"Traer un tren sanitario a la ciudad de Rosario es como llevar un tren de vino a Mendoza"

El senador provincial Miguel Lifchitz disparó contra el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos. "Rosario es una de las ciudades que tiene uno de los mejores sistemas de salud pública", enfatizó el legislador provincial. Lifschitz dijo que lo que busca Ramos es "desgastar al gobierno de la ciudad, de la provincia y por elevación también a la figura de Hermes Binner".

La Capital | 

El senador provincial Miguel Lifschitz criticó con dureza al secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos, por haber enviado el tren sanitario a la ciudad de Rosario y disparó "hasta ahora al frente de ninguna iniciativa del transporte sino más vale tratando de generar situaciones conflictivas y de enfrentamiento político en la ciudad y en la provincia de Santa Fe, con acciones que son realmente absurdas".

"Lo de Alejandro Ramos es realmente bastante notable tiene una enorme responsabilidad como secretario de Transporte de la Nación y aún no ha encabezad ningún proyecto del área", señaló el ex intendente de Rosario. "La ciudad necesita mayores subsidios para el transporte, que haya un tren metropolitano, esos son los temas de los que debería ocuparse dado el lugar que ocupa en el gobierno nacional", añadió.

Lifschitz señaló con ironía: "Yo lo decía en un twitt el otro día, traer un tren sanitario a Rosario es como llevar un tren de vino a Mendoza, Rosario es una de las ciudades que tiene uno de los mejores sistemas de salud pública de la Argentina" y señaló que su objetivo es "desgatar al gobierno de la ciudad, de la provincia y por elevación también a la figura de Hermes Binner".

"Lo que ocurre es que lamentablemente se termina también afectando a la ciudad en su conjunto, a la provincia en general -agregó-. Estas cuestiones siempre dejan secuelas, como el clavo en la madera, usted puede retirar el clavo pero después alguna marca queda, y me parece que esto es lo más preocupante de este tipo de ataques muchas veces arteros, que se hacen con un objetivo y después terminan siendo bastante complicadas para el conjunto de la sociedad".

Lifschitz reconoció que la inseguridad y la violencia son problemas serios en la ciudad de Rosario. "Desde que estaba en la intendencia veía esta situación con preocupación", admitió el legislador santafesino y advirtió: "Este no es un fenómeno nuevo en Rosario ni en la provincia ni en el país, es una situación compleja que se ha venido incubando a lo largo de más de una década, muchas veces de manera casi inadvertida, silenciosa"

"Creo que no tiene soluciones fáciles, no es un problema de Rosario y ni siquiera de la Argentina, es un problema de toda la América del Sur, de toda la América Central, desde México para abajo los problemas del narcotráfico, con distinta intensidad, es una característica de casi todos los países", añadió el dirigente socialista, quien admitió que "todavía no se acertó en generar políticas de Estado que tengan un amplio consenso político y social y que se lleven adelante de manera sostenida, profesional y con todos los recursos que se requieren".

"Las acciones que está llevando adelante el gobierno de Santa Fe son correctas, trabajando en la reforma del sistema penal, en la reforma del sistema de seguridad y policial, probablemente ninguna de estas medidas sean suficientes si no hay también una estrategia nacional que articule todas las provincias", concluyó Lifschitz.