Si bien la tendencia es mundial, en la Ciudad Capital creció la demanda en el último mes. En las joyerías hay opciones para todos los bolsillos. Hoy una onza del metal precioso está a 1.615 dólares.
Los ahorristas se están volcando a comprar oro, como ocurre en todo el planeta, en forma gradual pero sin dejar de invertir en dólares. Siguiendo la misma línea, en las joyerías de Santa Fe, se notó un repunte de las ventas en el último mes, sobre todo viendo la suba de la onza del metal precioso, pero aclaran que “siempre se vende”. Los expertos aseguran que la compra y venta del metal precioso está atravesando un momento histórico del cual no se tiene un registro similar. El viernes la onza de oro al contado cerró a 1.615 dólares. “Creo que nadie pensó que la onza iba a pasar los 1.500 dólares”, aseguró la dueña de una joyería que por seguridad prefirió mantener su nombre en el anonimato. De todas maneras consideró que no se registraron grandes diferencias en su local: “Se mantienen las ventas y eso ya es bueno”, dijo, pero aclaró que la semana pasada cuando el oro tuvo una suba que le permitió ubicarse en los 1.900 dólares, hubo más consultas. “Es una inversión a largo plazo comprar oro y tal vez también más fácil de guardar”, agregó la comerciante. En otra joyería tradicional de la Peatonal santafesina, por el contrario, aseguró que la tendencia se mantiene. “En estos últimos dos meses se notó la recuperación, pero como somos una casa con una trayectoria en la ciudad, la gente que busca calidad se acerca hasta nosotros por eso siempre hay consultas y ventas”, comentó una de las encargadas de local, haciendo referencia a las transacciones. En ese sentido aclaró que las compras, habituales, no superan los 2.000 pesos que es lo cuesta una buena cadena de oro con dije y anticipó que en esta época del año, las alianzas son las más requeridas y parten desde los 1.200 pesos. Los regalos para bautismos también marcan tendencia y es un recuerdo para todo la vida para el recién nacido. Hay para todos los bolsillos y los gustos. Si bien los clientes “a los que se les muestra los paños más caros” todavía siguen siendo pocos, existen aquellos compradores que realizan un desembolso mayor como una inversión a futuro. Los lingotes y las monedas son las más buscadas. Una barrita del primero de 10 gramos puede rondar los 2.500 pesos; mientras que las segundas, depende del peso y el tipo de metal, pero se las encuentra a 500 pesos en promedio en las joyerías santafesinas. Marcas históricas La semana pasada alcanzó un valor histórico al superar los 1.900 dólares la onza –una onza equivale a 31,104 gramos–, su nivel más alto desde enero de 1980. Esos números impulsan la compra venta del metal. En Santa Fe, esta semana, el gramo de oro se vendía a 300 pesos, aproximadamente. Para hacer una relación más material en cuanto al peso: una alianza pesa entre 1,5 (las más delgadas) y tres gramos. Es decir, para comprar los dos anillos se necesitan entre 900 y 1.800 pesos. Según los joyeros, en los últimos tres años el valor del oro se incrementó casi un ciento por ciento. El gramo pasó de los 160 a 320 pesos en promedio. Para todos los gustos En la ciudad capital opera un buen número de joyerías que tienen opciones para todos los bolsillos. Así como están aquellas que ofrecen piedras preciosas a precios increíbles también están las otras en donde se puede conseguir un importante reloj de reconocida calidad a 300 pesos. En cuanto a las piezas de galantería, aparecen las cadenitas y las pulseras de plata que, al parecer también, sufrieron los desbarajustes del capitalismo. El oro blanco también está ganando terreno y ahora se pueden encontrar piezas que combinan ambos metales y hacen que sea más barata; y además ante los hechos de inseguridad al ser más parecido a un ejemplar de fantasía pasan más inadvertido. A comienzos del siglo XX, la onza se cotizaba a 20 dólares. En los años 60 subió a 30 y después pasó a los 186 dólares en los 70. En los 90 ascendió a 250 hasta el 2000. En 2002 pasó a 320 y en los años subsiguientes a 400 y 650. En el 2007 superó la barrera de los 700 dólares la onza, hasta alcanzar al semana pasada los 1.615 dólares que constituyeron un récord histórico.
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