Autor:Mauricio Centurión / Uno Santa Fe - Cansancio. Los vecinos de la zona se mostraron sobrepasados por la situación.
Autor:Mauricio Centurión / Uno Santa Fe Altos. La presencia de los altos pastizales alcanza para cubrir una importante parte de la vereda sobre calle San Jerónimo, Ayacucho y 9 de Julio.
Amontonada. La basura se puede observar en las esquinas de la gran manzana.
A raíz de los reclamos que los vecinos de Barrio Transporte hicieron llegar a Diario UNO, el matutino se acercó a las inmediaciones del club Pucará. La institución está ubicada en el corazón del barrio, sobre calle Regimiento 12 de Infantería.
En los últimos meses la preocupación de los moradores se fue acrecentando por la gran cantidad de maleza que se originó en las inmediaciones, sobre todo en las calles Ayacucho y San Jerónimo, las cuales rodean el club.
A los pastizales que asoman desde la vereda hasta invadir parte de la calle, se debe agregar la gran cantidad de desechos que los vecinos despreocupados en mejorar su calidad de vida, arrojan a diario. Sea cuando se acercan con sus carros como aquellos que en ausencia de testigos dejan su basura para que los animales que deambulan por la zona se entretengan.
Desde la dirigencia del Club Pucará confirmaron a Diario UNO que si bien contrataron gente para que realice las tareas de limpieza en las abyacencias, el trabajo no se pudo concluir como consecuencia de la importante cantidad de basura presente en el lugar.
Además agregaron que estas tareas son de incumbencia municipal y por lo cual ya se mantuvo un diálogo. “Es un problema municipal, ya lo hablamos. Ellos tienen que colaborar en el mantenimiento de la vereda, de la calle y de la zanja”, señalaron desde la institución. Según la misma fuente, en reiteradas ocasiones se elevó el pedido a la Municipalidad para que se procediera a la limpieza de las calles antes mencionadas. Sin embargo, hasta el día de hoy no contaron con ningún tipo de respuesta.
Pedido de los vecinos
En la recorrida que realizó Diario UNO por la zona se constató el mal estado en que se encuentran las inmediaciones del predio deportivo, los yuyales altísimos y basura en las esquinas de la cuadra están a la vista de quien transite por el lugar.
Los vecinos de la cuadra que viven lindando Ayacucho mostraron su descontento por el gran abandono que presenta. “Acá tiran perros muertos, en la esquina hicieron un basural. Y eso que pasa el basurero todos los días”, afirmó Elda Ayala, una mujer que hace 52 años vive sobre Ayacucho. A lo largo de la entrevista, esta mujer señala la puerta de salida de la cancha que utilizan los chicos para buscar la pelota en caso de que se pase de lado. “Ahí hay que tener cuidado porque hay un avispero”, pone sobre aviso Ayala.
Esta vecina se mostró indignada por la falta de limpieza del lugar. “La calle está en pésimo estado, los yuyos a lo mejor los cortan una vez al año. Gente de la zona que no cuida y no sabe vivir en lo limpio es la que deja todo en la calle”, reiteró entre indignada y decepcionada por el estado de abandono que sufre el barrio. “Nunca se vio así la calle, no se si es la Municipalidad o la gente del club la que tiene que cortar”, opinó Norma Romero, quien también habita en el barrio hace más de 52 años.
Una de las preocupaciones de los vecinos es que los yuyales se conviertan en el escondite de los ladrones. Así lo confirmó Estela Maris Sosa, que vive hace 43 años en el barrio. “Los perros desparraman la basura. Trato de mantenerlo limpio pero se hace difícil. Nos gustaría que arreglen y corten estos yuyos, porque ahora con la inseguridad se hace difícil”, agregó Sosa.
“La verdad que no sé si le pertenece al club o a los vecinos, no tengo idea. No cortan nunca los pastos, lo cortan del otro lado, pero por acá no pasan nunca”, agregó Andrés Espíndola. A pesar de la buena voluntad y la paciencia de todos los actores, las respuestas ante la basura presente en el predio y la inmensa cantidad de yuyales que bordean al club, las soluciones no llegan. Tanto los integrantes de la entidad deportiva, como los vecinos del barrio están a la espera de una pronta respuesta.
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