"Lo volvería a hacer si pasa otra vez". La frase cargada de coraje pertenece al menor de 15 años que en las últimas horas del miércoles abatió a un ladrón e hirió a otro que ingresaron a su casa en Las Heras, Mendoza, y amenazaron de muerte a sus familiares.
En la casa donde habita la familia transcurría un momento especial en la noche del miércoles. En el lugar viven 9 hermanos que estuvieron algunos días a solas ya que sus padres se habían ido a misionar a su país natal, Bolivia, ya que pertenecen a la congregación de evangelistas.
Los progenitores regresaron ayer y toda la familia se reunió en el domicilio. El padre los llevó hasta el comedor y comenzó a mostrarles las imágenes de su viaje que había registrado en un CD, según relataron.
En ese momento, un golpe en la puerta rompió con el ambiente de reencuentro y una banda delictiva ingresó a la propiedad. "Eran siete pero algunos se quedaron esperando afuera en el auto. Estaban todos encapuchados. Los que entraron a la casa estaban todos armados", relató la madre de la familia.
Uno de sus hijos, de 15 años, actuó con rapidez y se dirigió a la pieza donde su padre escondía una pistola calibre 38. "Cuando sentí los ruidos fui a buscar el arma y volví al comedor", narró el protagonista de la historia. En otros tiempos, su padre le había enseñado a utilizarla en casos de emergencia, como el que estaba aconteciendo.
"Cuando volví uno de los ladrones estaba recargando su arma y tenía en la mira a mi papá. Ahí disparé no más, solamente pensé en él. No tiré por tirar, los tenía más o menos calculados", describió el adolescente que estudia en una escuela de Lavalle.
Los ladrones comenzaron a escapar pero también dispararon contra el grupo familiar. Una bala le rozó en la pierna a una de las hijas del matrimonio y otra iba dirigida al pecho del chico de 15 años, aunque la pudo esquivar y terminó impactando en su muñeca derecha. "Estoy tranquilo. Eso les pasa por robar. Lo volvería a hacer", concluyó el muchacho.
Su madre y su hermana aseguraron que la zona se ha tornado muy insegura y que no es la primera vez que son víctimas de un asalto. "Hace tres años entraron y me robaron una vaca con la cual yo alimentaba a mis hijos. Después quisieron volver a robar pero los perros ladraron y se tuvieron que ir", dijo la progenitora.
"Tenemos miedo porque sabemos que son una banda peligrosa. Esperamos que la consigna policial no esté sólo dos días y se vaya", concluyó la hermana.
La investigación
El fiscal departamental Fernando Giunta se encuentra investigando el robo agravado y tiene como principal sospechoso al Chato Castillo, un joven que ingresó herido de bala al Hospital Central minutos después del hecho.
Además se extrajo una compulsa por la muerte del ladrón que quedó en manos del fiscal de menores Gustavo Farmache. El pesquisa judicial ordenó una serie de medidas para que los peritos científicos determinen cómo ocurrió el hecho en El Algarrobal, aunque todo indica que el menor de 15 años actuó en legítima defensa.
De todas formas, al tratarse de un menor ininmputable, se dará intervención al Órgano Administrativo Local (OAL) para que tome medidas tutelares, en caso que corresponda.
Fuente: Diario UNO
No hay comentarios:
Publicar un comentario