Así lo propone, como parte de un
plan de contingencia, un proyecto ingresado en la Legislatura
provincial por parte del diputado Avelino Lago (PyT–FPV).
En los últimos dos meses, los casos de muerte súbita en la ciudad de Santa Fe ocuparon numerosos titulares noticiosos. Como ejemplo,
en un lapso de 23 días, fallecieron de esta manera dos jugadores de
fútbol amateur. Ambos casos ocurrieron con personas menores de 40 años, en medio de un partido en los cuales cayeron desplomados al suelo sin que la asistencia de los paramédicos pudiera reanimarlos.
Ya en febrero de este año, en el Concejo Municipal santafesino, la edila Cristina Quinteros (Encuentro para Santa Fe–UCR–FPCyS) se ocupó del tema al elevar una nota al director ejecutivo del Programa Deportes y Recreación, instando a la concientización sobre los horarios de práctica deportiva en ligas amateurs, regulado por ordenanza 11.652.
La concejala fundó su pedido “en la necesidad de preservar la salud de los deportistas y de los asistentes a los espectáculos deportivos de las altas temperaturas que se registran en la ciudad de Santa Fe en el período comprendido por noviembre y marzo”.
Esta semana, ante la repitencia de casos de muerte súbita, la prevención surge como preocupación también en el ámbito de la Legislatura santafesina. El presidente de la comisión de Salud de la Cámara de Diputados de la provincia, Avelino Lago (PyT-FPV) presentó un proyecto de ley con la intención de crear un plan de contingencia para la detección, prevención y erradicación de factores de riesgo que puedan provocar la muerte súbita.
Como primera aclaración, el legislador señala que “se entiende por muerte súbita la pérdida abrupta de la función cardíaca, que determina la muerte natural, ocurrida en la primera hora, desde el comienzo de los síntomas, en un paciente con enfermedad previa conocida o sin ella, pero en el que el momento y la forma de la muerte son totalmente inesperados”.
En tal sentido, Lago explicó: “El proyecto de ley tiene por objeto establecer como obligatorio por parte de la autoridad de aplicación, la realización de controles a través de exámenes cardiovasculares y aquellos que resulten complementarios”.
Es por ese motivo que en este proyecto se pretende establecer esa exigencia en establecimientos educativos públicos y privados, desde el ingreso escolar, en forma anual y obligatoria, exámenes cardiovasculares y de aptitud física a los alumnos pertenecientes a los distintos niveles.
La institución deberá contar con una ficha de salud del alumno, en la que constará la aptitud física del mismo, y la realización de los exámenes que en el proyecto de ley se dispone. Así también se capacitará a los jóvenes mayores de 14 años en Resucitación Cardiopulmonar (RCP).
La propuesta prevé que el plan se haga extensivo a centros deportivos- recreativos, y todas aquellas instituciones públicas y privadas donde se concurra de manera masiva y que tengan fines sociales, para la realización de actividades físicas, incluyendo la implementación de puestos sanitarios ambulantes de emergencia, habilitados y con el equipamiento adecuado, al menos una vez al año, con el fin de facilitar y garantizar la realización de dichos exámenes.
En el marco de sus fundamentos, Lago enumeró diversos datos: “Estadísticamente a nivel mundial es la primera causa de muerte, siendo que en la Argentina se producen unas 30 mil muertes por año, de las cuales sólo llegan con vida al hospital menos del cinco por ciento, lo que significa 80 muertes por día, tres por hora y una cada 20 minutos.
“La implementación de campañas de concientización en la comunidad, respecto de esta problemática, constituye un elemento significativo como forma de prevención, y redunda en beneficio de la misma”, concluyó el legislador.
Los últimos casos conocidos
Luis Camissi tenía 21 años el 26 de mayo pasado, cuando su corazón no resistió el esfuerzo físico y dejó de latir. Era estudiante de ingeniería química de la UNL y los fines de semana disfrutaba jugar en la liga de Inmaculada. Semanas después la historia se repitió. El 16 de junio, en el predio del Sanatorio Santa Fe, ubicado sobre la ruta Nº 1, fallecía Nicolás Pulvirenti, quien integraba uno de los equipos que competían en la Liga Interprofesional de Santa Fe. Su vida de deportista y como profesional del tenis se truncó en medio del partido. Los paramédicos lo trasladaron en ambulancia hasta un sanatorio privado pero llegó sin signos vitales.
