S. de 40 años, imputado de presunta “privación de la libertad, seguida de amenazas y abuso”.
El operador del 911 policial se comunicó con el oficial de servicio de la agrupación Cuerpos de la UR I La Capital, y describió la denuncia de la víctima e información relativa al presunto causante del abuso.
Los vigilantes del comando armaron un operativo en la zona norte de la ciudad, y antes de las 19, arrestaron a F. D. S. de 40 años, imputado de presunta “privación de la libertad, seguida de amenazas y abuso”.
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