Antes de emprender el viaje por la ruta se debe someter al vehículo a una revisión general. El valor de los arreglos depende del modelo y del estado del rodado. Lo que hay que tener en cuenta.
Cumplir con este paso puede salir desde $150, si sólo se realiza la revisión, o bien puede demandar un gasto aproximado de $2.200, que incluye el cambio de pastillas de freno y de todas las luces, una batería nueva, dos cubiertas nuevas y la alineación y balanceo de las cuatro, y el cambio de aceites y filtros. Los entendidos destacan que es fundamental revisar el vehículo antes de hacer un viaje largo. Algunos talleres no cobran por esta revisión y en otros hay que pagar entre $150 y $300. Luego el monto a invertir después dependerá del estado general del vehículo.
Uno de los servicios más requeridos en horas previas al viaje es la alineación de la dirección y el balanceo de cubiertas. Si bien realizar esta tarea es fundamental, por sí sola no alcanza para evitar sobresaltos. Es por ello que los especialistas recomiendan optar por un chequeo general, el cual incluye la revisión del tren delantero, del estado de los frenos, del nivel de líquidos y lubricantes,
el estado de las mangueras y la revisación del sistema eléctrico.
Para tener en cuenta
El valor de los arreglos, en el caso de ser necesarios, varía de acuerdo al tipo de vehículo. No obstante, en todos hay ciertos arreglos comunes que se deben realizar antes de viajar.
La alineación y balanceo es el trabajo más común a realizar y puede costar desde $120 a $200. Al realizar este trabajo puede surgir que haya problemas en los frenos, para lo cual el usuario debería invertir entre $150 y $250 para cambiar las pastillas, aunque si también hubiera que arreglar los frenos traseros habría que agregar $400.
“El trabajo completo, en las ruedas de adelante y las traseras, puede salir $1.100 en total”, resumió Daniel Verdini, del taller que lleva su nombre. Esta tarea incluye la colocación de las pastillas, el cambio de discos, la rectificación de campanas y el encintado de los patines. El buen estado de las cubiertas también es fundamental, pues son claves para la seguridad de los ocupantes del rodado.
Desde el Centro de Estudios de Seguridad Vial (CESVI) les recomendaron a los vacacionantes revisar que el dibujo de los neumáticos tenga una profundidad suficiente para que brinde el agarre deseado.
El mínimo es 1,6mm. También se debe chequear que no haya cortaduras y que la goma no esté cuarteada.
Si todo ello no se cumple, hay que pensar en invertir desde $400 por cada cubierta.
En lo que respecta al motor, se debe revisar el estado de las mangueras (una rotura en el medio de la ruta podría aguar las vacaciones) y también de las correas (se recomienda llevar un par de repuesto), además del nivel de aceites y el estado de los filtros. Si hubiera que cambiarlos pues se han cumplido los kilómetros recomendados, se deberá abonar entre $150 y $250.
La parte eléctrica
También es fundamental revisar el sistema eléctrico, ya que alguna falla podría dejar a la familia varada en cualquier sitio. “Lo básico es controlar el circuito de carga, que el alternador esté cargando correctamente, el motor de arranque, el estado de la batería –se recomienda cambiarla si ya cumplió dos años de uso–, la revisación de las luces y su alineación, además del funcionamiento
del electroventilador”, precisó Guillermo Farías, del taller lasherino Tauro.
El especialista recomendó renovar todas las luces del vehículo si ya tienen más de un año. “Es algo que no sale caro y nos puede ahorrar un dolor de cabeza, sobre todo en los controles policiales”, apuntó Farías, y pidió prestar especial atención al alternador, que cargue bien, pues en la ruta se le dará un buen uso por las luces encendidas y el aire acondicionado.
Algunos talleres no cobran la revisión eléctrica, pero en otros hay que pagar entre $100 y $400, en el caso de que se realice un escaneo por computadora.
Revisar el auto antes de partir es un paso fundamental para asegurar un buen viaje, sin mayores sobresaltos.
El gasto que se haga para dejarlo a punto dependerá del bolsillo de cada uno, aunque hay ciertos arreglos o ajustes fundamentales: alineación y balanceo, cubiertas, cambio de aceites y filtros y la revisión del sistema eléctrico.
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