Ya en febrero de este año, en el Concejo Municipal santafesino, la edila Cristina Quinteros (Encuentro para Santa Fe–UCR–FPCyS) se ocupó del tema al elevar una nota al director ejecutivo del Programa Deportes y Recreación, instando a la concientización sobre los horarios de práctica deportiva en ligas amateurs, regulado por ordenanza 11.652.
La concejala fundó su pedido “en la necesidad de preservar la salud de los deportistas y de los asistentes a los espectáculos deportivos de las altas temperaturas que se registran en la ciudad de Santa Fe en el período comprendido por noviembre y marzo”.
Esta semana, ante la repitencia de casos de muerte súbita, la prevención surge como preocupación también en el ámbito de la Legislatura santafesina. El presidente de la comisión de Salud de la Cámara de Diputados de la provincia, Avelino Lago (PyT-FPV) presentó un proyecto de ley con la intención de crear un plan de contingencia para la detección, prevención y erradicación de factores de riesgo que puedan provocar la muerte súbita.
Como primera aclaración, el legislador señala que “se entiende por muerte súbita la pérdida abrupta de la función cardíaca, que determina la muerte natural, ocurrida en la primera hora, desde el comienzo de los síntomas, en un paciente con enfermedad previa conocida o sin ella, pero en el que el momento y la forma de la muerte son totalmente inesperados”.
En tal sentido, Lago explicó: “El proyecto de ley tiene por objeto establecer como obligatorio por parte de la autoridad de aplicación, la realización de controles a través de exámenes cardiovasculares y aquellos que resulten complementarios”.
Es por ese motivo que en este proyecto se pretende establecer esa exigencia en establecimientos educativos públicos y privados, desde el ingreso escolar, en forma anual y obligatoria, exámenes cardiovasculares y de aptitud física a los alumnos pertenecientes a los distintos niveles.
La institución deberá contar con una ficha de salud del alumno, en la que constará la aptitud física del mismo, y la realización de los exámenes que en el proyecto de ley se dispone. Así también se capacitará a los jóvenes mayores de 14 años en Resucitación Cardiopulmonar (RCP).
La propuesta prevé que el plan se haga extensivo a centros deportivos- recreativos, y todas aquellas instituciones públicas y privadas donde se concurra de manera masiva y que tengan fines sociales, para la realización de actividades físicas, incluyendo la implementación de puestos sanitarios ambulantes de emergencia, habilitados y con el equipamiento adecuado, al menos una vez al año, con el fin de facilitar y garantizar la realización de dichos exámenes.
En el marco de sus fundamentos, Lago enumeró diversos datos: “Estadísticamente a nivel mundial es la primera causa de muerte, siendo que en la Argentina se producen unas 30 mil muertes por año, de las cuales sólo llegan con vida al hospital menos del cinco por ciento, lo que significa 80 muertes por día, tres por hora y una cada 20 minutos.
“La implementación de campañas de concientización en la comunidad, respecto de esta problemática, constituye un elemento significativo como forma de prevención, y redunda en beneficio de la misma”, concluyó el legislador.
Los últimos casos conocidos
Luis Camissi tenía 21 años el 26 de mayo pasado, cuando su corazón no resistió el esfuerzo físico y dejó de latir. Era estudiante de ingeniería química de la UNL y los fines de semana disfrutaba jugar en la liga de Inmaculada. Semanas después la historia se repitió. El 16 de junio, en el predio del Sanatorio Santa Fe, ubicado sobre la ruta Nº 1, fallecía Nicolás Pulvirenti, quien integraba uno de los equipos que competían en la Liga Interprofesional de Santa Fe. Su vida de deportista y como profesional del tenis se truncó en medio del partido. Los paramédicos lo trasladaron en ambulancia hasta un sanatorio privado pero llegó sin signos vitales.
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