Funciona desde esta semana en el edificio del Instituto de Recuperación del Adolescente, en Saavedra y Cullen, de Rosario. Es un anexo de la Eempa que existe en la Unidad Penitenciaria Nº 3.
La Capital |
"Tengo 16 años y llegué al Irar el domingo. Iba a la secundaria, y quiero continuar la escuela para poder estudiar electricidad y ayudar a mantener a mi familia y a mi sobrina, y así salir adelante”. Las palabras pertenecen a Cristian, alojado en el Instituto de Recuperación de Adolescentes de Rosario (Irar) y desde ahora alumno del anexo de la Eempa Nº 1.311.
La secundaria fue inaugurada la semana pasada por los ministros de Educación, Claudia Balagué, y de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis. Coincidieron en que “se busca garantizar el acceso a la educación secundaria a jóvenes privados de
la libertad”.
la libertad”.
También Sergio G., otro adolescente del Irar y escolta de la bandera, leyó en voz alta sus deseos de “estudiar” además de reconocer “la importancia de que haya un secundario para todos”.
La directora de la Eempa, Claudia Infantino, fue quien acertadamente inscribió el funcionamiento de un secundario dentro del Irar (de Saavedra y Cullen) como un reconocimiento del “derecho a estudiar”. Del acto participaron funcionarios y representantes de distintos organismos del Estado.
Trabajo escolar
Carteles, afiches y banderines de colores artesanales intentaban cambiarle un poco la cara al ingreso, aulas y talleres del Irar. Por cierto una institución donde se hace muy difícil imaginar cómo se puede rehabilitar un adolescente en conflicto con la ley penal. Sencillamente porque es deprimente. Sólo logran sobresalir los trabajos escolares, que denotan mucho cariño docente. Además de un gran mural con fotografías dedicado al escritor rosarino Fabricio Simeoni, fallecido el año pasado.
Carteles, afiches y banderines de colores artesanales intentaban cambiarle un poco la cara al ingreso, aulas y talleres del Irar. Por cierto una institución donde se hace muy difícil imaginar cómo se puede rehabilitar un adolescente en conflicto con la ley penal. Sencillamente porque es deprimente. Sólo logran sobresalir los trabajos escolares, que denotan mucho cariño docente. Además de un gran mural con fotografías dedicado al escritor rosarino Fabricio Simeoni, fallecido el año pasado.
Fabricio era uno de los talleristas del Irar, que cada semana compartía con los jóvenes un espacio de escritura. Y desde el año pasado el salón de usos múltiples del instituto de la zona oeste se llama “Poeta Fabricio Simeoni”.
“Cárcel distinta ”
Antes de los discursos de apertura y en una breve charla con La Capital, el ministro Lewis reconoció que el Irar “es una cárcel distinta”. Al tiempo que repasó que “desde 2008 se trabaja para transformar el régimen de internación hacia el interior” con distintas ofertas.
Antes de los discursos de apertura y en una breve charla con La Capital, el ministro Lewis reconoció que el Irar “es una cárcel distinta”. Al tiempo que repasó que “desde 2008 se trabaja para transformar el régimen de internación hacia el interior” con distintas ofertas.
Mencionó entonces que una de las últimas medidas fue la incorporación de “acompañantes juveniles”, “que estaba dando muy buen resultado”. Además de “refuncionalizar los espacios para hacerlos más dignos y adecuados para el régimen penal juvenil”.
Al momento de los discursos para los presentes, Lewis expresó que la apertura del anexo de la Eempa se inscribía “en el camino de la restitución
de derechos”.
de derechos”.
Por su parte, la titular de la cartera educativa Claudia Balagué repasó algunos ejes de la política educativa provincial, y entre ellos habló de “capacitación docente”, de “la inclusión y calidad” y de una “escuela abierta” que “va a las instituciones”, citando el ejemplo de las escuelas hospitalarias o de las que funcionan en unidades penitenciarias. Al final, y ya en un mensaje más orientados a los destinatarios de este anexo, que asistían al acto les pidió a los adolescentes “un esfuerzo en el estudio” para que cuando salgan lo hagan “con un proyecto de vida”.
El anexo del secundario inaugurado depende de la Eempa Nº 1.311 que funciona en las Unidades Penitenciarias Nº 3 y Nº 5 de Rosario. En el Irar también trabaja la Escuela Primaria Nº 13 y hasta el año pasado estaba el Plan Fines que permitía completar la escuela obligatoria. Actualmente son 30 los alumnos que cursan estudios: 15 en la primaria y 15 en el secundario.
Además se ofrecen una serie de talleres.
Además se ofrecen una serie de talleres.
El cierre que no fueEl Irar es un “instituto de detención de régimen cerrado donde se encuentran alojados jóvenes infractores de la leyes penales que tienen entre 16 y 18 años”. Depende de la Dirección de Justicia Penal Juvenil de la Subsecretaría de Asuntos Penales del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
En 2008, el entonces ministro de Justicia del ex gobernador Hermes Binner, Héctor Superti, anunció que el edificio del Irar sería reemplazado por uno nuevo que comenzaría a construirse en 2009. Nada de eso pasó, y esa promesa inicial se convirtió con el tiempo en una “refuncionalización del instituto” de Saavedra y Cullen.
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